pongan aquí algo chido, a mi ya se me seco el cerebro

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Tenia una pierna de William encima de las mias y sus manos en mi pancita, una cosa en mi vientre se removía, pero él parecía no darse cuenta. Decidí que en un rato le diría la noticia, solo necesitaba formular como. Me moví para que quedaramos frente a frente, ya que era de noche y no podía dormirme. Por lo visto, él tampoco

-Alex..

-Si?- dije aliviada, esto ya se había vuelto incomodo

-No tienes sueño?

-No, no se por que...

-Yo tampoco, bebé- dijo y se bajo de la cama y trajo LA bolsa- iba a dejar esto para mañana, pero...

-¿Entonces, si era para mí?- baje de la cama emocionada

-No, era para Alex

-¿Al otro Alex?- dije decepcionada 

-Si, según yo, tú querías que hiciéramos las paces

-Si, pero yo quiero el regalo, a Alex no le gusta- le expliqué

- No sabes que es- dijo y me pego al él de la cintura dando me una clase de abrazo 'provocativo'

-¿Y? Es un regalo

-Bueno- dijo y agarró la bolsa de la cual sacó una cajita

-Dame, dame- dije abriendo y cerrando los puños, como niña chiquita

Él solo camino y se la puso frente a Alex

-Toma Alex de mi corazón, es para ti-

-Gracias, yo tomaré esto- se lo quité a Alex y voltee con William- pero estoy molesta contigo

Él me quitó la caja delicadamente y la abrió, pude ver que era un collar, sin embargo no lo vi bien, ya que me lo estaba poniendo

-Es para que nunca olvides quien eres Alexandra, eres mi mate, eres luna, tu eres todo para mi, te amo-

Dijo y sentí como mi corazón se aceleraba. Toque el dije, mientras lo veía. Después de todo lo que dijo, me convenció a hacer lo que tenia miedo de hacer. Era el momento.

 Era el momento

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-William... yo también tengo algo que decirte... pero no se si te guste...

-Dímelo, puedes confiar en mí- sonrío y con su mano derecha acarició mi mejilla

-Estoy e...

Luego, se abrió la puerta de golpe. Creo que no hace falta decir quien era. Él estaba recuperando el aliento, mientras que William y yo lo veíamos medio molestos, medio confundidos.

-¿Qué sucede?- William preguntó

-Manada...grande..quiere matarnos....no tiempo...hay que correr...- dijo Bryan mientras recuperaba el aliento

-Bryan, eres el peor Beta del mundo- William le dijo

-Lo sé. Vamos!- exclamó sin entusiasmo mientras se volteaba a correr de nuevo, pero se cayó de cara-¡Sí!

-Alex...me tengo que...

-Ni lo pienses- lo corté- Si Bryan va, yo voy- William volteó a ver a Bryan que se estaba levantando del suelo

-Está bien, solo ten cuidado

-Bien

(...)

Cuando Bryan dijo 'grande', no me imagine esto. Había hileras de quién sepa cuantos lobos que parecían representar el número de las estrellas. Yo estaba al lado de William, delante de nuestra manada.

-Hay otras formas de solucionar esto- Willam trató de persuadir al otro Alfa

-Cierto,- dijo él- si me prestas a tu mate, nos vamos

Siempre he considerado a William como prudente. Por eso, no me esperaba que se convirtiera en lobo por ese comentario e iniciara una guerra durante la noche. Pero eso fue exactamente lo que pasó. Bryan se encogió de hombros y se convirtió en lobo a apoyar a William, como toda la manada, menos yo. Yo quería ayudar, pero no quería poner en riesgo a mi hijo. Camine (muy lento para todos) entre los lobos de mi manada, se veía como unos intentaban quitarle la vida a otros. Seguí caminando para buscar a William, pero no lo hallaba. En eso escuché 2 fuertes aullidos hacia el noroeste de donde estaba yo. Corrí como nunca había corrido en mi vida. Y cuando llegue lo vi peleando contra el otro Alfa.

-Vamos William! ¡Dale duro!- Grité a todo pulmón

William estaba haciendo un gran trabajo, se podía ver un gran rasguño que cubría la mayoría del cuerpo del otro Alfa, este venia desde la cabeza hasta el costado izquierdo. Pero veo como desde una pequeña elevación una loba grisasea le salta encima a mi mate

-William- gritó y corro hacia su dirección

Estoy por saltar y convertirme, pero un lobo marrón se me atravesó, adelantándose. Al instante me llega el olor de Bryan. Él se le lanza encima a la loba gris. Ambos se quedan viendo un momento a los ojos cuando se incorporaron y veo como mi amigo lanza un fuerte aullido. En ese instante lo supe, ella era su mate, la mate de Bryan. Ella quedo consternada como yo, pero no tardó en reaccionar y corrió hacia él. Pasó completamente lo contrario a lo que yo pensé. Ella le mordió el cuello haciendo que algo truene.

-Noooo!- grité desesperada y me eche al suelo- Bryan!

En los ojos de ella se veía tristeza pura, pero luego me vio y me gruñó. El resto pasó a la velocidad de la luz. Una pata marrón rasguña su cuello, causando que ella caiga y se forme un charco de sangre al rededor de la misma. Yo me paré y corrí hacia mi mejor amigo, me puse de rodillas y coloqué su cabeza en mis piernas, sintiendo como su respiración es débil y como su pulso se debilita cada segundo. Él se transforma de vuelta a su forma humana

-Hola amante- me dijo débil

-Bryan no te mueras- dije llorando

-Ja, no lo haré ¿Crees que te libraras tan fácil de mi?- dijo susurrando y cerrando lo ojos

-Bryan!- grité desesperada

-Fue un placer servirle mi Luna- dijo y terminó de cerrar los ojos

-Bryan- comencé a pegarle levemente en el cachete- Bryan! No te mueras! Le voy a decir a William y él se va a enojar mucho contigo- dije rápidamente- Bryan! te ordenó que no me dejes! Bryan...bryan, por favor- supliqué y lo abracé contra mi pecho mientras me mecía de adelante a atrás y sentía lagrimas rodar por mi cara, así como veía como estas terminaban su recorrido cayendo en mi único amigo, que ahora reposaba en mi brazos. Sin vida. 

Estuve así, no se cuanto tiempo, pero sentí como algo me respiraba en el cuello. Lentamente me giré a ver quién era. Vi sus ojos, que eran unos azules celeste, pero eso no fue lo que llamó mi atención, ni que me estaba mostrando los dientes, ni que era de la manada contraria, no, lo que me llamó la atención fue que me estaba amenazándome. Pesadamente coloqué la cabeza de Bryan en el suelo y salí corriendo con la loba detrás de mi, persiguiéndome. Sabía que en cualquier momento me podría saltar encima y acabar con mi vida , pero nunca lo hizo. Seguí huyendo hasta que llegue a un lugar donde había mucho fuego y humo, pero la loba ya no estaba ahí.

Alex, amor ¿Si William?¿Todo bien? Si cariño, necesito que te vayas de la zona de donde estas, desde aquí puedo sentir que hay mucho fuego Pero... Solo vete al lado sur Okey, pero... Ya no le pude decir nada, por que cortó la comunicación, me giré un poco para comenzar a caminar, cuando algo frío impacta con mi cabeza, intento dejar los ojos abiertos, pero estos ceden y se van cerrando poco a poco hasta que todo lo que puedo ver es un vació negro


Cuestionando al Alfa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora