Diana • H.S {Libro 1}

"Yo soy un ángel" (Anteúltimo Capítulo)

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Perdón por el retraso de tantos días. Tengo que decir que fue culpa de algo llamado 'Depresión-Post-Concierto-De-One-Direction" :P

Por suerte ya pasó y espero que todos los que leen disfruten de esta novela que está a un capítulo de terminar.

Gracias por leer ♥

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Día 65:

No fue hace mucho tiempo la ultima vez en la que pasó todo un día encerrada entre las cuatro paredes de su habitación, acostada, mirando al techo, pensando en una infinidad de tonterías que sólo la empujaban hacia un lugar: la muerte. Fue aquella vez en la que, por primera vez siguió a sus sentimientos, y caminó directo a las vías del tren esperando por ese final. Sin embargo allí estuvo él, rodeándola con sus fuertes brazos, protegiéndola de todo mal, salvando su vida por primera vez. Hoy Diana únicamente pensaba en lo en vano que fue salvarla si después de todo, terminó siendo él quien volvió a matarla en vida con sus actos. Cuán irónica fue la vida al cruzar su camino con alguien que estuviera dispuesto a salvarla, con la intención de ser él quien fuera a hundirla en lo más profundo del dolor. Ni la más fuerte depresión. Ni el tren más veloz. Ni la crisis nerviosa más potente. Solamente Harry siendo cruel para que su mundo se derrumbe por completo y su cuerpo caiga al vacío sin intenciones de sobrevivir. Caminó sin prestarle mucha atención al lugar, sin si quiera ver por donde iban sus rápidos y cortos pasos. Necesitaba estar a solas intentando procesar la información. Intentando no pensar en él, pero ¿Cómo borrar de tus pensamientos a la persona que más feliz y miserable te ha hecho en tu vida? porque aunque eso sonara contradictorio, Diana no tenia dudas de que había encontrado a la persona que más la había hecho sufrir pero al mismo tiempo la que mas razones de vivir le había dado. Harry era ese lado agridulce de su vida y eso lo hacía inolvidable. Su apresurado andar era ciego, era como caminar hacia la nada, sin destino pero con la certeza de querer olvidar todo por un rato.  Se detuvo por inercia en una esquina, pero no se dedicó a prestarle atención a los automóviles, por esa razón cruzó hacia la otra acera sin percatarse de que uno de ellos venía a máxima velocidad, listo para chocar contra su frágil cuerpo. Y esta era la parte de la historia que Diana prefería olvidar, esa en donde una situación límite aparecía y él salvaba su vida incansablemente. La mágica y sorpresiva presencia de Harry la rodeó entre sus brazos, empujándola hacia la seguridad del suelo, lejos de las feroces ruedas del auto. Ambos cayeron golpeando sus cuerpos contra el cemento. Sus miradas volvieron a cruzarse como en aquella primera vez en la que él la salvó de ese monstruoso tren a toda marcha, pero con la intensidad de aquel primer beso.

— ¿Por qué te empeñas en querer salvarme?— Se apartó de él con un empujón.

— Al principio por obligación, hoy por amor.

— ¡Basta! — gritó y se levantó del suelo, comenzó a caminar otra vez hacia la nada. Harry siguió sus pasos. — Te dije que no quería volver a verte hasta que tuvieras una explicación.

— Y la tengo. Lo juro.

Se detuvo y volteó a mirarlo. 

— Te escucho.

— Necesito que vengas conmigo.

— No necesitas llevarme a ningún lado para decirme la verdad.

Diana retomó su camino. Realmente no tenia intenciones de seguir jugando este juego en donde Harry siempre ganaba, en donde él siempre lograba convencerla de lo fantástica que era la vida y lo importante que era estar juntos, para después hacer trizas todo eso que construía con palabras bonitas. Ya no más de esa ingenua que creía en finales felices porque este no era precisamente uno de esos. Sin embargo la persistencia de Harry era aún más fuerte que cualquiera de sus pensamientos. La tomó del brazo dispuesto a que detenga su apresurado andar.