Capítulo 11: Ruki.

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(N/A: Leer mensaje del final pls, disfruten el cap. UvU)

Narrador Omnisciente

Como niño pequeño en vísperas de navidad, despertó con un pequeño brillo en sus ojos, levantándose de golpe, provocándole un pequeño mareo.

-Nada...-Susurro mirando en silencio la habitación.

Nunca se había sentido tan vacío, nunca había sentido esa sensación de temor, un miedo, no, un recuerdo que lucho por borrar volvió a él. ¿Estaba realmente bien ahora que estaba solo? ¡No! sonara estúpido para muchos, incluso para él, pero ¿qué puede hacer? Paso tanto tiempo sumergido en ese infiero llamado hogar, demasiado tiempo aislado, demasiado tiempo sufriendo. Su vida fue una total mierda hasta que la conoció, esa pequeña niña de cabellos rojizos y ojos fascinantes, estaba destinado a conocerla en aquel lugar, nunca más estaría solo, sufrió tanto, pero sus delicadas manos limpiaron con ternura cada una de sus lágrimas, curaba sus heridas con una comprensiva sonrisa, lo alentaba de manera optimista, cayó preso de ella, se dejó engañar por esa sonrisa de ángel ¿qué desde cuando se siente así?. Oh cariño, tal vez desde el momento en que la vio llorar entendió que ella sufría también, que ocultaba sus cicatrices debajo de su "cálida" sonrisa, que ella moría por dentro y nadie lo notaba. Él era el más frágil de los dos, el simple rose de una palabra lo hacía colapsar. Y ella...ella era otro cuento.

-Realmente...-Suspiro-¿Realmente este es el fin de todo?-Pregunto al aire recibiendo la suave respuesta del viento, no planeaba salir, no en su estado, tenía en mente dejar volar a sus pensamientos. Sentía que estaba perdiendo a la persona más importante para el ¿Cómo reaccionar a eso?

Sonrió con nostalgia al recordar su hogar, no quería recordarlo en esos momentos, sabía que con la cabeza hecha un lio era capaz de cometer estupideces, pero ¿qué más da? Si lo hacía, no habría nadie para detenerlo.

Flashback

-Papá- Levanto la mirada limpiando las pocas lagrimas que corrían por sus ahora irritadas mejillas-Por favor.

-Me das asco ¿acaso no entiendes? ¡ERES UN ASCO! ¡LARGATE DE AQUÍ MALDITO INSECTO!-Grito más que furioso, dándole otra bofetada al pequeño niño de apenas 9 años frente a él.

-Por favor papá, perdóname-Suplico, sintiendo como el hombre frente a él lo obligaba e hincarse, quedando con la mirada fija en el suelo-¡NO!-Soltó un grito desgarrador, estaba aterrado, el que aparentaba ser su padre había encendido un cigarrillo dejando escapar una sonrisa maliciosa.

1...

2...

5...

13...

20 quemaduras le había proporcionado en sus brazos, piernas, mejillas, labios e incluso en su pecho, dolía, lo hacía demasiado, pero esto no era nada comparado con lo que le esperaba.

-¡Pare!- Inmediatamente dirigieron la mirada a la molesta voz que los llamaba, era ella, vino por él, era su jodido ángel caído, desterrada del cielo por su peculiar forma de amar la vida.

-Estúpida mocosa ¿Quieres saber lo que se siente? –Sonrió burlón el mayor, una niña de 9 años contra un desquiciado de 35, no era difícil suponer quien ganaría, como terminaría.

-¡Yuki!-Grito exaltado el pequeño, mirando cómo cual animal escurridizo la antes mencionada se lanzaba sobre el hombre comenzando a forcejear.

-Oye, yo gano esta vez-Sonrió de lado, sacando de su bolsillo un gas pimienta así mismo creando un escalofrió en el hombre. Lo roció un poco, lo suficiente para causarle un gran dolor, acompañado de un sonoro grito.

-¡Regresa aquí Ruki!-Sus ojos ahora rojos, ardiendo sin cesar le impidieron evitar que la escurridiza niña escapara de la gran mansión acompañada de su hijo único. Su error.

Años pasaron, nada había cambiado, las cosas parecían empeorar cada vez más.

"Nunca te abandonare, lo prometo"

Sonrió al recordar la promesa que había hecho con Yuki apenas a la edad de 6 años. Realmente no esperaba que esos inocentes niños tuvieran una vida tan cruel, nunca pensó que los harían ver lo asqueroso que era el mundo de una manera tan bizarra.

Se recostó en su cama con la respiración agitada, una fina capa de sudor frio recorría su cuerpo, amor, nunca antes había experimentado esa cálida sensación, todos dirían que estaba perdidamente enamorado de Yuki, por su manera de depender de ella, la manera en que la celaba e incluso en la manera en que la miraba. Todo llevaba a esa conclusión.

Vaya error.

Él tenía miedo, miedo de haberse enamorado de la manera más estúpida de alguien, de haberse entregado de manera tanto carnal como emocional, de que el nombre de esa persona le provocara esos suspiros, esa sonrisa de bobo, pero más que nada de la reacción de sus "padres".

Después de todo...

¿Cómo decirle a tus padres que eres gay?

End Flashback

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Antes que nada mil disculpas por no haber actualizado en tanto tiempo, pero he estado teniendo problemas de salud, ocasionalmente procuraba responder sus comentarios, pero sin usar como excusa mi estado de salud estaba pasando por un pequeño bloqueo, al terminar de estabilizarme completamente me ha surgido la pequeña idea de actualizar y aquí está el resultado.

También había tomado en cuenta que a Ruki como Co-Protagonista no le había dado tanta importancia, su forma de pensar, inclusive su pasado que ha sido un poco más traumático que el de Yuki (ambos inconclusos hasta ahora).

Dejando eso de lado me encantaría conocer su opinión acerca del nuevo capítulo y la pequeña sorpresa que nos ha rebelado Ruki. Esa no se la esperaban v:

Gracias por su tiempo. Besitos con gas pimienta.

Mizaki...

Uta No Prince-Sama:Fallen AngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora