—¿Qué son estas marquitas...? — pregunto Dai señalando unas marcas en el marco de la puerta de mi habitación
—esas marcas son...—
—¡Gabu y Nai! — Interrumpe— ¡sos vos y tu hermana! Mira que chiquito que eras, tu hermana te llevaba como dos cabezas— dice con ternura mientras se queda mirando las marcas y se queda pensando
—Gabu...— se da vuelta y me mira con una sonrisa— ¡me gusta! A partir de ahora vas a ser Gabu, y no... no acepto quejas— se cruza de brazos, como dando una orden
Toc, toc...
Se escucha que llaman en la puerta, de se corre a un costado, era mi padre... se disculpa con Dai que si podía hablar conmigo un minuto, vamos al pasillo, mientras toma mi mano para darme algo me dice sigilosamente
—Toma, se caballero invitala a tomar algo y después dejala en la puerta de su casa—
Luego mi padre se va y al revisar mi mano veo que me dejo dinero... ¿eh? ¿Pero qué está pasando? Bueno, no me viene mal... después de todo me quede si dinero por culpa de Samy, así que... igual de todas formas es raro... me quedo pensativo en el pasillo, hasta que veo a Dai asomarse
—¿está todo bien?— pregunta asomando la cabeza por la puerta, con una gran sonrisa como si se estuviera conteniendo para no reírse
Me doy cuenta enseguida que Dai escucho la pequeña conversación con mi papá, lo cual hice que me empiece a avergonzar de una manera horrible... pero de todas formas voy a disimular—Mira— mostrándole los billetes con una sonrisa nerviosa— tengo órdenes de invitarte a tomar algo—
—¡Ordenes son ordenes señor Gabu!— dijo sonrojada soltando una pequeña risa— por cierto... estas rojo como un tomate— me dice mientras se va a buscar su cartera
—y vos también Dai...—
.......................................
Luego de despedirnos de mis padres y salir de casa nos fuimos con Dai al centro... y ahora con dinero suficiente fuimos a un bar o un pub... bueno... uno de esos lugares. Como estaba linda la noche buscamos una mesa en la terraza del lugar, las cuales eran de madera color negro y en el medio la típica sombrilla.
Nos sentamos uno enfrentado al otro, Dai tenía puesto un vestido de color azul tirando a violeta o violeta tirando azul... decorado con una flores de colores, encima una campera de cuero y como siempre su pelo ondulado tirado a un costado. Ella se pide un mojito y yo una cerveza.—Dai, viste la otra noche... tomamos mucho y hay cosas que no me acuerdo bien—
—bueno...— toma un sorbo de su trago— bailamos arriba de un mesita, nos reímos, mmnn... después te diste un beso con el chico con el que estábamos hablando...—
—¡¡¡¿queeeeeee?!!!! —
—¡es broma! — Me dice mientras larga una carcajada— ¡nah! Estuvimos casi toda la noche juntos bailando y tomando... después vino Lara y...
Me la quedo mirando con los ojos bien abiertos de lo sorprendido... tengo algunas imágenes pero no recuerdo muy bien todo... creo que es hora de que le cuente a Dai
—Mmmnn... resulta que con Lara...— le digo mirando para abajo con algo de vuerguenza
—¿y tus amigos? — me interrumpe
—¿¿Mis amigos?? — contesto sorprendido
—¡si, tus amigos! Me di cuenta que nunca hablas o te vi saliendo con amigos tuyos...—
—eh... Mmnn... bueno, no se...— le contesto nervioso
— ¿No sabes...?— dice con la voz baja, casi como diciéndose así misma
No sabía que responderle... creo que si tengo amigos, pero no volví a ver a nadie y tampoco recuerdo porque... no lo sé, no lo había pensado.—bueno... no importa, me tenes a mi— se levanta de la silla, mientras coloca una mano en la cintura y con la otra se señala así misma con su pulgar— yo soy tu amiga Gabu—
En ese momento Dai me dice que va a pasar al baño, rodea la mesa y se coloca detrás de mí, de pronto ella me abraza colocando sus labios a la altura de mi oído
—No tenes que decirme nada Gabu, ya lo sé...—
Luego de decirme esto me da un beso en la mejilla y se va hacia el baño. Al ver a Dai retirarse tengo la impresión de que esto ya paso antes. No se porque tengo esta sensación... a veces creo que ella sabe más de mi que yo mismo.
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Flores Al Pasar
Non-FictionComo cambian las cosas o como cambiamos nosotros por una persona... Gabriel es un joven de 23 años un poco anti social, con un trabajo aburrido y rutinario... Pero un dia un simple error hace que su vida cambie y tome otros rumbos, nuevos sentimien...