Flores Al Pasar

Capítulo 14: tal vez si hubiera...

—¡¡¡¡Gabiiii Arribaa!!!! Dale que ya vino Dai- mi mamá diciendo a los gritos desde la planta baja

Me levanto de la cama, apoyo mis pies en el piso... de repente se abre la puerta de mi habitación

—¿¡y nene!? ¡Tengo que venir yo a levantarte para no llegar tarde al colegio!...—con una sonrisa mientras se toma la cara y luego da un suspiro...

No entiendo que está pasando, pero al mismo tiempo es todo muy familiar... bajo por las escaleras ya con el uniforme puesto, adelante va Dai, noto que también tiene uniforme, una chomba celeste con una pollera azul oscuro... luego de pasar por el pasillo escucho un murmullo, al llegar la cocina, ahí están... son mis padres, hablando  tranquilamente, en el medio de la mesa hay dos tazas humeantes con café y tostadas... el ambiente es tan cálido... mi papá se levanta de la mesa, saluda a mi mamá con un beso y toma unas llaves...

—Gracias Dai, sino fuera por vos... a este chico no lo levantamos ni con una bomba— mi papá le dice amistosamente mientras apoya su mano en el hombro de Dai.

De pronto estamos en el auto, sentados en el asiento trasero con Dai, ella está mirando unos apuntes, mi papá manejando mientras se escucha las noticias en la radio, no puedo entender bien que dice... miro por la ventana y veo a los arboles, caen las hojas lentamente como en otoño...giro para ver Dai, ella me devuelve la mirada, sonríe  mientras un brillo envuelve sus ojos verdes oscuros... dice algo, sus labios se mueven pero... no la escucho, la situación se vuelve confusa, ahora estamos caminando por una vereda, me siento feliz, no llego a entender de qué hablamos pero reímos y seguimos caminando hasta llegar a una plaza... las hojas de los arboles caen y caen... entonces una luz detrás de Dai aparece envolviéndolo todo...

Me despierto.

Abro los ojos, y me quedo inmóvil por unos momentos.
Eso fue un sueño... solo miro el techo, mi habitación en un completo silencio no escucho ni pensamientos, la luz del sol irradia con fuerza sobre la ventana.

Me levanto, bajo por las escaleras y llego a la cocina... como siempre en completo silencio, ¿por qué abre soñado eso? Ya no recuerdo cuando fue la última vez que mis padres se hablaban tan cariñosamente... o mejor dicho ya no recuerdo cuando fue la última vez que los vi hablando, desde su última pelea hacen de cuenta que ninguno existe, y yo soy como un ente en esta casa también... no lo entiendo, era todo tan raro...  y tan claro, normalmente olvido los sueños pero esto se vio tan real...además, a Dai... a ella la conocí hace apenas unos meses, ¿por qué apareció ahí?
Hoy es lunes, y como todos los días tomo el mismo colectivo, me siento, y no puedo dejar de pensar en ese sueño... se sentía tan bien, tengo una sensación tan rara...es como que hubiera pasado si...
Con todo esto, olvide por completo lo que paso ayer, ¿me pregunto qué le dirá Sam a Lara? ¿Será que mejor me disculpe con ella? Pero si hago eso quedaría en evidencia... ¿¿Y ahora qué hago?? No tengo idea... podría preguntarle a Dai, aunque no sé por dónde empezar, bueno ya veré que hago, por lo pronto voy a llegar a la trabajo.