Tengo que ir a buscarlo

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Tommy y Lila se quedaron el silencio por un rato, hasta que la chica rompió el silencio.

 -Tommy... yo... lo siento.-

-No... no te preocupes Lila.- Tommy la interrumpio y se puso una chamarra de cuero negro. Obviamente tenía que hacer un cambio de planes para el día.

Lila observó a su amigo y lo miró intrigada. -¿A dónde vas Tommy?-

Tommy la miró con una cara seria, algo que no era muy típico de su personalidad. -Tengo que ir a ver a mi madre, debe estar sufriendo. Puedes venir si quieres Lila.-

Lila lo pensó por un momento, la situación no le gustaba pero si podía estar cerca de la persona que amaba y podría tener la oportunidad de darle algo de consuelo, bien para ella valdría la pena. 

-Claro Tommy.-

Tommy le dio una ligera sonrisa y salió acompañado por Lila, cerrando la puerta de su apartamento con llaves. El camino a la casa de sus padres fue en silencio, Lila de vez en cuando le dirigía una mirada a Tommy, pero este no dejaba su cara sería por nada del mundo, ya que por mas que lo intentaba no podía quitarse de su cabeza el hecho de que su padre había desaparecido.

Más tarde...

Tommy se sentía algo raro, no veía a sus padres hace algún tiempo y no pudo evitar sentir algo de nostalgia cuando llego a la casa donde vivio su infancia y adolescencia. Tocó la puerta, la cual fue abierta por su madre Tristana. Se veía casi tan agravada como lo estaba Tommy, y cuando ella vio a su hijo corrió a abrazarlo al instante.

-Mamá...- Dijo Tommy de forma callada, casi susurrando.

-Hijo...- Ella lo apretó más fuerte que él.

Cuando se separaron, Tommy trató de mantener la calma. -Mamá ¿Q-Que paso?-

Tristana trató de aguantar las lagrimas y habló. -Tu padre... salió en una misión al norte y... d-desapareció...- Fue todo lo que pudo decir antes de que la pena le impidiera hablar.

Lila se le acerco y le puso una mano en el hombro mientras la miraba de forma cuidadosa. -L-lo siento Tristana.-

Tristana la miró y trato de calmarse un poco. -Gracias Lila.-

Mientras tanto Tommy comenzó a pensar, se puso la mano en la barbilla y enterró su mirada en el suelo. -Mmm... no puede ser, mi viejo no pudo haber desaparecido así como así, se que es algo veterano pero aún es un buen explorador, algo tuvo que haberle pasado para que esto sucediera.-

Tristana pudo notar a su hijo y le entraron las dudas. -¿Tommy? ¿Que vas a hacer?-

El guerrillero miró a su madre en silencio por un rato y luego suspiro. -Yo... voy a ir a buscarlo.-

Tristana y Lila se sorprendieron y gritaron -¡¿Qué?!- al mismo tiempo que estaban completamente boquiabiertas.

La artillera se acercó a su hijo y lo miró con el ceño fruncido. -No Tommy! No lo harás! No te lo voy a permitir!-

Lila la apoyó. -Si Tommy, ni siquiera sabes donde esta ¿A dónde vas a ir?-

Tommy lo pensó por un instante. -Yo... bueno... no lo se, pero maldición! Lo buscare por toda Valoran si es necesario!

La artillera yordle sentía que estaba a punto de sufrir un infarto. -Hijo...-

-Mamá...- Tommy se le acerco y le puso sus brazos en sus hombros. -Se que no quieres que me arriesgue, pero tal vez mi padre este sufriendo y necesite mi ayuda. Tengo que encontrarlo.- Su madre lentamente comenzó a sollozar y Tommy la abrazó. -Mamá, mira te prometo que no volveré aquí sin mi padre. Te lo juro...-

Su madre vio la determinación en su rostro y suspiro de forma pesada. -Bien Tommy. Supongo que no podré detenerte de todos modos. Solo te pido, por favor, te pido que tengas mucho cuidado. Ya perdí a tu padre, no quiero perderte a ti también.-

Tommy sabía que estaba haciendo algo que podría cambiar su vida para siempre, ya que dejaría una vida tranquila como guerrillero en la Ciudad de Bandle para viajar en una travesía por todo Valoran buscando a su padre, sabía que habría varios peligros pero a él no le importaba, además tal vez podría ser divertido, ya que no había amenazas en Bandle hace mucho tiempo y el estaba "tan aburrido que un surfista boliviano."

Más tarde en ese mismo día...

Tommy estaba en su departamento tomando una copa de cerveza y la dejó en la mesa mientras pensaba. -Si quiero ir a buscar a mi viejo, necesitaré algunas armas. Hmmm... tal vez algo de veneno de Kumungu sería útil.-

Tomó su mochila, un machete y su fiel pistola de 9mm. La jungla era un lugar peligroso y él debía estar preparado para cualquier cosa...

Más tarde, casi por la medianoche...

Tommy iba caminando con una linterna por la peligrosa Selva de Kumungu, necesitaba buscar las plantas para hacer veneno para sus hongos explosivos tal como su padre lo hacía y le enseñó. Cuando encontró las plantas tomó un gran puñado y las echó a su mochila. Parecía que todo había terminado de forma fácil y rápida...

Pero siempre que algo es fácil, es muy bueno para ser cierto...

Tommy escuchó un ruido proveniente de la izquierda y sacó su pistola, apuntó con una mano sosteniendo la pistola y la otra la linterna, sabía que algo o alguien lo estaba siguiendo y seguramente era alguien peligroso.

-Muy bien! Sal de ahí antes de que te llene tus putos intestinos de plomo!- Tommy observó como unos arbustos se movieron y algo pareció saltar de allí. Era una especie de león que estaba con una armadura, llevaba un peinado de rastas y tenía cuchillas bastante largas. Era bastante rápido y una segura amenaza para el guerrillero.

El "león" apareció frente a Tommy de un salto y dijo. -Criatura inferior...-

Tommy estaba sorprendido, nunca había visto algo o a alguien así. -¿Quién carajos eres tú?-

-Soy Rengar, el mejor cazador del mundo! Y tu estas en mi territorio... yordle!- Dijo él con orgullo

-Pues... déjame decirte algo Rengar, para ser un cazador tienes muy mal estilo para peinarte así, pareces una mezcla entre Bob Marley y un gato. Supongo que cazar estilos no es lo tuyo francamente.- Tommy habló de forma sarcástica y se rio mientras seguía apuntando al Orgullo Acechante.

-Muy gracioso, veamos de que estas hecho.- Rengar saco sus armas y comenzó a correr hacia Tommy.

-Okey Pelusa, aquí vamos!- Tommy sacó su machete de su mochila. -Menos mal que trajé esto conmigo...- Él se quedó quieto esperando a que Rengar diera el primer golpe.

Alguien caerá y el otro vivirá...

¿Quién vivirá?

Tommy: el Guerrillero de BandleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora