7-no había rastro de ella.

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Alba se encontraba recogiendo agua en el pozo, ya casi era hora de cenar y necesitaban tener lista el agua para cocinar y lavar.
-Ya esta bien.-dijo la joven levantando la pesada poncera de agua del suelo, se giro y al dar un movimiento en falso tropezo y solto el recipiente enviandolo a volar colina a bajo.-¡NO!-Gritó ella tendida en el suelo. Entonces sin pensarlo dos veces se levanto y empezo a decender tras el balde ya vacio que caía colina abajo. Ya llevaba mas de 4 minutos desendiendo y nada que veía rastro del objeto.
-Tan-tan-turu-ruu un caballito me recogio, tan-tan-turu-ruu y mi mamita jamás volvío.
-¿Que?
Se escuchaba una delgada vocesita cantar probeniente de una diminuta chozita justo al comienzo de un pequeño bosquecito.
Alba camino rapidamente para acercarse y al estar en la entrada noto que no habia puerta asi que se tomo el atrevimiento de asomarse. Pudo contemplar un lugar totalmente vacio salvo a unos cuantos platos tirados en el suelo llenos de moscas y larvas y en la mitad a una pequeña niña sentada sobre su ponchera jugando con una canica. La niña habia observado de reojo a Alba pero sin darle importancia siguio cantando.
-Disculpa pequeña...-la niña se detuvo y se mantuvo silenciosa, mirandola con tanta concentracion que ciertamente alcanzaba a incomodar.-¿estas solita aqui jugando? ¿Porque no vas a casa? Ya es hora de cenar.
La pequeña la seguia observando totalmente muda con la faz totalmente seria e inmovil. De la nada de sus labios surgio una incomoda sonrisa.
-Ya estoy en casa.-dice mientras empieza a cantar aquella repetitiva melodia extraña.
-¿si? ¿Y tu madre esta por aqui?
La niña se detuvo de cantar y nuevamente sonrió.
-Tan-tan-turu-ruu un caballito me recogio, tan-tan-turu-ruu y mi mamita jamás volvío.
Alba no sabia que responder, ya habia captado el mensaje de la cancion.
-Dime dulce, ¿vives con papá?
-Tan-tin-ton-ta un metal lo atraveso-tan-tin-ton-ta y mamita lo lloró-tan tin ton ta papi papi no desperto y dormidito se quedó.
La joven muchacha estaba espantada al ser conciente de las cosas que le habia tocado ver a esta inocente pequeña.
-¿como te llamas?
-Yo lo he olvidado, pero mis amigos me llaman "petirojo".-un suspiró, esque ellos creen que es gracioso que mis ojitos lloren lagrimas rojizas.
Por la cabeza de Alba habia pasado hace rato salir corriendo de allí desde hace rato, pero algo la impedia alejarse de allí sin antes poder ayudar a la pequeña.
-¿entonces vives sola?
-si...bueno aveces unas personas mentirosas llegan a mi casa, pero hace tiempo que no regresan.
-¿mentirosas? ¿porque?
-porque se llevaron las cosas de mi casa prestadas y no me las han regresado.

La niña estaba vestida con un vestidito roto azul turqui lleno de manchas y suciedad, tenia el cabello negro como la noche recogido con dos trensitas, poseia los ojos marrones y grandes como el sol, su piel era tan palida como la luna y sus cuerpo era tan delgado como una frajil ramita.

Alba arrugo la frente indignada.
-¡como se pueden robar las cosas de una niña!
-no te indignes ni te asombres... las personas del mundo son falsas y temibles sus corazones estas putridos y sus manos escuriñan tu ser hasta encontrar tu devilidad, se aprovechan de tí y te consumen aun con tu corazon latiente...

Aquellas eran pabras fuertes para salir de la pequeña boca de una niña.
Eso no era normal.
Y mucho menos indicaba que su corazon era inocente y puro.
Ya estaba conciente de las manchas del mundo aun a su pronta edad.

-entonces si vives sola...pequeña he bajado hasta aqui en busca de eso.-dijo Alba señalando el balde.-y si quieres puedes venir a casa y quedarte.
-eso seria muy bueno, a decir verdad tengo mucha hambre.
La niña se levanto de donde se encontraba sentada y sujeto la ponchera entregandosela a Alba.
-¡vamos!-dice la joven muy sonriente-¿cuantos años tienes?
-tengo diez.
-Oh eres una niña grande, y dime ¿que te gusta hacer en el dia?
Amabas salen tomadas de la mano y empiezan a escalar colina arriba.
-yo aveces duermo en casa y otras me voy a jugar con mis amigos en el bosque, ¡oh! Ahora que recuerdo hoy tenia que visitarlos, mi mejor amigo Laslo esta muy mal...creo que ya se va a morir-dice susurrando.
-¿porque susurras?-pregunta Alba.
-porque si alguno de ellos me escucha decir esto se va a enfurecer conmigo y si tengo
mala suerte es posible que tambien termine mal como el.
-¿mal como?-preguntó muy inquieta.
-ellos se irritan muy facilmemte, si alguno dice algo que los disguste ellos no piensan y sin mas te maltratan de las peores formas. Por ejemplo mi mejor amigo Laslo le dijo a Merchen que sus familiares eran unas ratas, lo han mal herido tanto que todos los cobardes temen a que muera, saben que no va a ver peor venganza que el Karma.
-¿eran ratas?
La pequeña infante la observa muy jugetanona.
-si, lo eran.
Alba queda muy silenciosa queriendo entender lo que sicnificaba eso.
-Señorita Alba "hay cosas que se las come la tierra, y solo el viento de nuestra fuerza las puede desenterrar.
Unas gotas del cielo empezaron a caer sobre ellas, Alba muy confundida mira al cielo para serciorarse de que llovia y cuando quizo agachar la cabeza para preguntarle algo a la niña, no habia rastro de ella.

REGRESANDO MIS MEMORIASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora