Capítulo 2

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Narra Tyler.

Mire la luna traspasar por los cristales de la ventana.

—¿Qué pasa si despiertas y no estoy yo aquí?—le pregunté.

—¿Sabes? Hoy mi día no estuvo tan mal—sonreí. El sueño me vencía. Tome su mano. —Pude dormir sin tener pesadillas—le dije.

—Despiértame antes de que amanezca—reí para mi mismo. Todo un idiota. —Sabes que me encanta ver el amanecer contigo—le recordé.

"—¿Qué mierda fue lo que hiciste Tyler?—cuestionó. Seguía con la vista clavada en el frente, con el corazón partido y jadeante dolor convulsionándose en mi pecho. Solía llamarlos ataques de pánico.

Ryan seguía diciendo más cosas, que ahora no podía escuchar. Tal vez necesitaba un poco de alcohol.

—¿Sabes lo que te harán cuando Martha llegue? ¿Cuándo Levi se entere?—me sacudió.

Un escalofrío recorrió mi cuerpo ¿Qué pasará cuando ella despierte? ¿Qué va a pensar de mi? ¿Me seguirá amando?

—¡Carajo, Tyler! Regresa—ordenó. Mi garganta ahora no era capaz de pronunciar ninguna palabra. Ni emitir algún sonido.

Hasta qué el ardor del alcohol atravesándola me hizo sentir, cómo que aún yo tenía una misión en la vida, y que darme un tiro en la cabeza no era una buena opción"

Las sacudidas, aceleraban los pulsos de mi mano. —¡Para ya!—le ordené.

Entonces su mano, comenzaba a sacudir la mía. Mi corazón se aceleró. Levanté mi cabeza de su pecho.

Sus ojos estaban abiertos de nuevo, sus grandes y hermosos ojos. —_________—sollocé.

Apreté su mano. —Mi amor—susurré. Con el mar cayendo por mis pupilas.

Pero los latidos de su corazón en el monitor, comenzaba a ser más lentos, y sus párpados comenzaban a caer otra vez.

—¡No, mi amor. No!—rogué y apreté el botón de emergencias en el lado izquierdo de su cama. La fuerza de su mano sobre la mía perdió su resistencia. Sacudí su cuerpo.

—Mírame, no me dejes. No otra vez—dije. Apreté el botón dos veces más. —Mírame—hablé. Ella cayó de nuevo. Negué —¡No!—grité. —No me dejes—susurré.

Los médicos entraron al cuarto. Me empujaron lejos de ella y la subieron de nuevo a una camilla.

—¿Qué fue lo que pasó?—cuestionó uno. Mi garganta tenía un nudo. —No lo sé—lloré.

—Ella abrió los ojos, me miro...—Tragué saliva —Y luego solo sus latidos dejaron de escucharse—terminé y el médico asintió, ella ya no estaba en la habitación.

—Es la hora de que se vaya—recordó antes de salir él también. El vacío profundo, me estremeció. Salí de la habitación, no había nada en los pasillos.

La temperatura de mi cuerpo descendió, y me perdí en la soledad del pasillo.

Ataques de pánico.

"—Tú eres mi amor psicópata—" recordé. Entonces las lágrimas comenzaron a escurrirse por toda mi cara.

Caminé con hacia la salida. —¿Está todo bien?—cuestionó Ryan del otro lado de la línea.

—¿Puedo verte?—hablé en voz baja.

—Claro

—Voy para allá entonces

—¿Quieres que vaya por ti?—me preguntó. El corazón se me encogió aún más.

—¿Harías eso por mi?—respondí.

—Eres mi mejor amigo, no lo olvides

—Gracias

—Te veo entonces—finalizó y guarde de nuevo mi teléfono.

Regrese de nuevo la mirada al pasillo. "—Todo lo que tu amas se destruye—"recordé las palabras de Ryan.

Cuánta verdad dicen las personas cuando están furiosas.

"—¡Tyler!—escuché mi nombre a lo lejos.

Aún tenía los ojos cristalizados y unas lágrimas que no se habían derramado.

—¡Tyler!—oí de nuevo. Con más fuerza. —¿Tyler?—dijo en voz baja cuando estaba a mis espaldas.

—Lo lamento, amigo—susurró. La agua retenida cayó por mis ojos.

Había recibido, mil insultos, cien reclamos. Pero nadie me dijo que lo sentía. Que de verdad podía sentir lo que yo estoy sintiendo.

Bebí el resto del trago.

—Siento no haber sido un amigo para ti, en el momento en lo que necesitabas—continuó.

Asentí y me gire a verlo. —Gracias—lloré.

Él asintió. —Todo va a estar bien—mintió. Yo asentí. Y bebí el otro trago. Ryan me retiró los demás.

—¿Por qué no regresas por la mañana? La noche te hace mal—aconsejo. Sonreí.

—Solo puedo verla a la mitad de la noche, cuando su familia no está. Ellos le prohibieron a todo el mundo que me dejara pasar—le dije.

—Pero, ¿Sabes lo estúpidamente perfecto que es ver el amanecer con ella todos los días?—cuestioné"

—¡Hey!—Ryan chasqueo sus dedos. Lo miré. —¿Estas bien?—preguntó. Asentí.

—¿Por qué regresaste si aún no amanece?—cuestionó.

—Ella... Despertó—le dije. Y el hundimiento del vacío regresó.

—¿Qué dices?—abrió los ojos. —Solo me miro, no dijo nada. Ella apretó mi mano, pero luego los latidos de su corazón se debilitaron, y cayó de nuevo—le expresé, con el recuerdo pasando por mi mente. Ryan arqueó las dos cejas.

—¿Está bien?—dijo, incrédulo de mis palabras. Levanté mis hombros.

—No lo sé—respondí. —No sé...El doctor me saco de ahí y me impidió quedarme—conté.

—¿Qué va a pasar si ella nunca despierta?—cuestioné.

Olvidando El Amor Tyler Posey y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora