"Tres metros bajo tierra"

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La luz del sol brilla y calienta el día aunque las personas que están alrededor del féretro que está a minutos de ser enterrado a tres metros bajo tierra no parecen notarlo, por supuesto para quien es agradable enterrar a su hija, sobrina, nieta, amiga o novia.

Al menos no me están enterrando en una mañana lluviosa y gris, al parecer el cielo está feliz de recibirme  ante sus puertas, si tan solo supiera que eso no va a suceder.

-<< ¿Por qué piensas eso?>>- una voz sonó en mi cabeza, como la misma que sonó cuando había muerto aquella noche en la carretera.

-¿Qué?- dije en voz baja, no se me ocurrió otra cosa que decir

-<< Ve más allá de toda la gente, hacia los arboles>>- escuche  la voz resonando en mi cabeza una vez más.

Mire hacia los árboles, y si definitivamente había alguien ahí, Un chico delgado y alto con su cabello rubio como el sol que brillaba hoy, fui acercándome más a él y pude verlo más detalladamente, sus ojos de un verde exótico, su nariz fina y detallada, su piel parecía de porcelana, sus labios eran gruesos para una boca tan pequeña aunque eran muy rosados, todo él era muy guapo, de hecho nunca había visto una belleza tan sorprendente.

-¿Quién eres tú?- le pregunte, el solo clavo su mirada en mí y pude escuchar una angelical voz, una voz que casi dolía al escucharla- soy tu guía-. Y me dio una gran sonrisa torcida.

-Mi guí…- no pude terminar la frase debido al grito desgarrador que la castaña dio al ver como el féretro donde su hija está metida estaba siendo enterrado.

-¡NO!, mi hija no, ¿Dios mío por que ella? ¿Por qué mi hija?- las preguntas que hacia mi madre me calaban en el pecho, preguntas que jamás se le podrán contestar, preguntas que nunca entenderá; fui hasta donde estaba ella tirada en la tierra húmeda detenida por mi padre que lloraba en un silencio profundo y por el pelinegro alto y delgado que solía ser mi novio, digo solía ¿por que quien podría mantener una relación con una muerta?

Al tener a las tres personas más importantes de mi vida tiradas en la tierra, llorando desconsoladamente me partía el alma o lo que la conformaba, simplemente daría todo, absolutamente todo para que me dieran un día más para despedirme.

-¿Realmente darías todo solo por un día más de vida?- me pregunto el rubio leyendo mis pensamientos

Voltee lentamente a él, lo mire fijamente y conteste con toda seguridad- Daria todo-.

Se que es muy corto pero la escuela es un problema :/ prometo que para el siguiente sera largo :3 GRACIAS por leer es hermoso ver que lo han leido muchas personas :D SALUDOS .///. 

&quot;Siempre te amare&quot;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora