- Ryan es un monstruo – se quejo Justin por enésima vez, mientras sobaba su espalda - ¿Qué le das de comer? – me pregunto, cuando paramos en una de las bancas del pequeño parque que nos encontrábamos. Lo mire, aun enojada por el comportamiento que tuvo con Chris en la tarde. Suspire y tome asiento en la pequeña banca.
- Sandwiches – conteste orgullosa. Justin me miro por unos segundos y luego se largo a reír, bufe y golpee su hombro ligeramente - ¿Qué tiene de malo? – pregunto enfurruñada, cruzándome de brazos.
- Así que, eso es lo que han comido prácticamente toda la semana - comento, con su vista clavada en el cielo. Asentí – Valla, si Jay supiera que...
- Alto ahí, tu no le dirás nada ¿Te imaginas y se entera de que alimente a su bebé con solo unos panes y unos tomates? Seria mi muerte –Justin rió y suspiro, algo que me llamo la atención, no mas que su rostro acongojado - ¿Qué? – le pregunté, girándome en la banca y poniendo mis pies sobre esta.
- Nada – dijo, agachando la cabeza. Y los recuerdos de la fiesta de disfraces me golpearon de una. Comencé a menear mi cabeza frenéticamente a ambos lados tratando de alejar las cosas que se amontonaban en mi mente – ______ – levante mi vista y me tope con los ojos de Justin que tenían un matiz de tristeza que no me gustaba, para nada – Uh, tu... eres mi amiga ¿cierto? – me pregunto, tímidamente.
Por un segundo creí, solo por un segundo, que el Justin tímido era adorable.
¡Solo por un segundo!
- Ugh, ¿Qué pregunta es esa? ¡Claro que lo soy! Tonto – dije entornando mis ojos - ¿Por qué se comportaron de esa forma conmigo? – Ahora fue mi turno de preguntar, Bieber desvió su mirada.
- ¿A quien quieres más? – me pregunto nuevamente, pasando en alto mi pregunta, se lo dejaría pasar por esta vez, ya tendría toda la semana para preguntarle sobre su infantil comportamiento. Fruncí el ceño más aún, si me hablaba en clave seguiría sin entender sus preguntas – A Beadles o a mi – respondió a mi duda mental, agachando una vez mas su rostro para tratar de esconder el tenue rubor que se había instalado en sus mejillas.
Lo admito, son dos segundos en los que creo que se ve adorable.
- Uh, bueno – rasque mi nuca y sentí como mis mejillas se sonrojaban también – Uh, yo, ¿A los dos los quiero por igual? – respondí; o más bien dicho pregunte. Ni yo tenía claro eso ¿Cómo iba a saber a quien quería más si a los dos los consideraba mis amigos?
- Ah – fue su única respuesta.
- ¿Quién es? – pregunte, tratando de cambiar la conversación, para deshacer el incomodo silencio que se había formado entre los dos. Justin me miro confundido. Bah, ahora era yo la que hablaba en clave – La chica que los tiene...distanciados – agregué – O por lo menos dime como es – acoté, Justin sonrió levemente y hablo.
- Única – me respondió. Rodee mis ojos.
- Déjame adivinar ¿si? – Justin asintió, mirándome con un brillo divertido en sus ojos – Rubia, con un cuerpo de infarto, el centro de atención... Uh ¡Y labios carnosos! – chille. Justin me miro como si estuviera loca y luego soltó una gran risotada.
- ¿Labios carnosos? ¿A que viene eso? – me pregunto entretenido.
- Uh, no lo se, solo se vino a mi cabeza – conteste encogiéndome de hombros. La mirada de Justin cambio nuevamente.
- No – me dijo, apoyando su barbilla sobre sus manos – No es rubia, con 'un cuerpo de infarto' – dijo entornando sus ojos – y tampoco es el centro de atención...Pero ¿sabes? Si tiene labios, mmm...apetitosos – finalizo con un fuerte suspiro – Cobarde – dijo después de unos segundos.
- ¿Eh? – Pregunte frunciendo el ceño – ¿La chica es...cobarde? – dije ladeando mi cabeza sin entender. Justin giro su rostro y me miro sonriente.
- Cobarde, esa puede ser otra de las imperfecciones – sentencio sonriendo tenuemente.
Y yo me quede de piedra.
¿Cómo podía cambiar de conversación tan fácilmente? ¿Creo que entiendo todo, o que?
¿Acaso el...?
No, no podía ser.
...
Entrada la noche.
Los pies me pesaban como nunca, luego de que Justin me diera 'esa sugerencia' lo nuestro se había vuelto realmente incomodo...por mi parte. Y la misma pregunta venia a mi mente.
¿Se habrá dado cuenta?
Bueno, si lo pienso positivamente, tal vez solo fue una sugerencia ¡Solo eso! Porque, digo, si lo supiera, no hubiera tratado de seguir la conversación ¿Huh? Es más, creo que yo me comporte como sospechosa.
¡Rayos ______!
Me estire en mi adorable cama; era una de las cosas materiales que mas amaba de la casa, y saque la lista de mi brassier; si, todavía estaba guardada ahí.
Lamparita prendida, lápiz en mano... ¡Acción!
3. Cobarde: Sugerido por la victima de la lista, alias, J.B. (Yo...no tengo justificación para esto aún)
Y no las tendría dentro de mucho.
Es más ¿Eso siquiera era una imperfección?
Hmpf, muchas cosas en un solo día...para un solo cerebro.