Dada || Kaisoo ✔

II

Jongin pasó esa noche en casa de Chanyeol y Baekhyun. Se encargó de regar las plantas, limpiar un poco y reponer la nevera con las cosas que le había dicho Chanyeol que comprara con su dinero. No era más solitario que estar en su casa sin tener nada que hacer. Observó cada una de las fotografías que tenía la pareja adornando la casa y sonrió inconscientemente. Echaba de menos a Baekhyun, y rogaba porque apareciese cuanto antes.

No es que Jongin fuera un hombre solitario, sino que sabía apreciar la calma y los momentos de concentración cuando no había nadie más a su alrededor. No se atrevió a dormir en la cama de sus amigos, cogió una manta y durmió en el sofá. Hacía un poco de frío, por lo que se tuvo que poner sus calcetines a mitad de la noche, desvelado por completo.

A la mañana siguiente, desayunó lo menos posible para no abusar de la nevera de su amigo, se duchó y fue directo al trabajo. Se había llevado otro traje para no tener que ponerse el del día anterior, sería muy incómodo. Cuando entró, pasó por la oficina de Junmyeon a dejar algunos documentos que necesitaban ser revisados.

"No traes buena cara" advirtió su nuevo compañero. "¿Has dormido mal?"

"Me sigue atormentando el hecho de dormir en la cama de Chanyeol y Baekhyun, así que he dormido como he podido, ya ves..." suspiró nervioso mientras sacaba un chicle de nicotina, se le había olvidado tomarlo nada más salir de casa.

"Por suerte esperemos encontrar al señor Byun pronto... Chanyeol me está pasando todos los avances, y yo creo que sacaré nuevos análisis y pruebas pronto sobre las pistas. Las he mandado al laboratorio hace unas horas."

"¿Habéis encontrado algo?" habló sorprendido.

"Por desgracia, no mucho, pero no perdemos la esperanza. Mira a Chanyeol" se giró para señalarlo, tirado en su silla como un perro abandonado. "Si nosotros no tenemos, él no la tendrá nunca."

Jongin asintió, suspirando, mientras revisaba las carpetas que le iba entregando a Junmyeon. Minseok salió de su puesto y le palmeó la espalda a este con un café en la otra mano, uniéndose a la conversación.

"Jongin, hace un rato ha venido ese chaval, Sehun, a que le pusieras el sello de la sesión anterior, estaba esperándote en el despacho."

Él abrió los ojos como platos y miró a su compañero asustado.

"¡¿Qué has dicho?! ¡Minseok, Do Kyungsoo tiene hoy cita conmigo a primera, no me digas que ha entrado con ese lunático en la habitación!"

No esperó para oír la respuesta de su amigo, salió disparado olvidándose el maletín en la mesa de Junmyeon y corrió a toda prisa, rezando porque su paciente no hubiera llegado aún.

Cuando abrió la puerta, quiso romper cosas. Kyungsoo se encontraba sonriendo, arrodillado ante el joven Oh mientras le desabrochaba la bragueta y soltaba una pequeña risa. Bueno, pensó Jongin, al menos había llegado a tiempo.

"¿Qué significa esto?" soltó dando un portazo, haciendo que Sehun saliera del trance y se apartase corriendo de Kyungsoo.

"¡Doctor! Gracias a Dios que está aquí" habló, recomponiéndose. "He venido a que me selle el papel de las sesiones, y él... bueno..."

"Por él no te preocupes, Sehun" lo cortó. "Ahora merecerá su castigo."

"¿Me vas a castigar?" soltó el otro con sorna.

Ante la mirada de desaprobación de Jongin, sonrió aún más mientras veía cómo se le hinchaban las venas del cuello. Sehun le extendió aquel papel al doctor, que lo selló, y se dio la vuelta para salir por la puerta. Bajó la cabeza, evitando mirar a Kyungsoo, que aún tenía esa sonrisa divertida en la cara. Cuando se quedaron los dos solos, Jongin dio un golpe en la mesa.