Enredados [Ziall]

10.

Ya era de noche la luna estaba en el cielo brillando de forma natural y a su lado unas cuantas estrellas.

Todos estaba en silencio.

Zayn sostenía unas cuantas flores de diversos colores en sus manos mientras el pequeño rubio tomaba una por una y las ponía en libertad sobre el agua.

Ambos sin decir ninguna palabra.

Cerca de ellos estaban el rey y la reina. Maura Horan la reina consolaba a su esposo Bobby Horan, pues este último se encontraba llorando y solamente preguntándose el porqué les habían arrebatado a su pequeño niño. Ambos salieron hacia el lugar donde los esperaban todos los pueblerinos y su lámpara flotante con un diseño de sol dibujada en ella. Dijeron algunas palabras al público antes de soltar al fin su linterna, elevándola y soltándola, dejando que esta se fuera a quién sabe donde. Las demás personas hicieron lo mismo, dejando que el cielo se llenará de luz.

El rubio de cabellos largos aún soltaba las flores ya un tanto aburrido, habían pasado como una hora y nada pasaba, pero en ese pequeño instante notó una pequeña luz reflejarse en el agua cristalina. Emocionado volteo su vista al castillo donde se llenó de las hermosas luces que tanto anhelaba ver, se dirigió a la punta de su barca haciendo que la misma se moviera de un lado a otro y que el moreno por poco se cayera al agua.

Poco a poco las linternas se acercaban hacia donde ambos chicos estaban y el pequeño Niall las miraba encantado, Zayn no podía ver las linternas ya que su vista estaba fija en aquel rubio que tanto quería y se negaba a dejar ir.

-Son hermosas ¿no crees? -El rubio volteó a ver a su acompañante, sintiendo su corazón palpitar más rápido y su respiración entrecortarse al notar cómo Zayn ya tenía dos lámparas en sus manos. Le entregó una al muchacho rubio y otra se la quedo el mismo. Antes de lanzarlas se sonrieron mutuamente y las dejaron libres.

-No son más hermosas que tú -El moreno evitó ver al otro muchacho a los ojos mientras le decía aquello. Un Niall sonrojado sacó el bolso de su escondite dándoselo al ojos miel, el antes mencionado sólo la tomo y la dejó en el suelo mientras negaba.- No creas que me importa esto, muñeco.

-Pensé que ya sabes... Tú y la bolsa... Todo eso ya sabes -El rubio jugó con sus manos mientras evitaba la mirada del otro, Zayn negó mientras levantaba el mentón del chico y dejaba un corto beso en su nariz.- Zayn... Creó que te amo.

El moreno sintió alegría, ternura y un sin fin de emociones en su estómago. Ambos se acercaban poco a poco para poder besarse pero algo los interrumpió, Zayn había logrado ver algo extraño al otro lado justo donde sus amigos los esperarían.

Niall tuvo que abrir los ojos confundido, curioso volteó a ver a donde Zayn miraba.- ¿Pasa algo, Zayn?

-No, no -Negó el moreno tranquilizó al rubio.- Tenemos que irnos

El más grande remó hasta donde suponía que estarían sus amigos y nada más ellos, tomó el bolso donde estaba la corona y le sonrió al rubio diciéndole que volvería y que nada malo pasaría, dejando al pequeño completamente sólo, pensando en que podría irse. Se adentró entre las rocas y buscó a sus amigos, al notarlos parados un poco cerca y tapados por la neblina sólo lo tranquilizó, acercándose cada vez más a ellos.

-Muchachos, creí que no estarían aquí, me asustaron por unos minutos.- Justo cuando iba a reír notó a sus amigos esposados y con la mirada gacha, elevó una de sus cejas y se encamino más a ellos.-¿Qué ha pasado aquí?

-Pero miren a quién tenemos aquí... -Una risa algo aguda se escuchó, confundiendo más al moreno.- Oh ¿no me recuerdas? Vamos, ¡Soy Louis, el mejor guardia de este lugar! -Mientras el castaño de ojos azules se presentaba, lo apuntaba con una arma.- La señora me dijo que ustedes eran los raptores del príncipe y de la corona, ¿donde están?

Y justo cuando preguntó aquello cayó al suelo noqueado, momentos después los otros tres chicos cayeron a su lado.