[ Niall ]Hoy es el día. Le diré a mamá que quiero salir de esta torre, en dos días será mi cumpleaños y siempre, desde que tengo memoria, el día de mi cumpleaños lanzan luces flotantes y por primera vez, quiero ir a verlas de cerca. O eso quisiera.
Sonreí ampliamente, caminando hacia mi habitación, sintiendo que en mas de una vez mi cabello se quedaba atorado. Suspire viendo el desorden en mi habitación y con mucha pereza empecé a recoger todo. Media hora después me bañe, lo cual me costo un infierno con este largo cabello. Al terminar bajé hasta la sala, tratando de buscar a mi pequeño cachorro llamado Pascal. Era mi único y mejor amigo, después de todo solo lo conocía a él y a mi madre. Al encontrar a Pascal jugué con él por varios minutos, riendo mientras el trataba saltar por la ventana y obviamente yo no lo dejaba.
—¡Niall, lanza tu lindo cabello para que tu madre suba! —Mi madre gritó desde abajo. Corrí a lanzar mi cabello para que ella pudiera subir.
Cuando estaba arriba ella me saludo con un pequeño "hola" y se fue a ver al espejo, escuche que decía varias cosas entre dientes mientras miraba sus notables arrugas.
—Niall, ¿Que estas esperando? Ve a traer las cosas y haz que sea más joven.—Mi madre me vio por el reflejo del espejo
Fui corriendo a traer la silla, un banco y un cepillo. Tenia que portarme bien para que mi madre me dejara ir a ver las luces y no quería desperdiciar esta oportunidad de hablarle.
Cuando mi madre se sentó, rápido le di una parte de mi cabello empezando a cantar de forma rápida.— Flor que da fulgor con tu brillo fiel, vuelve el tiempo atrás volviendo a lo que fue.— Ella cepilló rápido. No termine de cantar ya que ella ya se encontraba joven y linda.— Bueno mamá, ¿puedo contarte algo? Por favor es algo muy importante...
—Ay Niall, no quiero escuchar tus estupideces...—Paro de hablar al notar mi cara de desilusión, rodó los ojos y suspiró— Esta bien, amor. Cuéntale a Mami lo que quieras.
Había notado que mi madre me trataba mal algunas veces, pero ella tenia que lidiar conmigo y con su trabajo, que según ella era muy pesado, así que la entendía, era mi mamá y así la amaba.
—Bueno mamá, como podrás saber... ¡En dos días es mi cumpleaños! —Sonreí de una forma infantil mientras me acercaba a ella y la abrazaba, sintiendo sus brazos en mi cuerpo.— Y como este año cumplo diecinueve.... Bueno quería ir a ver las luces flotantes.
—¿Cuales luces Niall? Esas cosas que ves allí son estrellas.— Se separó de mi de un tirón, dejándome un tanto confundido.— Y ya sabia lo de tu cumpleaños, deja de recordarmelo a cada rato.
—No mamá, son luces flotantes y...—Suspiro viéndola mientras una sonrisa se asoma en mis labios.— Siento que son... Por alguna razón... Solo para mi...
—Ay Niall, no seas tonto.—Mi madre empieza a reírse en mi cara, toma mi mejilla un poco fuerte mientras niega.—Son estrellas cariño... Además tú no sabes el peligro que corres fuera de esta torre, a ver dile a mamá todo lo que te ha contado del mundo.
—Pero...—Deje de hablar al ver a mi mamá con una expresión de pocos amigos, así que no me da mas remedio que hablar de lo que ella quiere o tendría un castigo.— Madre, tú me haz dicho que afuera hay monstruos que quieren mi cabello, que nadie se resiste a este hermoso poder que poseo y....
—Ellos están llenos de maldad, Niall. Tienen sus ojos rojos o negros, dientes afilados y llevan siempre algún arma para poder quitarte lo mas preciado...—Mi madre término mi oración, causando en mi más miedo— No debes salir, Niall. El mundo es peligroso.
Di un asentimiento mientras me levantaba, un puchero se encontraba en mis labios.
—Pero mamá...
—Ya callate, no saldrás de la torre.
Quería salir, pero ella no lo entendía. Suspire separándome de ella, me fui a mi habitación no sin antes despedirme de mi madre, algo tendría que hacer para que mi madre entendiera. Quería un poco de diversión en mi vida, no quería vivir siempre con el miedo de salir de aquí, mi madre me había prohibido salir desde que era pequeño, quería un cambio en mi vida y no lo tendré a menos que salga de este lugar, pero siempre algo me lo impide. Tal vez mi destino era quedarme en la torre para siempre.
Dejé de pensar cuando mis ojos pesaron de sueño, mañana seria un nuevo día y tendría que "aprovecharlo" de la mejor manera. Y tal vez, solo tal vez, tendría un poco de suerte en pensar una forma de ir a ver las luces sin que mi madre se negara.
ESTÁS LEYENDO
Enredados [Ziall]
Fanfiction¿Y si le damos un giro a la historia? ¿Qué pasaría si Rapunzel no fuera chica, si no un chico? [En edición]