Enamorado

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En su Audi A4 negro, Viktor iba de vuelta a casa junto con Christophe. Después de la pregunta que el suizo le hizo, el ruso pidió la cuenta y le dijo que era hora de que se fueran ya que le presentaría formalmente a Yuuri. Para ser honestos, al ruso no le importaba mucho el inventar alguna excusa para explicar la presencia de Chris, probablemente le diría a Yuuri que el familiar moribundo de su amigo había mejorado de manera casi milagrosa y el pelinegro lo creería sin poner en duda una sola palabra. Yuuri era así, confiaba plenamente en Viktor.

A pesar de que el ruso hubiera esquivado épicamente la pregunta que le había hecho, Chris no estaba dispuesto a rendirse. Haría que su amigo cantara como un tenor si quería su ayuda.

—Viktor, no intentes hacerte el idiota. Respóndeme, ¿estás enamorado de Yuuri?

Viktor seguía conduciendo con la vista al frente. En realidad, no era que quisiera esquivar la pregunta o "hacerse el idiota" como decía su amigo; la verdad era que no tenía idea si lo que sentía por Yuuri era amor o no. Se sentía enormemente avergonzado por ese hecho, y el solo imaginar todas las burlas que recibiría por parte de Chris si lo admitía lo hacía mantener la boca cerrada.

Por otra parte, Chris comenzaba a cansarse de la actitud infantil de Viktor. Era como si le aplicara la ley del hielo. Pero el ruso estaba muy equivocado si creía que él aceptaría tal comportamiento.

—Muy bien, ya no quieres decir nada asumiré lo que yo quiera. —Enderezándose en el asiento, Chris se cruzó de brazos y fijó la mirada en el camino antes de comenzar a hablar—. Yo creo que estás enamorado hasta el último de tus cabellos de aquel chico, de otra forma, no te arriesgarías ni lanzarías todo por la borda como planeas hacerlo. Y por supuesto, no me arrastrarías a mí en semejante locura. Pero, dado que no quieres admitirlo, supongo que no te molestará que comparta tus aventuras y antiguas parejas como anécdotas con él, ¿verdad? No te preocupes, no le diré que las mataste al final, solo le comentaré el impresionante número de conquistas que tuviste.

—¡No te atrevas! —Viktor lo miró de forma amenazante por unos segundos antes de volver a fijar la vista en el camino-. ¡Más te vale no decir una sola maldita palabra sobre eso!

Aquella reacción tan violenta despertó el interés de Chris. Su amigo era una persona tan calmada y con tanto control sobre su persona que verlo salirse de sus cabales era un espectáculo único.

—¿Por qué te preocupa tanto? Si no estás enamorado no tendría por qué importarte de esta forma.

Viktor tensó todo su cuerpo al notar que Christophe no se detendría hasta que le dijera la verdad o lo que él quería escuchar. Una voz en su cabeza le decía que mintiera, que no dijera nada. Pero, si de algo estaba seguro, es que Christophe era capaz de contarle todo el pasado amoroso a Yuuri. No podía permitir eso, no quería que el pelinegro se sintiera herido y se alejara de él.

Con un gran suspiro de resignación, se dispuso a decir la verdad.

—Yo... no sé si lo amo —la frase fue dicha técnicamente en un susurro.

—¿Perdón? ¿Qué dijiste? —Siendo francos, Chris sí lo había escuchado, pero quería creer que su amigo no había dicho eso. Es decir, Viktor no sería tan idiota como para no haberse dado cuenta que estaba totalmente enamorado del japonés, ¿verdad?

—¡Dije que no sé si lo amo! —Esta vez, el ruso alzó mucho más su voz—. No tengo idea de cómo es sentir amor.

Christophe lo miró cómo si tuviera un tercer ojo en la cara antes de soltar una carcajada muy sonora. ¿Cómo infiernos su amigo había logrado convertirse en un asesino experto? ¿Cómo había aprendido desde pequeño la anatomía completa del cuerpo humano? ¿Cómo había podido engañar a la enorme cantidad de personas que formaban parte de sus registros como sicario? Era algo que no tenía explicación, su amigo era un idiota. Sin embargo, Chris agradecía que Yuuri hubiera dejado salir aquel lado humano e imperfecto que Viktor había estado reprimiendo a la fuerza. Siempre había estado preocupado por su amigo y por la presión que este cargaba sobre sus hombros. Yakov tenía tan altas expectativas puestas en él que el ruso había hecho todo lo que estuvo a su alcance para no decepcionarlo. Incluyendo el dejar de sentir. Pero ahora Viktor lucía como alguien nuevo, se escuchaba como alguien nuevo, incluso hablaba como alguien nuevo. Aquel japonés había derretido su mirada gélida.

Death's Diary (Victuuri) [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora