Miami. Lunes.
Dios mío... ¿acaso estoy loca o soñando incluso? Aún no puedo creer que conseguí el trabajo, es maravilloso.
Cuando entre en la oficina de Camila y la vi parada de espaldas mirando la cuidad, me paralice. Pero cuando me miro, les puedo jurar que casi caigo muerta en ese mismo instante.
No sólo era sexy de los pies a la cabeza... Era increíblemente atractiva y muy hermosa. Su cabello lucía perfecto, y tuve la tentación de acariciarlo. Esos pantalones apretados le quedaban perfectos, la camisa le marcaba los músculos de los brazos y abdomen, tenía la corbata un poco floja, pero eso sólo la hacía verse más sexy e insoportablemente deseable. Debería ser un delito ser así de sexy ¿no?... Yo no soy muy fan de los tirantes... pero a ella le quedaban de una forma muy deliciosa, y desde ese momento sabía que serían mi debilidad. Pero su cara, santa mierda, su cara era muy delicada y hermosa, sus labios eran muy apetecibles, su perfecta mandíbula me encantaba, su barbilla partida era deseable y sus ojos... Dios, esos ojos color chocolate que me miraban de una forma muy intensa y profunda estaban haciendo temblar hasta mi alma entera. Pero esperen... ¿que yo no era heterosexual? Al parecer creo que lo olvide.Y bueno ahora yo estaba adentro de su auto para buscar un lugar en donde comer. Durante el viaje en el auto me puse a pensar en muchas cosas... no podía entender que era eso lo que Camila provocaba en mi cada vez que hablaba y me miraba, incluso cuando la escuché reírse casi quedo muerta, era un sonido hermoso; y cuando la vi sonreír juro que mi corazón amenazó con salirse de mi pecho... y me recordé que ella es una jugadora y probablemente eso hace con todas, aunque su sonrisa parecía tan sincera y real que era imposible resistirse a ella. Decidí que me lo tomaría con calma, no iba a permitir que ella juegue conmigo...
Cuando salimos de su oficina y le dio indicaciones a la tal Ariana, vi como ella me miraba con envidia y un poco de odio. También note que su secretaria me estaba comiendo viva, yo sabía que esas dos se morían por Camila, y tal vez ya se acostó con ellas. El hecho de pensarlo me puso de mal humor, no quería admitir que sentía celos, así que durante todo el camino me quede callada.
Se estaciono afuera de un pequeño restaurante, se bajó del auto, me abrió mi puerta y cuando me dio la mano para ayudarme a salir y yo la tome... sentí una corriente eléctrica recorrerme todo el cuerpo, rápidamente la solté y por su reacción puedo jurar que ella también sintió lo mismo.
Entramos y tomamos asiento en una mesa de la esquina. El mesero nos dio la carta para ordenar y se fue. Justo en ese momento escucho carraspear a Camila y la miro.
-No haz dicho ni una palabra desde que salimos del edifico, ¿esta todo bien, pasa algo?- Si Camila, pasa algo...no soporto a tus zorras con las que te acuestas... eso me pasa. Lo pensé.
- No, no pasa nada... es sólo que tu tienes trabajo y en ves de estar en la oficina, me invitas a comer a un restaurante. - Bueno, la midad de eso verdad...
Parecía que no me creía, pero sólo me dijo.- Oye tranquila, ya te dije que el día en la oficina es aburrido y esto es lo mejor que haré en mi día, te lo juro... además que me gustaría conocerte más, ¿lo recuerdas?- Me dio una tímida sonrisa. Diablos esa sonrisa me tenía mal y sin poder evitarlo mi humor estaba mejor.
-De acuerdo Camila tu ganas, ¿que quieres saber? - La vi sonreír con autosuficiencia. Justo en ese momento llega el mesero, le pedimos dos órdenes de spaghetti con un filete, y dos jugos para tomar. Se retiró y Camila me dice.
-Dame un minuto Lauren, tengo que ir rápido al baño; pero no tardo nada ¿okay? Estoy ansiosa por conocer tu historia. -Y ahí estaba de nuevo esa sonrisa que parecía tumbar todas mis barreras.
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Bad Things - CAMREN FANFIC (Camila G!p)
FanfictionLauren Jauregui, 21 años de edad. Una chica muy dulce, linda y virgen. 100% heterosexual (o eso cree ella). Le llueven chicos a montones, pero tiene miedo de que le vuelvan a romper el corazón. Viene de una familia muy humilde, son bastantes simple...