"Mientras no despiertes a la bestia, no te hará daño"
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—Bieber no es lo que parece — repetía una y otra vez mientras Justin daba vueltas alrededor de su sala, tocándose el mentón.
Después de aquella escena que Justin vio, entró furioso al sótano y tomo fuertemente a Mike de su cabello oscuro, jalándolo con todas sus fuerzas hacía afuera de la habitación, llevándolo al piso de arriba. Mike solo trataba de zafarse de su agarre pero la fuerza de Justin era impresionante.
—Te vi —volteó a verlo bruscamente —te vi consolando a mi pequeña Chloe. El único que puede acercarse a ella soy yo, joder.
—Me dijiste que curara de sus huesos y eso era la único que estaba haciendo —Mike trataba de sonar tranquilo —jamás pondría los ojos en tu chica.
—Esposa —corrigió acercándose a él —mi esposa.
—Vale, tu esposa —contestó, poniendo los ojos en blanco —ella está muy mal Bieber.
—Ella esta mejor que nunca —sonrió de lado —es feliz a mi lado. Yo cuido de ella.
Mike suspiró.
Sabía que nunca podría ganar una discusión con Justin, él siempre tendría la razón con sus ≪inválidos≫ argumentos.
Nunca te atrevas a llevarle la contraria a la bestia, o terminarás torturado o tal vez muerto.
—Ella esta muy herida, la maltratas y la haces sufrir. ¿Eso es lo que quieres para tu esposa? —preguntó tratando de llevar sus manos a los hombros de Justin pero esté se movió inmediatamente.
—Lárgate —contestó fríamente.
—Bieb... —intentó decir pero fue interrumpido por un fuerte grito.
—¡Que te largues de mi casa, cabrón! —gritó empujando a Mike del pecho, haciendo que cayera de espaldas sobre el carísimo mármol del suelo.
Mike se quedo quieto por unos segundos, y después se levantó de ahí.
En verdad que él apreciaba demasiado a Justin. No tenía más amigos, solo lo tenía él, y a pesar de todo, lo aceptaba con sus defectos. Sabía que Justin no tenía a nadie en su vida, solo se tenían el uno para el otro.
Años atrás, cuando lo conoció en la universidad, y se dio cuenta que su amigo estaba muy mal mentalmente, lo único que quería era ayudarlo, así que había decidido salirse de la carrera de Medicina para estudiar Psicología y poder salvar a Justin de sus trastornos. Pero cuando Mike se lo comentó, este se puso histérico, justificando que él no estaba loco y trató de asesinarlo.
Mike tuvo que aceptar que Justin no tenía remedio, su enfermedad no tenía cura, y tenía que sobrevivir con ello. Así que permaneció estudiando Medicina, ya que si no podía ayudar a su mejor amigo, al menos podría ayudar a los enfermos.
