La buena acción del forastero

184 20 28
                                    

-A ver si te entendí Sarah. Quieres que te ayude a que acabes con Gangplank de nuevo?- Tommy iba caminando junto a Miss Fortune respirando por la boca, ya que el olor del pescado, el agua de mar y el ron hacían que respirar por la nariz fuera una tortura. Pero lo peor de todo eran los piratas de los alrededores que seguramente nunca habían escuchado del invento conocido como "desodorante", todos los olores mezclados hicieron que la nariz de Tommy quisiera suicidarse.

-Pobrecillo, es obvio que no sales mucho.- Miss Fortune rotó los ojos al verlo toser de forma exagerada.

-Bueno, digamos que mi nariz no se ha acostumbrado mucho al olor de la mierda marítima.- Respondió Tommy.

-Tu solo sígueme, tenemos que planear el ataque contra Gangplank.- 

-Vale vale.- Tommy siguió observando el entorno del litoral de Aguasturbias, le recordó a una ciudad que salía en una película de piratas que vio una vez en el cine, no recordaba el nombre, excepto que salía un barco llamado el "Perla Negra", el guerrillero encogió los hombros y siguió a la cazarrecompensas. 

En ese momento Tommy y Miss Fortune escucharon el gritó de una mujer y miraron para ver como un gran pirata le estaba arrebatando una bolsa de oro, el hijo de la mujer se había escondido asustado detrás de su madre.

-Es todo lo que tengo! Por favor no te lo lleves!- Rogó la mujer.

-Bien ¿Qué tal otra cosa entonces?- El pirata lamió sus labios llenos de cicatrices y se acercó, lo que hizo que la mujer comenzara a gritar y el niño a llorar.

Tommy había escuchado suficiente y decidio ir a ayudar a la mujer.

-Tommy! Eso no es asunto tuyo!- Miss Fortune intentó advertirle, pero suspiró al ver como su amigo yordle ya estaba corriendo hacia el pirata.

-Suficiente! Déjala que se vaya!- El tipo se dio la vuelta al escuchar el grito del desconocido y se dio la vuelta, pero su miraba bajo al ver que era un yordle. Tommy le llegaba hasta la cintura por lo que el pirata puso a reír mientras observaba a su diminuto oponente.

-¿Que va a hacerme a mi un enano como tu?- El pirata empujó a Tommy. El pequeño guerrillero sabia que pelear a lo loco sería una opción incorrecta, por lo que debería usar la cabeza.

-¿Que tal si resolvemos esto como machos de verdad?- Preguntó el yordle.

-¿Que tienes en mente?- Dijo el pirata.

Tommy sacó sus dos pistolas y le dio una al pirata.

-Vamos a estar de espaldas el uno al otro, luego contaremos hasta diez y daremos un paso por cada numero, cuando lleguemos al diez, nos daremos la vuelta con nuestras pistolas y abriremos fuego, si ganas, te llevas lo que tenía la mujer, si pierdes... bueno, ya sabes lo que te pasa si pierdes.- Tommy explicó todo esto con un ligero ceño fruncido en su rostro.

-Esta bien enano!- El pirata gritó lleno de confianza.

La gente presente se hizo a un lado para que el duelo entre el yordle y el pirata pudiera tomar lugar.

-Sarah? Podrías hacernos el favor?- Tommy miró a Miss Fortune y esta asintió mientras el guerrillero posicionaba su espalda contra las piernas del pirata, ya que no le llegaba a la espalda.

Miss Fortune tomó una pequeña bocanada de aire. -Empiecen!-

-Uno.- Dijeron ambos.

-Dos.- Volvieron a decir al unísono.

Una vez que ambos llegaron al "nueve", el pirata trató de hacer trampa y dispararle antes a Tommy, sin embargo lo único que escucho fue un "click" de la pistola que tenía en sus manos.

-Sabía que harías trampa.- Tommy sonrió de forma confiada.

-No tiene balas! Tu hiciste trampa!- El pirata protesto, sin embargo no se dio cuenta de algo...

-DIEZ!- Tommy gritó antes de girarse rápidamente y dispararle un tiro certero que atravesó el pecho y el corazón del pirata.

-Ya sabes lo que dicen...- Tommy se acercó a su asombrado oponente.

-La fortuna no le sonríe a los necios.- El guerrillero empujó al pirata con un dedo, haciéndolo caer de espaldas al suelo, antes de reclamar su otra pistola. -Imbécil...-

Tommy no tuvo mucho tiempo para reaccionar ya que sintió que la mujer a la que había ayudado lo había tomado para abrazarlo.

-Muchas gracias!- Dijo la mujer apretando al yordle en sus brazos.

-De nada.- Dijo Tommy cuando finalmente la mujer lo había soltado, y se guardó sus pistolas.

-No es mucho pero... tenga.- La mujer le ofreció la bolsa de oro que el pirata había tratado de quitarle hace unos momentos.

-Oh no, no puedo aceptarla, usted la necesita mas que yo.- Luego de eso, Tommy observó que en el cadáver del pirata había una bolsa de oro bastante grande, y el guerrillero fue a tomarla. -De hecho, tenga.- El yordle le entregó la bolsa de oro del pirata a la mujer.

-Muchas gracias! Que los dioses lo bendigan!- Dijo la mujer mientras tomaba el oro.

-Señor! Cuando sea grande, quiero enfretarme a tipos malos como lo hace usted!- El hijo de la mujer se dirigió a Tommy.

-Estoy seguro de que lo harás bien cuando crezcas, pero por ahora, deja que los adultos se encarguen.- Tommy vio que el niño era de su tamaño y le dio una pequeña bolsa de oro que llevaba escondida el pirata en sus pantalones. -Bueno, hora de volver con Sarah.- Tommy volvió al lado de Miss Fortune.

-Supongo que encontraste problemas por ti mismo verdad?- Preguntó Miss Fortune.

-Hasta yo mismo se cuando una situación es injusta, además, el pirata salía en ese cartel de "SE BUSCA" que esta colgado allí, recuérdame ir a cobrar la recompensa.- Tommy señaló el cartel.

-Me gusta tu estilo.- Miss Fortune se rio.

-Me lo han dicho varias veces Sarah, pero por ahora sigamos con este fic de bajo presupuesto.- Ambos siguieron su camino para poder planear el ataque contra Gangplank.

Tommy: el Guerrillero de BandleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora