Mei Chang-Elric.

Los miedos de Al.

Fueron buenas noches aquellas en las que podía dormir.

Alphonse no recordaba donde se había quedado.

Había una pequeña niña llorando.

Sola.

En un claro.

¿Qué hacia esa pequeña hermosa niña sentada ahí?

¿Por que su cabello parecía el mismísimo aire, su llanto el mismísimo mar y su cuerpo la mismísima tierra?

¿Por qué su tristeza dejo apopléjico su cuerpo?

Quería protegerla.

Quería entenderla.

Quería abrazarla, besarla, acariciarla, todo el tiempo que fuera suficiente como para calmarla.

Todo el tiempo.

La niña levanto el rostro.

Lo vio.

Él vio sus lágrimas caer.

Vio sus ojos hinchados.

Sus mejillas mojadas.

Sus labios rozados.

Sus orejas rojas.

La veía a ella en su totalidad.

Y aún no sabía donde se había quedado, pero sabía que si la abandonaba, que si ella lo abandonaba, estaría perdido.

No, no solo se perdería su mente o su cuerpo.

Su alma se perdería.

¿Por qué la niña seguía llorando?

¿Es que acaso no veía que tenía un amante incondicional protegiéndola para siempre?

¿Por qué no se movía hacia él?

¿Es que no veía el peligro que corría?

Alphonse movió una pierna.

El suelo se abrió por poco.

-¡Alphonse!

Sabía su nombre.

-¡Alphonse, quédate quieto!

Alphonse se recargó en el otro pie.

La tierra comenzaba a formar un  hoyo debajo de la hermosa niña.

-¡Alphonse, por favor!

Alphonse no entendía a lo que ella se refería.

-Alphonse, no te muevas.

Mientras estuviera con él no le pasaría nada.

Movió su otra pierna.

La mitad de la niña se aferraba a la tierra.

La otra mitad se hundía.

Alphonse no podía pensar con claridad.

Correr era su ideal.

Salvarla.

Pero entendió el mensaje.

Mientras más se acercaran,

Mientras más la buscara,

Más la ponía en peligro.

Alguno de los dos tenía que perder.

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Hola de nuevo. xD

Una muy rápida actualización, ¿no creen?

Bueno, pues esta es una historia que ya había escrito hace tiempo y encontré por ahí sin publicar. Pensé que, con todo esto de la aureola triste que quería que tuvieran los one-shots en este pequeño espacio, este se acomodaba muy bien. De hecho, quiero ver que sale escribiendo sobre este sueño. Aún no hemos respondido enteramente cuáles son los miedos de Al, so...

Síganlo anticipando.

Besos de una escritora que ama mucho AlMei, a la historia, el amor, los shippers; pero que también ama hacerlos sufrir.

<3