eighteen.

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                                               Niall entra a su oficina cansado —después de todo, haberle dicho a Cassie que hoy sería la boda de Liam y Zayn no había sido una buena idea. Están corriendo por todos lados en busca de las cosas que Liam cree necesarias para la boda, pidiendo comida para el banquete, un par de flores que tuvieron que ir a recoger del invernadero casi al final de la base y un músico que tocara la marcha nupcial y para la recepción. En ocasiones, Niall había pensado que esas tradiciones se acabarían por la guerra... obviamente, está más que equivocado. Cada vez aparecen más, como el Día Negro, y son más complicadas que las anteriores.

Al levantar la vista, moviendo la cabeza de un lado a otro y haciendo sonar un par de huesos en el proceso, se encuentra con Cassie. Está sentada con los pies sobre la mesa de su oficina, vestida de negro, los brazos cruzados y lo mira como si estuviera acusándolo de haber iniciado la guerra.

"Lo sabía." Ella empieza antes de que Niall tenga oportunidad para decirle algo o incluso fruncir el ceño. Cassie baja los pies del escritorio y se inclina, tomando una carpeta con un nombre escrito en ella, que Niall no puede ver bien desde la distancia. Pero no debe se nada nuevo, ella se ve molesta. "Maldita sea, estuvo escondido todo este tiempo. ¿Sabes la cantidad de cosas que podríamos haber hecho si los demás supieran de lo que es capaz de hacer? ¡Podríamos haber detenido esta maldita guerra! Niall, por Dios. ¿Cómo pudiste hacerlo?"

Niall se acerca al escritorio curioso por saber qué es lo que tiene tan molesta a Cassie, para reclamarle luego su falta de respeto al entrar a su oficina sin que él se lo hubiese permitido. Tomando de manera brusca el expediente que cuelga entre las manos de Cassie, se coloca las gafas que lleva en el bolsillo de su abrigo y lo mira de cerca. El nombre de Harry está grabado en él y Niall cierra los ojos, llevándose el dedo índice y el pulgar al puente de su nariz, pasando a llevar sus lentes y respira profundamente. Porque si no lo hace, estaría a punto de sacar su arma y dispararle a Cassie por intrusa, por meterse en cosas que no son de su incumbencia.

"¿Cómo fue que entraste?" Es lo que Niall dice en cambio, la ira quemándole la garganta. "Estaba bajo llave. Todo en esta maldita oficina está bajo llave."

Cassie le da una mirada incrédula, como si no creyera que está más preocupado por cómo entró, que por la información que acaba de descubrir. Niall quiere arrancarle los ojos en el proceso.

"Por Dios, Niall. La seguridad de tu oficina es un asco. Abrí fácilmente la puerta con un clip y un imán. Ahora," ella se inclina hacia adelante, el ceño fruncido en su cara pálida. "¿Te das cuenta el tipo de información que tienes en tus manos? Es grande. ¿Por qué no le has dicho al consejo de Harry?"

"Esto es información clasificada," Niall responde entre dientes, doblando un poco el expediente de Harry en el proceso. "Por lo que, no es de tu incumbencia."

"¿No lo es?" Cassie bufa, con desdén. Inclinándose más y más en la mesa, dándole un toque amenazador. "¡Incluso aunque no lo sea, este chico puede hacer cosas que podrían beneficiarnos!"

"Harry está bajo mi protección." Es todo lo que dice Niall, manteniendo su mandíbula tensa y su postura firme.

"No me importa, no es justo que lo tengas aquí mientras los demás mueren," se detiene, mirándolo con determinación mientras suspira y sueltas las siguientes palabras con pesar, como si le doliera el alma decirlas. "Le diré al consejo," Cassie dice, ignorando por completo su expresión llena de ira. "No puedes guardarte esto para siempre."

El líder de la base se queda quieto donde está, mirando a Cassie como si fuera una broma de mal gusto. No es posible que, primero: llegara sin avisar. Segundo: se metiera en su oficina de manera ilegal y, tercero: estuviera a punto de decirle al consejo información que había tratado de mantener lejos de las manos equivocadas por tanto, tanto tiempo. Por un lado, podría matarla ahí mismo para evitar que filtrara la información y clamar después que fue por cuestiones de seguridad nacional, por otro lado, Louis lo mataría si no lo hace. A Niall no le quedan muchas opciones y está corto de tiempo y de ideas.

Drop the game. [Larry Stylinson] [AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora