[ 25 ] ~ Misterio

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NARRA NISHINOYA YUU


Estaba celoso. Estaba celoso porque podía ver como el coqueteaba e intentaba impresionarla con sus palabras. Estaba celoso porque ella le seguía el juego. Estaba celoso porque ella es tan inocente y buena que no se da cuenta. Pero realmente estaba celoso de que se abra tan fácilmente a alguien que recién conoce cuando a nosotros nos estuvo rechazando por días. Y mi impulso a decírselo era muy fuerte pero estaba seguro de que mis palabras iban a lastimarla. Yo se que ella está volviendo a ser abierta con todos, lo esta intentando. Está permitiendo que las personas se preocupen y entren en su vida, y eso debería de ponerme muy feliz.

ー  No es nada. En verdad lamento mi comportamiento.

Dio un suspiro y se acercó a mi encerrando mi cuerpo entre sus brazos, dando por cerrado el caso.

ー  Te quiero, Yuu.

Susurró en mi oído y me estremecí. Correspondí su abrazo y me deje llevar. Despegué mi cara de su hombro para poder ver sus ojos y ella me miró algo confusa. Volví a acercarme lo suficiente para rozar sus labios con los míos. Pude sentir su rubor, me era muy tierno y gracioso. Estar ahí para mi era la gloria. Para mi sorpresa fue ella la que capturo mis labios de una manera fugaz. No pude evitar sonreír ante ese acto. Luego de unos segundos a causa de la falta de aire nos separamos y ella me abrazó más fuerte.

ー   Te quiero aún más, Ellie.


La noche ya había caído y era hora de irme a casa. Odiaba tanto decirle adiós. Y esa sonrisa que siempre me regalaba, rogaba que jamás se perdiera.

ー  ¿Cómo estuvo tu día, Yuu?

Preguntó mi alegre madre una vez que me oyó entrar.

ー   Muy bien. ー  besé su mejilla ー  Entrenamos muy duro y Akaashi nos compró helados a todos.

ー  ¿A todos? ー asentí ー  Pobre, habrá gastado mucho dinero.

ー   Si, pero nosotros le estamos preparando un regalo especial, se le olvidará por completo eso.

ー  Que bueno.


Luego de la cena, le envié un mensaje de texto para desearle unas buenas noches pero no respondió, ya era casi medianoche así que supuse que ya se había dormido. A la mañana siguiente pase por su casa para ir juntos al instituto pero nadie respondía al llamado de la puerta. Era muy extraño. Opte por llamarla al celular, tal vez se había quedado dormida, pero me daba que estaba apagado. Mayormente cuando ella no respondía, su madre lo hacía, pero esta vez aparentemente no había rastro de ninguna de las dos. Comencé a preocuparme.

Di la vuelta manzana para encaminarme hacia la escuela y me encontré con Ryoka abandonando su casa. No estaba de humor para lidiar con su cara bonita y conversaciones fantásticas, así que aceleré mi paso tratando de huir de su agarre.

ー  Buenos días, Nishinoya.

¡Rayos!

ー   Buenos días, Ryoka.

Salude con mi mejor cara y este ladeo la cabeza mirándome confuso.

ー   ¿Akaashi no va a clases hoy?

¿En serio sus primeras palabras eran respecto a ella? No un "¿Cómo has estado?" o "¿Has dormido bien?"

ー  No estaba en casa.

Me di la vuelta para seguir mi camino sin darle importancia. Y así fue todo el viaje, él caminando unos metros detrás de mí en silencio. Un irritable silencio.

Llegamos al instituto y como aún faltaban unos diez minutos para el comienzo de clases, fui hasta el aula de mi amigo Tanaka a ver si sabía algo de ella o si la había visto por el edificio.

  No la he visto aún. Ya estaría llegando tarde. Cosa que no me sorprendería.

Carcajeo en tono de burla, pero a mi no me dio la mínima gracia. Realmente estaba preocupado.

Oye, ー  me sacó de mi trance ー  Quédate tranquilo, estará bien.

Asentí no muy seguro, tenía un mal presentimiento.

(...)

No uno, ni dos; ya van tres días en los que no hay rastros de Ellie ni de su madre. Ella no ha aparecido ni en el Instituto ni en las prácticas del voleibol. Nadie sabía nada. Hasta sus amigos Kateno y Keishi estaban igual que yo. Su celular seguía dando apagado, su casa parecía abandonada. Estaba a punto de hacer una cadena nacional televisiva en busca de su paradero.

Cuarto día. Me encontraba corriendo por los pasillos a primer hora rogando llegar a su salón y verla por fin, pero algo captó mi atención. Pasando frente a la puerta del subdirector, un señor alto y canoso salía de esta. Juraba haberlo visto alguna vez ¿pero cuando? ¿donde lo había visto? La respuesta salió caminando detrás de ese señor.

ー  ¡AKAASHI!

Grité lanzándome a él, tomándolo eufórico del cuello de su remera y este me miro sorprendido.

ー   ¿¡Donde esta Ellie!?

Su cara de sorpresa cambio a una de pena y eso fue un baldazo de agua fría para mi.

¿Qué hacía él en Miyagi? ¿Por que me dedicó esa mirada? Su silencio solo me quebraba mas y mas haciendo que mi mente deduzca cualquier cosa.



~  ~  ~  ~  ~   ~

Solo voy a decir: ¡ CHAN ! ¿Que pasó?

Volver A Empezar | Haikyū! (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora