People Change

#43

Paula

Harry besó mi mejilla y yo abrí los ojos somnolienta. Habíamos llegado a España.

-Hola amor-Sonrió y acarició mi mano.

Salimos del aeropuerto y de pronto flashes chocaron contra mi cara. Harry maldijo por lo bajo y me cubrió. Harry caminaba a grandes zancadas y prácticamente me arrastraba. Entramos en el auto y él suspiró

-Odio a los malditos esos-Miré una última vez hacia la ventana polarizada y ellos seguían intentando tomar fotografías.

-No te preocupes...

Le di un leve apretón en la mano y besé su mejilla

-Te amo tanto-Sonreí y miré mis manos jugueteando con mis dedos nerviosa

-Yo también-Susurre

...

Me tiré en la cama que era tremendamente suave y cerré los ojos mientras una sonrisa se instalaba en mis labios. Estaba muy cansada y aunque durmiera durante el viaje se me hacía como si tuviera meses de no dormir.

-¿Cansada?-La voz grave de Harry me sacó de mis pensamientos y asentí sin abrir los ojos.

De pronto a cada lado de mi cintura la cama a hundió, abrí mis ojos y Harry acercaba su cara a la mía con una sonrisa juguetona. Sonreí embriagada con el aroma de su colonia y él me besó.
Lo hizo como hace mucho no hacía, mis labios y los suyos se movían al mismo tiempo. La calidez de su cuerpo chocaba con el mío.

-H-Harry-Mi voz salió como como un gemido y la vergüenza corrió por todo mi cuerpo

-Mierda, Paula-Gruñó y mordió ligeramente la piel sensible de mi cuello.

Tenía una sobrecarga de éxtasis con sólo sentirlo respirar cerca mío.

Mis dedos se enredaban en su cabello mientras el seguía besando mi cuello. De repente subió mi blusa hasta mi pecho y comenzó a besar mi vientre.
Sus rulos me hacían cosquillas y sólo pude cerrar los ojos y sonreír dejandome llevar.

-Eres tan perfecta-Jugó con el dobladillo de mis jeans y sonrió maliciosamente

...

Desperté y me volví para mirar al chico de mis sueños pero no estaba, me preocupé y tomé la bata que estaba a mi lado. Cubrí mi cuerpo que para mi vergüenza estaba desnudo, entré al baño y tampoco estaba ahí.
Aproveché para lavar mi cara y cepillar mis dientes, hice de mi pelo una coleta.
Salí a la pequeña sala de la habitación, el hotel era hermoso.

-Buenos días-Susurre

-¿Como dormiste?-Preguntó después de levantar la vista de su celular y sonreír.

-Bien, sigo un poco cansada pero dormí perfectamente

-¿Como no estar cansado después de lo de anoche?-Preguntó con descaro y yo rodé los ojos evitando el nerviosismo

Él se acercó a mi y me tomó por la cintura para después besar mi cabeza. En un rápido movimiento tomó las tiras que se ajustaban de la bata a mi cintura y jaló de ellas para apegarme más a él.
Avergonzada intenté cubrir mi cuerpo.

-¿Por qué te cubres? No hay nada que no haya visto antes-Rió roncamente y me soltó, caminé hacia uno de los sillones de cuero café para después observar las bandejas que estaban sobre la mesa. Estaban cargadas de comida que se veía deliciosa.

-Iba a despertarte pero me puse a hablar con Liam sobre el álbum y el tiempo se me pasó volando-Sonreí tomando una de las tazas-Pedí esto pero si no te gusta puedo pedir cualquier otra cosa-Negué y sonreí

-Está delicioso-Dije sintiendo el dulce sabor del chocolate caliente en mi lengua.

Tomé un pastelillo de lo que parecían ser arándanos y probé un bocado, cuando terminé le pregunté a Harry entusiasmada

-¿Como van con el álbum?-Terminó la tostada y respondió con una sonrisa radiante

-Genial, calculo que al menos en unas dos semanas estará todo listo para poderlo publicar

-Nos encantará-Afirme

-Eso esperamos, es algo muy importante para nosotros-Acarició mi muslo y siguió comiendo al igual que yo

Después de desayunar nos duchamos y fuimos a visitar algunos lugares.

...

Tomamos miles de fotos, algunas fans se acercaron a tomarse fotos con Harry y otras preguntaban por mi. En todo momento intentamos evadir el tema, ahora estábamos saliendo de una catedral que era preciosa. Tomé la última fotografía y miré a Harry.
No había parado de sonreír en todo el día, se veía tan contento que cada vez que él me observaba con un brillo en sus ojos mi corazón se aceleraba. Estaba enamorada de su felicidad.

Cuando vivía en Londres me resultaba más fácil viajar a España teniendo en cuenta de que estaba en el mismo continente pero por luchar razones no había podido visitar este lugar. Ahora lo veía como una forma del destino para decirme que tenía que venir aquí con Harry.

-Es hermoso, ¿verdad?-Asentí y él pasó si brazo por mi hombro mientras caminábamos hacia donde habíamos dejado el auto, ya que estaba oscureciendo.
Pasamos frente a un pequeño local que tenía un cartel que decía: "Postres". Harry sonrió aún más y me llevó hasta él..

-España aparte de toda su hermosa cultura y bellos lugares, es conocida por sus deliciosos churros y el chocolate caliente. No puedes visitar España sin comerte al menos uno, ¿qué mejor que hacerlo ahora?

...

Tenía razón, quería comer millones de estos manjares pero ya había anochecido y los dos estábamos cansados.
La noche había enfriado y me dio un escalofrío cuando salí del lugar, Harry lo notó y me extendió su chaqueta.

-No, te dará frío-Sonrió de lado y sin dejarme protestar me la puso por encima de los hombros.

-Tú puedes calentarme después.