Nota: Iba a ser una historia como mirrors y como all I ask pero la verdad no creo que sea necesario. Tengo todo en mi cabeza sintetizado para que sea un buen one shoot. Discúlpenme. André.
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Parte 1/2
Jamie
Estoy vistiéndome mientras Dakota me observa cubierta entre las sábanas mordiéndose el labio inferior haciendo que cada vez más odie el momento en el que tengo que irme y dejarla aquí, desnuda y mirándome de esa manera que provoca tantas sensaciones en mí.
—¿Por que me miras así? –Pregunta ella sacando una pierna de debajo de la sabana.
—¿mirarte como? –Le sonrió mientras termino de abrochar el último botón de mi camisa azul.
—De esa manera Jamie. –revolea los ojos.
—Es la única manera que tengo de mirarte Dakota. –bufo callando mis pensamientos para no arruinar el momento.
—¿Babeando? –Enarca su ceja y yo asiento.
—Es imposible no babear si te veo debajo de esas sábanas y sé que no llevas nada. –confieso– Y odio tener que irme.
—Yo también odio que te vayas pero, viene mi mamá y no tengo ganas de explicarle que es lo que sucede entre nosotros. –Dice con cierta melancolía en su tono de voz.
Oh Jamie, eres un idiota.
Le sonrió intentando que la situación no sobrepase los límites de tensión y ella me mira intrigada. Me acerco para darle un beso y despedirme acercando mi cuerpo a ella. —A mí me gusta cuando te vienes. –Le digo.
Dakota no puede evitar sonreír y golpea mi hombro con fuerza haciendo que me aleje.
—Eres un idiota James. –Se ríe.
—Si, puede ser. –me vuelvo acercar– Pero, es cierto.
Sostengo sus manos contra el colchón subiéndome de horcajadas encima de ella para besarla. Su cadera presiona hacia arriba chocando con la presión de mis pantalones. Hago un vaivén de caderas mientras deslizó mi lengua por su boca, de pronto hace demasiado calor y quiero volver a quitarme todo pero no estoy seguro de cuánto tiempo tenemos. Suelto sus manos pasando las mías a sus senos estimulándolos para el momento sin dejar de besarnos, sin embargo Dakota decide jugar otra carta y morder mi labio inferior.
—No hagas eso si no vas a quedarte. –Bufa entre jadeos.
Abro los ojos para mirarla, está extasiada, puedo quedarme, necesito quedarme un poco más.
—¿Quieres que me quede? –Preguntó esperando que ella de la respuesta correcta pero no responde. Sin embargo se ríe y aparta su mirada de la mía. —Oh quieres jugar conmigo. –Digo. Me gusta cuando me provoca.
