Chanyeol:
Jongin y yo nos fuimos de viaje de universidad en 2006 a Liverpool, con un grupo organizado. ¿Por qué? Porque ojalá yo hubiera nacido para ir a ver un concierto de Los Beatles, son prácticamente mis héroes. En mi habitación del campus tenía un póster del gran Ringo, sin duda el genio de la batería de su época. Todo el mundo sabe que Los Beatles se formaron allí, en la gran ciudad del submarino amarillo. Por eso le supliqué a Jongin poder ir cuando termináramos el último año de universidad.
Nada más llegar me volví loco, aquello era prácticamente mi paraíso, incluso si no había aprendido nunca bien a hablar inglés, solo sabía cantar toda la discografía de aquel cuarteto. Lo primero que hicimos fue ir a los lugares de interés, como el Albert Dock, la catedral, el Pier Head, las casas de Lennon y McCartney, y por supuesto, La Caverna de Los Beatles. Mi sueño desde que era pequeño era ir allí y disfrutar de la buena música de artistas que ahora rememoraban mis temas favoritos.
Cuando entramos sonaba Hello, Goodbye, y mi sonrisa se ensanchó mucho más. Miré a Jongin y se echó a reír, él también era un bohemio como yo. En seguida conseguimos dos perfectos taburetes en la barra,y nos dimos la vuelta mirando hacia el escenario. Pedimos unas bebidas, eran apenas las ocho de la tarde. Cuando nos quisimos dar cuenta llevábamos cinco horas allí metidos, y ya era de madrugada, pero nosotros seguíamos bebiendo.
Comenzó Penny Lane y yo estaba más avispado que de costumbre cuando bebía. Justo en ese momento divisé al otro extremo de la barra a un chico de pelo claro con una cazadora vaquera, llevando el pulso con la mano y acompañado con una sonrisa. Era claramente coreano, me sonaba haberlo visto en el avión. Su aire desenfadado y alegre me cautivó por unos instantes, y sin poder controlarme, me levanté para hablarle.
"¿Qué haces?" soltó entonces Jongin a mi lado.
"Voy a hablar con ese chico" sonreí. "Quizá quiera estar con nosotros, parece que no tiene con quién beber."
Y sin que pudiera detenerme, anduve con zancadas grandes hasta su sitio y me posicioné a su lado. Apoyé mi brazo en la barra y bajé mi mirada con una mueca en forma de sonrisa. Luego lo miré, él seguía concentrado en la música. Entonces aclaré mi garganta y me dispuse a hablar.
"Es triste no poder compartir un momento tan especial con nadie más, ¿no te parece?"
El chico me miró sorprendido y en seguida sonrió asintiendo.
"Penny Lane es una de mis canciones favoritas" anunció mientras comenzaba a tararearla.
Mis ojos debieron chispear ante aquella voz, era sin duda maravillosa. Sonreí todo lo que pude mientras volvía a acomodarme en mi sitio.
"Soy Park Chanyeol, he venido con mi amigo Jongin de viaje de último curso."
"Byun Baekhyun, un placer" sonrió este cogiéndome la mano para estrecharla efusivamente.
Eso último me sacó una pequeña carcajada, porque aquel pequeño no solo estaba ebrio, sino que se notaba que necesitaba hablar con alguien. Y en efecto, nos sentamos al lado de Jongin y no paró de hablar toda la noche. Por mí no hubo ningún problema, su voz cada vez me iba cautivando más y más, sin embargo Jongin sí que quería seguir oyendo los temas, y no le dejamos en toda la noche. Nos fuimos cuando comenzaba a sonar Starting Over, riendo y cantando por las calles de Liverpool. Baekhyun estaba tan animado que se subió varias veces a las farolas para bailar mientras cantaba. Jongin reía y yo aplaudía mientras lo miraba sonriendo.
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Dada || Kaisoo ✔
FanfictionUn asesinato, una desaparición y una denuncia por malos tratos. Esos son los casos recientes que tienen que atender tanto el psiquiatra Kim Jongin como el jefe de policía Park Chanyeol y su equipo. Sin embargo, ¿cómo lidiar con que sea Byun Baekhyun...