LA BODA DE SOFI

¿¡¿¡Michelle Morgado!?!? - 3

           

Unas horas después, me desperté con un monumental dolor de cabeza y el cuello contracturado definitivamente dormir en el mueble, nunca más. Tenía mucha ganas de llorar a las 5pm partiría a Cuba, sola, triste, estresada y vería a mi hermana casarse en la boda que yo siempre soñé para mí.

Así que decidí levantarme del sofá e iniciar todos los preparativos para salir de viaje, no sé porque creo que hice algo ayer en la noche, seguro algo sin importancia, quien me manda a emborracharme. Bueno, me metí a la ducha cuando de repente escuche mi teléfono seguramente era mi madre para torturarme, no me preocupe en contestar y seguí duchándome.

Cuando salí de la ducha, tome mi ropa interior y sonreí mirándome en el espejo de verdad se me veía muy bien el color negro de la lencería fina que tenía puesta. Recuerdo que Mani y Dinah me animaron a comprar esta lencería que costaba más que mi propia ropa, igual me convencieron diciendo que debería ser sexy y estar preparada para el sexo de mis futuras citas obviamente sexo que nunca llego.

En fin me dispuse arreglar mi ropa en las maletas y decidí escuchar el mensaje que se quedó grabado mientras me bañaba. Y sucedió... una voz ronquita pero muy femenina empezó hablar:

XX: Hola Camila, soy Michelle Morgado siento no haberte devuelto la llamada inmediatamente pero si recibí tus mensajes...bueno... los 17 en realidad. Mira, sé que estas nerviosa y lo entiendo, pero para esto me pagan para aliviarte de ese estrés. Mira, voy retrasada pero ya compre el boleto de avión on-line en primera clase como me pediste en uno de tus mensajes, hagamos algo, cualquier gasto adicional lo voy anotando y al final hacemos la cuenta en el pago de mis honorarios. Y Camila, por favor, ya no te preocupes más, tu ex-novio se arrepentirá de haberte dejado y tu familia creerá que estamos profundamente enamoradas, créeme. Nos vemos en el aeropuerto. No veo la hora de conocerte.

Termino el mensaje y me quede viendo al teléfono en completo estado de shock y de repente vino a mi mente todo lo que paso desde la llamada a Allison hasta los mensajes que le deje a...

-QUEEEEEEE!?!?!?!?!??!? MICHELLE, COMPRE EL BOLETO, HONORARIOS, PROFUNDAMENTE ENAMORADAS, CONOCERME?!?!?!?!?!????????!?!?!?!?!???!?!?!

Ay no, no, no, nooooooo que hiciste Camila Cabello!!!  Pero qué diablos?!?!?!? Encima de abandonada por el novio, de 28 años y me volví lesbiana!!!! Dios mío! Quien me manda a llamar borracha!!! Ya sé!!! La llamare, le explicare y cancelare todo.

-DEMONIOSSS!!! Va a la casilla de voz, no puedo más!!! Cálmate Camila, tranquila es simplemente una broma del destino. PERO PORQUE NO PUEDO REIR!!!

Insistí unas 48 veces más pero el celular estaba apagado. Ya sé! Cuando la vea en el aeropuerto le diré que fue un claro error de borrachera le pagare por el día perdido y me voy patéticamente sola. Si esto es lo más sensato que pensé. Siempre con la verdad por delante.....si, si, si soy un fraude!

En el medio de mis reflexiones absurdas, tocaron la puerta de mi departamento y vi por la mirilla de la puerta, a un hombre parado con uniforme de chofer

-Si dígame en que puedo ayudarlo? – Dije abriendo la puerta sin mostrar el más mínimo reparo que aún estaba en ropa interior, el hombre abrió los ojos tan grandes que parecía que se le iban a salir de la cara y solo así me di cuenta de mi estupidez, le cerré la puerta en la cara, lo escuche carraspear desde afuera, mientras corrí a mi habitación a ponerme mis pantalones y un crop top azul.

Chofer: Buenas tardes srta. Cabello vengo de parte de la srta. Morgado para llevarla al aeropuerto, si me permite y me indica las maletas que llevara la viaje?

-Michelle, mando a su chofer?

Chofer: Así es srta, me podría abrir la puerta para ayudarla con sus maletas?

Esto es si quiera real, un chofer?!!??!?!?!?!? El se encargó de bajar mis maletas y luego me abrió la puerta de atrás del mercedes negro que manejaba. Wow! Ser acompañante es muy rentable, tal vez deberi...AY!!! Que estoy pensando! Nos dirigimos al aeropuerto, al llegar el muy atento chofer me ayudo y me dijo que la srta. Morgado iba retrasada y que me encontraría en la sala de embarque. De verdad espero que no venga o llegue muy tarde para ahorrarme la vergüenza a la que me había expuesto.