Capítulo 8

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Unas diminutas patas recorrían mi cara junto a unos insoportables maullidos, abrí los ojos para fijarme de quien se trataba y note que era un pequeño gato color blanco. Pase mi mirada por toda la habitación y percibí el aroma de Harry.

Oh esperen...

Me alcé de la cama y sentí una fatigosa migraña junto a un fuerte dolor de trasero. Me dirigí tambaleándome hacia la puerta para examinar todo el lugar, percibí ciertos ruidos procedentes de algún punto fuera de la habitación.

Abrí la puerta.

Me encamine por el largo pasillo con algunos espejos y me contemple frente a uno. Me cubría un largo buzo negro desde el cuello hasta las rodillas, las mangas me abrigaban las dos manos dejándolas fuera de la vista. Debajo de esa prenda no se encontraba otra mas, lo cual me incomodaba.

Era una situación algo desconcertante, no podía recordar casi nada de lo que había pasado anoche, Trataba de reconstruir todos los momentos pasados y aún así no entendía nada.

-Louis..¿Estas allí?

Identifique esa gruesa voz del otro lado del pasillo y me apresure a encaminarme hacia el lugar donde provenía, al llegar encontré a Harry con un buzo igual al mío, aunque a el le quedaba estupendo, y claro, el si cargaba pantalones. Su cuerpo se movía de un lugar a otro a través del lugar (Que a mi parecer era una especie de cocina-comedor) removiendo cosas de anaqueles. El aroma a tocino rodeaba la estancia dándole un toque hogareño

-¡Louis!, ¡Buenos días!

-¡Harry!.-sonreí.-Disculpa pero..tengo algunas preguntas.

-Claro, pregunta.

-¿Qué paso ayer?

-Ah, bueno es una historia muy divertida.-Sonrió.-Como ya sabes, tomaste de mas; Después de eso todo fue muy confuso para ti. Un depravado se lanzo encima tuyo y yo junto Niall, Zayn y Liam te defendimos.-Sonrió victoriosamente.-Después Zayn y Liam comenzaron a divertirse y...

-¡Espera!, ¿Se acostaron?

-¡No!, solo conversaron y eso. ¿Puedo seguir?.- Asentí.- Te sentías muy mal así que me ofrecí a llevarte y después fuimos en mi auto.-Sonrio de nuevo, recordando algo.-Y solo eso, estuve obligado a cambiarte de ropa cuanto te caíste yendo al edificio.-Se carcajeo.-¡Tu pantalón estaba todo mojado Louis! y después te dormiste. Si, solo eso.

Comencé a recordar todos los fragmentos narrados por Harry de la noche anterior. Aunque, también se me venia la imagen de Harry besándome, tal vez solo era producto de mi imaginación.

-Hice el desayuno, siéntate.

-No creí que cocinaras.-Bromé.

-Para tu información, era uno de los mejores cocineros en Holmes Chapel. Es mas, ¡Trabajaba en una panadería!

-¿Porqué debería creerte?

-Porque soy el hombre mas honesto que existe. Además que te prepare algunos panes hoy, están deliciosos.

Me senté en unas de las sillas frente al mesón mientras Harry servía los alimentos. Sinceramente olía demasiado bien, y no dudaba ni un poco de sus dones culinarios.

Unos platos repletos de panes y huevos recién cocinados se situaban en la mesa junto a 2 vasos llenos de jugo de naranja, todo se veía exquisito.

-Bueno...¡A comer!.-Harry decreto.

Los dos comenzamos a comer llenándonos la boca rebosándolas de comida. La barbilla de Harry estaba salpicada de comida lo cual me causo ternura, coloque mis dedos en la facción de su cara limpiándola. Harry me miro sonriendo, le devolví la sonrisa con dulzura.

Harriet Donde viven las historias. Descúbrelo ahora