Enredados [Ziall]

4

Niall.

El rubio se sentía completamente feliz, al fin lograría salir de esta torre.

Después de que el chico moreno aceptara su trato, lo había desatado y amenazado diciéndole que si intentaba algo, lo golpearía.

Le dio al chico sus flechas y lo obligó a llevarse a pascal con él, en una mochila para perros y obviamente no le ayudaría a bajar. Él podía solo.

Se acercó hasta la gran ventana y con algo de miedo, tiro el sartén fuera y al escucharlo caer empezó a dudar si no moriría al tirarse.

—Muñeca, ya casi llegaré abajo, debes apurarte.—Escuchó decir al moreno.

"¿Que tan difícil puede ser? Y ¿Por que ese chico sigue llamándome muñeca?" Pensó el pequeño Niall.

—Tú puedes.—El rubio murmuro para si mismo.

Se preparo, poniendo gran parte de su cabello sobre una pequeña baranda, le serviría para sostenerse y la otra la lanzó. Su mirada se fijo en el interior de la casa, ¿y si era mejor quedarse? No, no desaprovecharía esta oportunidad.

—¡Alli voy! —Felizmente Niall gritó, se lanzo al vacío con emoción, sosteniéndose de su mismo cabello largo. Paró en seco al ver una manta verde pintar el suelo, sus ojos estaban fijos en ella. Estaba estático y solo pensaba que si había sido una mala decisión salir.

—¡Es sólo pasto, cariño! ¡No te hará nada!—Dijo el moreno, riéndose al ver a su supuesta "muñeca" parar y ver al pasto como algo peligroso.

—Yo... Yo ya sabia.—El rubio murmura con un gran sonrojo en sus mejillas, cuello y orejas.

Finalmente posa sus píes sobré la cosa verde llamada "pasto" y sus labios forman una sonrisa emocionado. Le hacia cosquillas en sus pies descalzos. Se tiro sobre él y dio varias vueltas. Se levanto y corrió por todos lados, su cabello se espantaba con el aire y era lo que menos le importaba.

Suspira y se tira nuevamente al pasto, estaba cansado. El moreno bajó segundos después, dejando a pascal en el suelo. Pascal corrió hasta Niall y este último lo recibió con besos, amaba jugar con su pequeño cachorro.

—No quiero interrumpir tu linda...—Murmuro con algo de asco.— Llenadera de besos, pero tenemos que irnos si queremos llegar mañana.

El rubio reaccionó y se levantó, dejo a pascal en el suelo y vio hacia todos lados. Al divisar una salida de ese pequeño lugar, empezó a correr emocionado, saliendo hacia un lugar lleno de árboles. Era muy hermoso.

Se percato que el moreno venia detrás de él, recogiendo su cabello y llevándolo es sus grandes brazos al igual que su sartén. Era lindo. Negó con la cabeza, no sabia porque había pensado eso, pero después de todo el no creía que era malo pensar eso.

—Nena, si vas a correr así, asegurate de traer todo y recoger tu largo cabello.—Se notaba el tono de molestia en la voz del moreno. El rubio se sintió mal y su rostro se volvió a sonrojar, dejando al otro chico completamente maravillado.

—Yo, lo siento...

—No importa, ya vámonos.

—Bueno... Yo sólo... —El oji-azul no termino de hablar, ya que había saltado a los brazos del otro chico. Los arbustos se movían sin parar y se encontraba asustado.— ¿Vienen por mi? ¿Que es? ¿Me va comer? ¿Se llevaran mi cabello?—El rubio chilló asustado.

Un conejo había salido de los arbustos y el moreno no tardo en hablar.—Cuidado muñeca, es peligroso.—Murmuro para luego empezar a reír a carcajadas.

Oh no, se sentía avergonzado.

—Si, bueno... Yo pensé que era algo mas.—Murmuró separándose del muchacho.

Después de sentirse avergonzado, empezaron a caminar. El mas pequeño se quedaba a jugar en algunos lugares que veía divertidos, el mayor solo lo veía con aburrimiento y pascal solo los seguía a ambos.

La felicidad de Niall no tardo mucho, se había quedado pensando en que le diría su madre si lo viera afuera. Le rompería el corazón. Estaba sentado sobre unas rocas, su cabello por todas partes lleno de flores u otras cosas.

—¿Chico? —Murmuro entre sollozos muy audibles, rápidamente el otro chico (el cual no sabia su nombre) lo vio.— ¿Tú c-crees que mi madre se le romperá el corazón?

—¡Claro que si! Es más, la harás sentir la peor madre del mundo y seguro después se enojara. —El chico moreno no le ayudaba en lo absoluto, se sentía miserable y no quería eso para su madre.— Pero, eres adolescente debes hacer eso mas de alguna ves.

—Yo.... Sólo quiero ir a ver mis luces.—Suspiro levantándose. Tomo fuerte su sartén y se arreglo el cabello.— No creó que mi madre se de cuenta que estoy afuera ¿no es así?

—Bueno, pero podríamos ir a tu torre, esperar a tu madre y luego hablarás con ella, le dirás que la amas mucho y arreglan sus problemas. Yo me iré con mi bolso y todos felices ¿no? —El moreno lo había tomado de los hombros y un Niall todo enojado le dio un puñetazo en el brazo.

—¡Seguiremos con el plan!

—¡A la mierda!

Niall se altero al escuchar esa palabra, una vez su madre lo había dicho cuando era pequeño y él lo repitió. No quería recordar eso, no, no, no. Solo recuerda que su madre lo dejó sólo por una semana. Negó quitando esos pensamientos y luego volteo a ver al moreno.

—No sé tu nombre.—El rubio murmuró cruzándose de brazos.

—Oh, ¿y ahora quieres mi nombre? —El moreno alzo una de sus cejas y examinó su cuerpo.

—Deja de verme así.—Murmuró irritado.—Y si, quiero tu nombre.

—Rodger, muñeca. —Le guiño un ojo y el rubio se enfado ante el acto.— Pero para ti, Papi.

—¿Papi? —El rubio preguntó algo confundido.— Bueno, no importa ya. Me llamo Niall.

—Niall...—El moreno murmuro.— Lindo nombre para una chica como tú, preciosa.

Niall abrió mas de lo normal sus ojos, ¿Lo había llamado chica? Oh, no no. El era un chico, ¿Por que había pensado aquello? ¿Lucía como una? ¿Tenia cara de una chica? Claro que no, ¡Él era muy varonil!

Enfadado se cruzo de brazos e hizo un puchero. Se vio así mismo y luego ve al moreno. Oh no. Él tenia un vestido como su madre y Rodger tenia pantalones. Era eso o por su gran cabello.

Él no sabía de muchas cosas, pero eso lo sabia completamente. Tenia libros donde explicaban que él era un chico y no una chica. Además, su madre le había explicado de su cuerpo mas de alguna vez. Estaba claro, era un chico.

Aún enojado, vio a Rodger de pies a cabeza. Por otro lado, el moreno solo se preguntaba que había echo mal.

—Rodger...

—¿Si, muñeca?

—Soy un chico.

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HOLA. ¿Que les pareció? ¿Aburrido? ¿Divertido?

Gracias por sus comentarios:)

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