¿Y si te digo que te Amo?

Capítulo 20

Basta de estupideces!!!

Era tiempo de re veer en que punto de mi vida estaba parado, era necesario hacer un Gran "Stop" y detener esta caída vertical, vertiginosa y sin sentido hacia un fondo que nunca llegaba...

Así que comencé con un plan, no planificado, improvisando, el cual fue tomando forma de plan con el paso del tiempo, marcando, objetivos sólidos. Comencé a trabajar nuevamente en la construcción con mi papá, me propuse prepararme profesionalmente para poder insertarme en el mercado laboral actual (no quería trabajar mas en la construcción), a pesar que habían pasado nueve años desde que había terminado la secundaria, allá por 1992, a principio de 2001 tomé la decisión de anotarme en la Universidad de la Matanza para hacer el curso de ingreso para la carrera de Ingeniería en Informática, este curso constaba de tres materias, Matemática, Física y Seminario (Programación de Software) el cual había que asistir por tres meses para finalmente rendir los exámenes correspondientes, las suma de los resultados obtenidos de las tres materias rendidas se promediaban dando como resultado final una puntuación, dicha puntuación debía ser mayor a siete para tener posibilidad de ingresar a la universidad, de todas aquellas notas mayores a siete se armaba una especie de ranking y de 1500 personas que se habían anotado para hacer el curso de ingreso solo 300 tendrían la oportunidad de formar parte de la Universidad de la Matanza.

Comencé a trabajar duro para conseguir este objetivo, me levantaba a las 6 de la mañana, me iba a trabajar con mi papá, a las 5 de la tarde me iba para casa, me daba un baño, agarraba mi bicicleta playera negra rodado 26 y me iba a la universidad, que quedaba a unos 7 Kilómetros de casa. Mi jornada de estudio comenzaba a las 7 de la tarde y finalizaba a las 11 de la noche. Tomaba mi bicicleta y volvía 7 kilómetros a casa, llegaba cerca de las 12 de la noche, comía, me bañaba y me iba a dormir cerca de la una y media de la mañana. Al otro día a las 6 de la mañana estaba arriba nuevamente para comenzar mi día, y así se armó una rutina extremadamente exigente, poniendo a prueba mi destreza mental, física y eclosiva.

Cuando la conocí... Simplemente me Enamoré, su frescura, su sonrisa, su alegría, sus besos, sus abrazos, su ingenio... no paraba, no se quedaba quieta ni un minuto, siempre contenta, siempre Feliz.

Ella tenía tan solo tres años, "Malulú" era su nombre, su madre se llamaba Eris y su padre había fallecido cuando ella tenía algunos meses de vida.

Se acercó hacia mi lentamente, su dedo indice de la mano izquierda envuelto por su mano derecha, girándolo de izquierda a derecha, sus mejillas se iban ruborizando tomando un tono rojo intenso, sus ojitos inquietos se movían hacia todas partes y de vez en cuando se detenían para mirar fijos los míos, con una sonrisa cómplice y casi en un susurro me dijo "Papá", me dió un beso y me abrazó de tal forma que parecía que me había estado buscando toda su corta vida y que finalmente me había encontrado. Fue ella, Malulú, quien me dió la oportunidad, de ser papá, un papá de Corazón, no de sangre, no biológico... Un papá de corazón y de alma. Y yo, le brindé la oportunidad de ser mi hija y formamos un Bello y Hermoso Vínculo... Indestructible, un vinculo que con los años nos dió la oportunidad de conocernos mejor, de hacernos mejores personas.

Después de dos exitosos años en la carrera de ingeniería, aprobando y promocionando cuanta materia se cruce en mi camino, me dan la oportunidad de comenzar a hacer una pasantía a través de la Universidad y en la universidad. Una Pasantía es algo así como trabajar en algo relacionado a lo que estas estudiando, quien consigue este trabajo es la universidad, las jornadas laborales son reducidas, entre cuatro y seis horas de trabajo, ya que la prioridad es que el alumno adquiera experiencia en el trabajo pero pueda seguir estudiando y la paga era muy mala, yo diría que alcanzaba solo para solventar los gastos de los estudios. Es así que comienzo a trabajar en esta pasantía la cual consistía en cargar datos en una computadora de una serie de encuesta. Nuestro espacio de trabajo era en los laboratorios de informáticas ubicados en el pabellón A de la universidad de la Matanza, una vez terminada la jornada laboral, me iba al bufete, comía algo y luego me iba a cursar las materias. Con el paso del tiempo, en el laboratorio, se fue formando un lindo grupo de trabajo, ya estaba finalizando el 2004, era un diciembre sofocante, de mucho calor, y ese calor había que combatirlo... y que mejor manera que juntarse con amigos en el bar del frente de la universidad, después de terminar nuestro trabajo a tomar algunas cervezas, charlar un rato y disfrutar del aire acondicionado o en su defecto de la sombra de los árboles donde estaban apostadas mesas y sillas del bar. Juan, mi primo Mariano y Juan Carlos cursaban ingeniería en informática como yo, Julieta, Mariana y Eris cursaban la carrera de Comunicación Social. Todos trabajábamos en el laboratorio haciendo la pasantía, todos nos cruzábamos al bar de enfrente y casi siempre no entrabamos a cursar las Materias, nos quedábamos pasándola bien y divirtiéndonos en grande. En estos momentos de necesaria irresponsabilidad es cuando conozco a Eris y nos ponemos de novio, comenzamos a ser pareja.