Estella Luna

La Carta De Luna

Capítulo #5

Después de encontrar a mi papá en donde acordamos me fui a "casa" con el y por fin supe cual era mi habitación.
Mi habitación se encontraba en la planta superior, todas las puertas eran de madera oscura, menos la mía, era de madera blanca y con diseños diminutos, me encantaba había algo en esa habitación que me hacia sentir cómoda, no era demasiado grande, ni tampoco tan pequeña, su tamaño era adecuado, tenia una pequeña mesa con un computador, una ventana amplia que daba al patio delantero, un closet, una estantería que contenía libros infantiles, y algunos juveniles, un pequeño balcón y una puerta que da al baño, es de color morado de diferentes tonos, todo está perfectamente ordenado como me gusta, es hermoso.

Al cabo de algunas horas, me dirijo al baño a tonar una ducha, lavo mi cabello y me pongo una pijama, todavía es algo temprano, pero tampoco tengo ánimos de hacer nada. Estoy cansada por el viaje y necesito dormir un poco.
Me acuesto en la cama y miro al techo sumida en mis pensamientos...

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Miro a mi alrededor y supe de inmediato que me he quedado dormida.

—¡Mierda!— digo cuando miro la hora,—Son las 2:06— bostezo y me levanto de la cama, miro mi alrededor. Todo en orden.

Me levanto y abrí la puerta y miro el pasillo, noto que está claro, y la luz proviene de la planta baja, camino y bajo las escaleras, no hay nadie, me dirijo a la cocina, y allí está mi padre, con sus gafas, sacando algunas cuentas, leyendo papeles y organizando todo, al darse cuenta de mi presencia me dirijo hacia el, y me siento a su lado.

—¿Que haces despierto a estas horas?.—quiero saber

—¿Y que haces tu despierta?—pregunta en tono burlón y me mira.

—Yo pregunté primero—dije siendo ágil y evitando su pregunta

—Estoy organizando estos papeles, y hací tener el día libre mañana y descansar.— dice —además, mañana mi jefe quiere realizar una reunión por la tarde y nos ha invitado— dice y sonríe.

—Deberías ir a dormir, papá— evité hacer cualquier tipo de comentarios a lo que había dicho... Quizá debería animarme un poco e ir a la reunión de viejos aburridos  que presumen de su dinero

—Lo mismo digo— me levanto y me dispongo a tomar un vaso de agua.

—Ya me falta muy poco, Estella— dice, y al cabo de unos 15 minutos se pone de pie y organiza todo con rapidez —Listo, hora de irse a la cama— me mira y sonríe, le devuelvo la sonrisa.

Espero que mi padre apague las luces y luego vuelvo a mi habitación, pero ya no tengo sueño.
De la ventana y de las puertas de cristal del balcón entra una débil luz y noto algo que ni había notado antes, que la pared donde está el estante de los libros, frente de mi cama blanca, observo una pintura de un paisaje pintada directamente a la pared, es un paisaje muy hermoso, donde hay una especie de río y unas montañas, donde, a la altura de estas, se encuentra una gran luna que ilumina todo a su paso, es muy hermosa, toda la pintura en si.
Me acerco a ella y la observo desde diferentes ángulos, parece hecha de algún artista famoso, es muy hermosa, perfectamente realizada, cada detalle, cada pincelada. Tiene muchos relieves pero lo que mas me llama la atención es la luna, se ve tan... real. Pinceladas perfectas, y tiene mas detalles que cualquier otra cosa.
Trato de buscar en algunas de las esquinas de la pintura el nombre o firma del pintor, pero no, nada...
No está firmada por nadie, solo está lleva escrito:

"Para mi Luna"

Pero no hay rastros del nombre del pintor...

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Me desperté por el sonido de mi teléfono, decidí que dejaría pasar el tono, seguro se rendirían, sin embargo para mi mala suerte no lo hicieron, sin mas habría los ojos y estire la mano para tomar mi teléfono, no vi quien era y contesté de mala gana.

—Quien es.—

—¿¡Como que te has mudado!?—gritaron al otro lado de la linea.

—¿¡Que!?—dije incorporandome, al escuchar esas voces

—Si, tu padre nos lo ha contado todo— dijo Daniela, se escuchaba algo alterada al otro lado de la linea— Sarai y yo te hemos mandado mensajes pero las lineas han estado malas últimamente y cuando por fin han solucionado el problema, ¿nos encontramos con esto? No sabes lo enfadadas que estamos contigo en este momento.

—Dani, escu...—

—No me digas Dani.—respiré profundo un par de veces y continué.

—Daniela yo solo... — la verdades que no sabía que decirles— ¡No lo sé!— dije a la defensiva.

Ya me esperaba el regaño de parte de mis amigas— Yo solo no quería despedirme de ustedes, sabía que esto ocurriría, y además, sabes que no me gustan las despedidas, de verdad lo siento— traté de explicar

—Tenías que contarnos eso, no iba a ser una despedida, mas bien como un mañana nos vemos.

—si, pero yo...—

—Estella, luego te llamo, ¿vale?—murmura algo que no logré escuchar, y Sarai pega un grito al otro lado del teléfono— Te llamaré mas tarde, tengo algunas cosas que solucionar.

—Si, está bien—digo — te quiero, espero tu llamada.

—Adiós, nos vemos —cuelga

Bajo de la cama y me dirijo al baño, lavo mis dientes y peino un poco con mis dedos mi rebelde cabello.

Al bajar las escaleras veo a mi padre con un café en mano y algunas tostadas, sentado en el sofá.

Me miró: — Buenos días hija—

—Buenos días —me siento a su lado

—Te han mandado una carta— dice y toma un sordo su café.

—Yo no esperaba cartas de nadie— dije —Yo nunca recibo cartas.

—Pues, al perecer esta vez si, han venido a traerlo para ti— dice— está en la cocina con las tostadas, y el café con leche en la tetera, caliente y sin azúcar, como te gusta,-

Me levanto y me dirijo a la cocina. Cuando entro lo primero que hago es buscar el los muchos gabinetes una taza de café, cuando la encuentro la lleno de café y luego tomo mis tostadas, me dirigí hacia la isla de la cocina y me siento en unos de los bancos, doy un sordo de café y miro la rosa blanca que está encima de el sobre negro con detalles el color gris, está sellado y lo abro. Saco el papel blanco y leo su contenido:

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Luna, espero que estés bien, espero que te sientas bien, y que estés cómoda en tu verdadero hogar. No podría explicar con palabras cuanto te extrañe, o cuanto me has hecho falta.

Se que no sabes quien soy, pero yo conozco mucho de ti.
Espero verte pronto, mi Luna.
T.H
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