Miami. Martes 7 am.
Me encontraba en mi nueva oficina, en el último piso, justo a un lado de la enorme oficina de Camila; la mía también era grande pero no como la de ella. Estaba revisando unos papeles que la asistente de Camila, la tal Ariana esa me dio. También me dio mi contrato, lo revisé y todo estaba perfecto, así que lo firme. Oficialmente ya trabajaba para Camila.
Ayer por la tarde cuando llegue a mi casa, más bien, cuando Camila me llevo a mi casa; entre y lo primero que hice fue respirar con tranquilidad... fue un día agotador, pero estaba agitada por el beso que le di, aún no entiendo porque le di ese beso, de tan solo recordarlo se me acelera el corazón.
Después de tranquilizarme, subí a mi cuarto a darme un baño, tiempo después mis padres regresaron a casa y les conté que había conseguido el trabajo; se pusieron muy felices, ambos estaban muy orgullosos de mi. Luego cenamos y yo subí a mi cuarto, le llamé a Ally y le conté todo lo que pasó con lujo de detalles, me dijo que Camila estaba loca por mi y yo por ella, cómo siempre exagerando. Le prometí que cuando tuviera tiempo iría visitarla a los Ángeles a los dos.Y ahora estaba aquí, en mi primer día de trabajo. Llegue muy puntual, opté por ponerme un vestido negro bastante formal, tacones negros, perfume, maquillaje discreto y mi cabello suelto... como dije, algo formal y simple.
Seguía revisando los papeles que me dio Ariana, cuando tocan mi puerta, le digo que pase, y ahí estaba Camila... Dios mío, estaba más sexy que nunca.
Llevaba esos pantalones negros ajustados que le quedaban perfectos, sus botas cafés, creo que realmente ama a esas botas; camisa blanca con una hermosa corbata roja, y su saco negro, su maquillaje y el cabello revuelto me estaban matando. Lucia increíblemente sexy y mi corazón latía con fuerza.La vi caminar hacia mi escritorio y con una voz profunda me dijo.- Buenos días Lauren, ¿puedo tomar asiento?.- Lo dijo mientras señalaba la silla sin apartar sus ojos de mi.
Me aclaré la garganta y le respondí.- Buenos días Camila; claro, eso ni se pregunta.- Esbozó una sonrisa y antes de tomar asiento me dijo.
-Disculpame de nuevo, pero me voy a quitar el saco, el calor que está haciendo es insoportable...- Mientras hablaba se quito el saco y lo coloco en el respaldo de la silla. Y de nuevo ahí estaban esos sexys tirantes de color rojo... definitivamente eran mi debilidad, ¿o lo era ella? Dios mío, me tiene mal. Tomó asiento y siguió hablando.- El clima de esta cuidad me va a volver loca. Realmente debería instalar unos ventiladores mejores, ¿no es así? Bueno, si la jefa de finanzas me lo permite, claro.- Me dio una sonrisa traviesa y sus ojos brillaban de emoción.
Yo le sonreí igual y le dije.- Creo que por el momento no es necesario gastar en algo que claramente no se ocupa...- Y mucho menos si te vas a quitar el saco cada vez que haga calor... lo pensé y sonreí traviesa.
Tenía su vista fija en mi y con una sonrisa en su rostro, me preguntó.- ¿Puedo saber que es éso que te divierte tanto?.- Lo dijo suave y lento, sus ojos tenían un brillo travieso que me hacía temblar todo el cuerpo.
Trague saliva y le dije.- No es nada, es sólo que recordé algo que pasó ayer, es todo...- Le mentí, no quería que supiera que estaba pensando en ella.
Fruncio el ceño y me dijo.- Ya veo....- Lo dijo casi susurrando, se aclaró la garganta y continuó.- Espero que Ariana te haya informado de como son las cosas.- Habló rápido y su cara era seria. Volvía a ser la Camila imponente y dueña de todo esto.
Me aclare la garganta y le dije.- Si, ya me explicó las cosas y está todo bien.- Seguía mirándome intensamente, me daba un poco de miedo la seriedad en su rostro, parecía enojada.
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Bad Things - CAMREN FANFIC (Camila G!p)
FanfictionLauren Jauregui, 21 años de edad. Una chica muy dulce, linda y virgen. 100% heterosexual (o eso cree ella). Le llueven chicos a montones, pero tiene miedo de que le vuelvan a romper el corazón. Viene de una familia muy humilde, son bastantes simple...