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-¿Alguna vez has pensado en lo que pudo haber sido?- caminan de regreso a casa después de practicar en la pista por horas, la voz grave de Otabek resuena en la noche - me refiero, piensas en cómo habría sido tu vida si siguieras con Viktor o si se hubieran casado- algo de lo que más le agrada del menor es la facilidad con que dice las cosas, sin rodeos.

-Lo hago- acepta Yuuri, la mención del nombre le hace doler el estomago- y me molesta pensar en el, creer que aun hay oportunidad de volver a estar juntos, aunque sé que el único final feliz entre nosotros hubiera sino no habernos conocido.

-Pero te ayudo mucho, gracias a su apoyo estuviste en el podio dos años consecutivos-comenta directo como siempre, en la oscuridad de la noche Beka parece una fotografía en blanco y negro, la tez pálida, ojos grises, pelo vetado y semblante serio.

-Lo sé y se lo agradezco muchísimo, realmente me gusta pensar que él es una de esas personas que tenía que entrar en mi vida, enseñarme una lección y después desaparecer- comenta Yuuri encogiéndose de hombros restándole importancia.

-¿Qué lección te ha dado?-pregunta Otabek curioso.

-Uhm...-El mayor lo piensa un momento, se acomoda los lentes que han resbalado por el puente de su nariz- me enseño a no confiar en rusos peli plateados narcisistas.

Otabek le voltea a ver sonriendo, es una sonrisa grande que le arruga la nariz y deja entrever sus dientes blancos y ordenados.

-Tienes una sonrisa muy bonita- comenta Yuuri alargando el brazo para pincharle la mejilla, aun en la oscuridad puede notar la vergüenza del kazajo- ¡Oh!, te has sonrojado, no creí que eso fuera posible en ti- comenta entre emocionado y divertido.

El menor sonrie a pesar de su vergüenza, la personalidad dulce y juguetona de Yuuri ha vuelto, Otabek se siente feliz de ser quien la detone, le da un pequeño empujón amistoso al mayor fingiendo enfado mientras es recompensado con una sonrisa dulce.

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Una semana después Yuuri da vueltas en la cama con los ojos cerrados tratando de dormir, dos vueltas más y se sienta sobre la cama resignado, toma su celular y lentes de la mesita de noche, vaga un rato por Instagram mirando fotos recién posteadas por Pichit, ve un video en Youtube de cómo hacer queso de cabra y contesta algunos mensajes.

Se levanta de la cama molesto por no poder dormir, se coloca las pantuflas y abre la puerta despacio dirigiéndose a la cocina, el pasillo esta silencioso y un poco oscuro, camina lento arrastrando los pies, casi al llegar puede notar un haz de luz debajo de la puerta de la cocina podría ser su Madre o Mari, abre la puerta perezoso y da un brinco cuando ve a Otabek sentado sobre la barra de la cocina con un plato de cereal y un vaso de agua.

-¿Qué haces?- cuestiona el kazajo ganándole la pregunta.

-Aprendiendo a hacer queso de cabra- contesta mientras abre la nevera sacando el envase de jugo.

-Mi abuela solía hacer- comenta el menor con media cucharada de cereal en la boca.

-Cuando vaya a Kazajistán le pediré que me enseñe- ha terminado de servirse el jugo, se acerca a la barra, toma impulso sentándose alado de Otabek.

- Ella murió hace 4 años- anuncia Beka y los dos se ríen bajito como si no estuvieran hablando de queso de cabra y abuelas muertas a las 3 de la mañana.

-Lo siento- dice apenado dejando el vaso vacio junto a él- por cierto, ¿ya has pensado que canción presentaras?- a diferencia de Yuuri, el kazajo se preparaba para el Four Continents

-Uhm...Tengo una, pero el segundo instrumental me parece que va muy lento- otra cucharada de cereal se dirige a su boca- tal vez modifique el ritmo y cambie algunas notas para que el final no suene tan caído.

-¿Has estudiado música o algo así?-pregunta el mayor casualmente.

-No-responde tomando un poco de agua- solo se un poco.

-¿Cómo así?- Yuuri se ha terminado el jugo por lo que da un saltito bajando de la barra y va hacia el grifo enjugando del vaso.

-Uhm...-Beka duda, dos cucharadas de cereal después se atreva a decir- Soy Dj en mi tiempo libre.

Yuuri suelta una carcajada sonora para después taparse la boca recordando que todos en el lugar duermen, Otabek le mira serio desde la barra con una ceja alzada.

-No jodas, ¿es enserio?-pregunta Yuuri que permanece recargado sobre el fregadero.

-¿Porque te mentiría?, mira ven que te muestro- Beka mete su mano en el bolsillo del pantalón buscando su celular, Yuuri se acerca de nuevo, se coloca entre las piernas del kazajo que sigue sentado sobre la barra quedando más alto, el mayor se pone de puntitas apoyando sus antebrazos cruzados sobre los muslos del menor, la postura es bastante intima pero no se molestan.

Otabek pasa una por una varias fotos de sus presentaciones dejando sorprendido al japonés- Es mas como un hobbie- aclara el chico.

-¿De cuándo es esa foto?-pregunta el mayor, beka mantiene la mirada fija en la foto y los ojos entrecerrados tratando de recordar mientras Yuuri se dedica a observar su rostro que luce muy diferente a esa hora, leves ojeras, pómulos marcados con pequeñas pecas difuminadas bajo su tono de piel, pestañas largas y cejas gruesas.

-Creo que de hace 2 años- contesta al fin, Yuuri ríe y al hacerlo su aliento caliente choca contra el cuello de Beka causándole cosquillas, así de cerca puede apreciar la piel tersa y blanca del mayor, sus cejas son delgadas y sus pestañas son cortas y muy negras, el corazón del menor late muy rápido y suspira tratando de mantener sus sentimientos a raya.

-Te ves muy diferente con el cabello largo -comenta llevando las manos a su propio cabello y dando unos paso hacia atrás alargando la distancia y rompiendo la intimidad.

A Otabek se le escapa un bostezo, brinca bajándose de la barra y llevando los platos en el fregadero.

-Deberíamos dormir-dice mientras los lava.

-Aun no tengo sueño, tal vez me quede aquí preparando queso de cabra, puede que consiga una Ouija y haga que tu abuela me enseñe- Yuuri estira los brazos por sobre su cabeza y ríe.

Beka solo niega divertido.

-Vamos-dice y es mas como una orden.

Se dirigen al cuarto del menor, este mismo acomoda las mantas y le hace una señal al mayor para que se acueste.
Yuuri obedece, se saca los lentes poniéndolos en la mesita de noche, la cama del kazajo es más grande por lo que caben perfectamente.

Otabek se acuesta a su lado y le ofrece un audífono, el otro lo mantiene en su propio oído, Yuuri lo toma escuchando al instante una melodía lenta.

"She is the sweetest thing that I know, you should see the way she holds me when de lights go low, shakes my soul like a pot hole, every time"

-Ed Sheeran siempre me hace llorar- comenta el japonés con una risita.

-Calla- le pide Beka sintiéndose extraño, con la única persona que ha escuchado música hasta dormirse es con el rubio y esta vez se siente tan diferente, medita en la teoría que le ha explicado el mayor, pensando que si hay múltiples universos puede existir uno donde él y Yuuri puedan estar juntos.

Yuuri tarea muy bajito una parte de la canción, gira sobre su costado acercándose al cuerpo contrario, coloca su frente sobre el brazo del kazajo que lo mueve rápido pegándolo a su pecho, la respiración pausada del menor y la melodía lenta le adormecen, cierra los ojos disfrutando del momento y de la compañía silenciosa.

"Every night I'll kiss you you'll say in my ear.
Oh we're in love aren't we?"

Escucha antes de quedarse dormido.

Aquí el capítulo de hoy y por favor díganme que no soy la única que ve vídeos extraños a las 3 de la mañana 😅
Os quiere
Akivapotter

There and back again [Otayuuri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora