Sé que al escribir esto romperé una promesa que era, no volver a escribir sobre él. No puedo evitarlo, ya no lo soporto más. Tampoco sé cómo expresar todo lo que estoy sintiendo ahora. Felicidad, tristeza, enojo, odio, confusión, celos, todo está tan mezclado. He tratado de hacer que todo me dé igual, me resulta difícil serlo en algunas ocasiones. Aún así, no logro superarlo.
¿A qué se debe mi felicidad? Volvimos a hablarnos, y está vez creo que será así por un tiempo ilimitado. Pasaron tantas cosas últimamente, pero él sigue siendo el mismo cuando lo conocí por primera vez. Nuestra conversación de a poco volvió a ser la misma. Se siente tan bonito esto, él siempre me hace sentir bien...
¿Tristeza? A pesar de que lo hablo todos los días, todavía lo siento lejos de mí. Y estará más lejos cuando él ya no esté aquí, lo voy a extrañar tanto... Cuándo vaya a despedirlo, estoy segura que me pondré a llorar mientras lo abrace. No me gusta que las personas me vean llorar pero es qué no podré evitarlo. Él es tan especial para mí.
¿Por qué a veces estoy enojada? Cómo había dicho antes, él se adueñó de mi mente y mi corazón. Ésto no me deja intentar algo con otra persona. Por más que intente e intente, no puedo sacarlo de mi vida. Y eso me enfada, porque de verdad quiero estar con una persona que no sea él pero no lo consigo. Ya está, el puesto estará siempre ocupado para él.
El odio no está siempre presente, éste se va esfumando con el tiempo. Y cuando aparece sólo es porque quedé seca, ya no quiero a nadie más solamente a él. ¿Cómo querés tener algo serio con una persona si todavía no superas a una? Él se ganó lo más preciado que tengo, mi mente.
Estar confundida no es algo tan bueno que digamos. Pensar, me lleva a la confusión. No entiendo cómo es qué aún me siga hablando. ¿Será porque aún me quiere? ¿Estará arrepentido de no haberme elegido a mí?
Hablar de los celos, no es necesario que aporte mucho sobre esto pero sí, aún me pongo celosa. ¿Qué mierda me hiciste? En serio. Es como si estuviera obsesionada con vos, de cada maldita forma.
De verdad, sos lo único que pienso en todo el puto día.
Necesitaba desahogarme, necesitaba volver a escribir. Lamento mucho haber roto esa promesa.
Hasta pronto querida mente que no me deja en paz...
