The Last Chance

Valiente

1O. Valiente

—Liam—susurró Louis mientras intentaba buscar la mirada del castaño.

—Liam—insistió, era su mejor amigo y nunca lo había visto así. A pesar de que Louis quería ayudarlo, apenas se acercó Liam se corrió y se secó las lágrimas.

—No soy un cobarde—soltó de pronto. —Pero tampoco soy masoquista, no puedo estar allí, cuando pase… ¿Entiendes? —dijo. Louis asintió.

—Liam, estoy seguro de que ambos están confundidos—comentó Louis. —Zayn ha estado actuando raro y todos sabemos eso, yo creo que deberían tomarse un tiempo para aclararse ciertas cosas.

Liam asintió y abrazó a Louis mientras le daba las gracias.

***

—¡Solo es una comida con los chicos en casa de Harry, hace mucho que no nos vemos! —habló Zayn mientras abría la puerta.

—Sí, lo sé, mi amor. Sé que íbamos a comer hoy, pero eso podemos hacerlo mañana—dejó las bolsas sobre el sillón.

—Mi amor, tranquila—le pidió a su novia del otro lado del teléfono, Perrie sonaba muy enojada. —Te prometo que mañana sin falta saldremos—le aseguró.

Perrie aceptó ese plan pero le juró que cuando regresara a su casa iban a tener una conversación seria acerca de su accionar.

—¿De qué quieres hablar? Estamos bien, nos vamos a casar, Perrie—aclaró Zayn.

Liam salió de la cocina a recoger las bolsas del supermercado que Zayn había dejado en el sillón de la sala y lo vio en el teléfono. El intercambio de miradas por parte del castaño fue rápido en cambio Zayn se detuvo a mirarlo y sus expresiones cambiaron, dejó de prestar atención a las palabras de su novia.

Liam tomó las bolsas y Zayn volvió su atención al teléfono.

—Linda, te digo que—le cortó. Miró el celular incrédulo.

—¡MIERDA! —maldijo.

—¿Qué pasó allí?—preguntó Harry mientras tomaba la comida y metía en la heladera.

—Zayn tiene otra pelea con Perrie por teléfono—comentó Liam mientras miraba de reojo a Louis.

—Todavía no entiendo qué pasó, estaban tan enamorados y ahora no hacen más que pelear—se apenó Harry. —Espero que Zayn no esté metiendo la pata, no creo que Perrie sea una de esas chicas que se pone histérica cuando se acerca el día de la boda.

—Creo que no deberíamos hablar de eso—dijo Louis.

—Yo creo que sí deberíamos, si no lo hacemos creo que Zayn se va a quedar plantado en el altar—se preocupó el rizado.

—Debemos dejar que ellos mismos arreglen sus problemas—dijo Louis.

Todos se volvieron a callar cuando Zayn entró en la cocina, luego de haber intentado volver a comunicarse con Perrie y fallar muchas veces.

—Tranquilos, no tienen que callarse cuando entro, sé que estaban hablando de mi—habló. —Y no es necesario que me pregunten porque no tengo ganas de hablar de eso. —aclaró.

—Bien, como digas, pero solo nos preocupamos por ti—habló Harry.

Los cuatro se sentaron en la mesa, pronto vendría Niall con la bebida.

—Ya basta—le susurró Louis al oído del rizado.

—Niall llegará pronto con las bebidas—informó Liam mientras miraba el mensaje que el rubio le había enviado.