Awaken...

Capitulo 2 K-396

Narra Adam.
Luego de levantarme fui a comprobar si alguien estuviese con vida, casualmente encontré a ese "alguien" quien era el hombre que anteriormente había conocido. Solo que ahora su cuerpo estaba destrozado, al parecer fue dañado por la explosión... es extraño que a mí no me hizo nada... Pero eso no era lo importante por el momento, el hombre estaba muy grave, no tenía el brazo izquierdo ni sus dos piernas. Solo era cuestión de tiempo para que muriera...

--Ayúdame... -Dijo débilmente

¿Qué es lo que necesitas? -pregunté

--Encuentra un arma, y traerla... hay que acabar con esto de una vez...

Me dispuse a buscar alguna arma de fuego entre los cadáveres que habían... (Era horroroso, pero no tenía de otra)
... Que mala suerte -pensaba mientras buscaba entre los bolsillos de los cuerpos, tiempo después encontré el objeto...

Al regresar, me sorprendí al ver que aquel amigo ya no estaba en el mismo lugar donde lo dejé, solo había un camino de sangre...

No podia creer cómo era posible que el hombre se había alejado, estando gravemente herido, no podia haber llegado muy lejos...

( empecé a seguir aquel rastro...)

Ya era tiempo... --Se escuchó

- ¿dónde estás?

--Acá en la roca...

Me dirigí y lo encontré... - ¿porque te moviste? ¿qué haces hasta aquí?...

Eso ya no importa... Anda, toma el arma que traes, dispárame en la cabeza y después mátate. Pues ya no habrá quien proteja a la humanidad... Todo se fue al carajo -Comentó

Me quede en shock al escuchar aquello, parecia que aquel tipo no fuese humano pero sabía exactamente lo que ocurrirá al morir...

-No lo haré, yo vengo a detener esto...- empezé a darle ánimos, aunque sabía la situación

--enserio, ¿puedes acercarte un poco?

Me tomó de la chamarra y me arrojó al suelo con la poca fuerza que aún lograba tener...

-Abre los ojos, con la materia Y....
Aquellas criaturas mutarán y mutilarán a los últimos sobrevivientes...

Me levanté tratando de ignorarlo y sin notarlo la píldora azul cayó al suelo...

-- una ¡K-396! -- Se arrastró hacia ella y con su mano trató de alzarla para examinarla...

¿Sabes algo de eso? -Pregunté

--Amigo has salvado mi vida (se tragó la píldora), mi nombre es Alejandro y estaré agradecido contigo...
Después se puso a dormir...

-mi única pista y te la acabas de comer

El hombre o más bien Alejandro, se había comido mi única pista, pero viéndolo de otra manera él sabía lo que era y lo que hacía...

Esperé un momento y lo que paso después fue algo extraño e increíble, súper y genial...

El pecho de Alejandro comenzó a brillar de un color azul, luego se extendió por su cuerpo, cuando la luz llegó hasta sus partes heridas aquella luz empezó a regenerarlos. Pude observar cómo construía el hueso, después con las venas y arterias, continuó con el sistema nervioso, luego con los músculos y finalmente terminó con los tejidos de la piel. Al finalizar pareciera como si no hubiese tenido una lesión... Quedé maravillado, emocionado y asqueado que vomité un poco en la esquina

Tiempo después llevé a Alejandro a un lugar seguro, pues si nos quedábamos seríamos blanco fácil para las criaturas...
Para nuestra suerte encontré un remolque de tráiler, estaba de cabeza pero serviría para ocultarnos un rato...