Destinados al amor.

Dylan empujó a Evans contra los casilleros.

- Di lo que sabes- Evans me mira. Pero trato de no mirarlo.

Él es mi amigo. Mi mejor amigo humano. En todas las vidas que he tenido ha estado él ha sido mi amigo de infancia y pues me duele ver que lo maltratan. Pero me duele más, creer que él me traicionó.

Aunque él no sepa lo que pasa. O bueno eso creo. Tal vez sea inocente. Pero tal vez no.

Nos vamos a mi pequeño mundito y lo sentamos. Dylan y yo estamos parados frente a él. Es difícil que escape. Pues Dylan es rápido y fuerte. Yo bueno. Creo que puedo evitar que huya. A través de mi mente.

-Lo siento- Evans empieza a llorar. -lo que te dije de mis padres es real.- asentí. Miro a Dylan y esta con la misma expresión de patea traseros.

Evans lo ignora y sólo me mira a mí.

-Hey- dice Dylan tronando los dedos- míranos a ambos- Golpeo su estómago.

- También fue tu amigo- le advierto. Él nos ayudó varias veces en nuestras vidas pasadas. Y aunque éramos novios-mejore amigos. Él dejó que Dylan esté conmigo.

- Tengo todos mis recuerdos- mira bruscamente a Dylan- Sé que fuimos novios y amigos de toda la vida y te amaba.-me mira- Te amo- Dylan gruñe. Ahora mira a Dylan.- Aun así busqué tu felicidad y dejé que estuvieras con él- apunta a Dylan.

-no me apuntes- lo fulmina con la mirada.

-Sé que fuiste tú quien me mató y sé que fuiste tú, quien me apartó de ella.

-Em- Dylan se encoje de hombros. Se siente culpable y sabe que Evans ha sufrido mucho y tal vez mucho más que ambos. - lo siento.- dice con sus manos en los bolsillos.

-¡Tus malditas disculpas. No me importan!- dice Evans furioso.

- Sólo quería ser feliz con la persona que amo.- Dylan se agacha. Para estar a su altura. - lo de tu muerte es algo que me marcará siempre y en la cual también me arrepiento.

-Eso no me interesa.- Evans empieza a reír- Mírame- alza los brazos- ¡Soy un puto inmortal!- pero empieza a llorar.

Resopla-Y no trabajo con el destino

La confesión de Evans nos hizo sentarnos a ambos pues ahora Evans está en medio de los dos. Nos mira.

-Yo no soy ningún egoísta- dice mirando a Dylan. Pero mira hacia otro lado. - Quise comportarme como uno. Pero simplemente no puedo.

-El vudú - dice cansado- él me mostró todo. Y me dijo que si te quería conmigo debía llevarle tu cuadro.

Lo sabía.

-¿Para? - toco sus manos. Y él me mira más tranquilo. Dylan no hace nada. Más le vale porque si decía algo desagradable le tiraba mi zapato en su cara.

-No lo sé Hanna- me mira arrepentido y sus palabras son sinceras. Estoy viendo al chico que conozco. Al verdadero Evans. Al que solo busca mi felicidad. Si así arriesgara la suya. -Lo siento- dice. De respuesta lo abrazo fuertemente.

Más tranquilo. Evans nos contó que el vudú lo hechizó haciendo que me olvidara de Dylan, mientras no estaba atreves de nuestra cercanía de nuestras almas conectadas por nuestra vida pasada...Antes que conociera a Dylan

Katukgah aprovechó y escapó con nosotros, tuvo a Evans atrapado desde su primera muerte, antes de terminar su transe y se lo llevó al infierno, él sabía que nosotros abriríamos la puerta para huir y Evans era un tipo de llave. Ese maldito sabía todo, al parecer sabía que seriamos nosotros los bobos enamorados que lo sacaríamos del infierno

Evans Esta conectado al idiota de Katukgah. Todo ya estaba escrito.

El destino No es más que el camino que nos tiene Dios y nos quiere a Dylan y a mí juntos, fuimos destinados desde el principio, aun no sé el propósito de todo esto pero lo averiguaremos.

El vudú es maligno. Pues gracias a él las guerras en la tierra se han pronunciado y el resto de los grandes horrores de la humanidad. Él trabaja con el maligno. Esa es la razón. Por las que nos quieren muertos. Dylan y yo somos los únicos que podemos regresarlo al infierno.

El Señor nos ha dado esta oportunidad. Y aunque nos hemos demorado demasiado. Él entiende, ya que esta alma vudú se muda de cuerpo en cuerpo. En especial en personas importantes. Las personas que han sido y son líderes importantes en la humanidad. Son sus puntos blancos.

Evans ha sufrido demasiado. Ni siquiera después de su primera muerte pudo descansar feliz. Es buena persona. Y no se merece nada de lo que le pasa y de lo que le pasó.

Yo soy una maldición hasta para él. Pues no lo amo lo suficiente para superar mi amor por Dylan. Es mi amigo. Él es mi hermano y lo amo. Es parte de la familia al que debemos liberar.

Evans está a salvo pues. Le dimos un boleto para esconderse en Europa. Y le dimos el suficiente dinero para que se mude. Cada semana. Debe estar en pequeños pueblos donde hay menos peligros y menos vigilantes. Además de un amuleto sagrado que el vudú no podrá saber dónde está. Chris nos dijo que eso lo ayudaría. Pero igual no se confiara y esté atento de cualquier extraño movimiento.

Dylan y yo debemos huir también. No puedo dejar a Anna. Pero debo hacerlo. Hicimos que ella se olvide de mí. Lloré. Pero vale la pena para que ella esté a salvo.

Ya sabemos que somos nuestro propio destino. Ahora debemos luchar... Luchar para estar realmente juntos y vencer a quien se ponga en nuestro camino y Katukgah es el único. Nos liberaremos. Ahora sabemos más. Ahora estamos más que preparados. No nos dejaremos vencer esta vez.

Ahora sé que mi destino fue Evans y mi alma gemela. Pero mi verdadero destino, el que yo quiero formar es Dylan. Él es mi verdadero amor.

Mi alma gemela y el amor de mi vida resultaron ser dos personas diferentes.

Nosotros hacemos que estemos DESTINADOS AL AMOR

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