Capítulo 11

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Capitulo 11

Hermione

He estado dos horas castigada por culpa de Krum. Lo bueno es que estaba con Malfoy, lo malo es que estábamos a metro y medio de distancia y no podíamos hablar ni nada. Me dio tiempo hasta de acabar los deberes y estudiar un poco, de vez en cuando Snape que era el profesor que nos vigilaba se distraía, y Draco me miraba y me guiñaba un ojo.

Cuando se acabó el castigo los dos nos fuimos a nuestras respectivas salas comunes. Malfoy como un caballero que es, me acompaño a la mía.

-La princesa ya esta en su castillo.

Le beso la mano.

-Que tonto que eres, ven aquí.

Lo cogí del cuello y me puse de puntillas para besarlo salvajemente. Cuando nos separamos estábamos rojos por la escena tan excitante.

-Después de cenar, quieres pasarte por mi habitación?

Draco se quedo perplejo por la invitación de Hermione.

-Con mucho gusto.

Y se desvaneció. Suspire y entre corriendo a mi habitación para arreglarme aunque sea solo un poquito. Cuando entre note una presencia pelirroja.

Ginny.

Estaba llorando, con los ojos hinchados y rojos.

-Ginny? Que te ha pasado? –me acerque preocupada.

-Tengo un lío tremendo Hermione y no sé que hacer…

-Cuéntamelo, intentare ayudarte.

-Estoy así por Harry y por Zabini.

Hermione

Ginny me contó todo lo que le había pasado con Harry y Zabini, la verdad es que esta en un buen lio ya que a los dos le gusta Ginny, pero esta, des de siempre le ha gustado Harry y eso es un punto a favor para el, pero Zabini… ha tenido la suficiente valentía como para pedirle a una Griffindoriana que vaya al baile con el.

-No sé que decirte Ginny… Mañana hablamos tranquilamente. Vete a dormir que estas muy alterada.

-Esta bien.

Se fue decepcionada, quería que le diera una respuesta, pero esto no es cosa mía, ella tiene que elegir por si sola que chico de los dos escoge, a uno o a ninguno.

Me tumbe en mi cama, ya que yo también estaba un poco alterada por lo de Krum, y decidí coger un bloc de dibujos e intentar dibujar a Malfoy.

No lo conseguía.

En cada dibujo que hacia le faltaba mas luz o mas oscuridad, o no me gustaba. Gaste miles de hojas intentando dibujarlo pero nada, hasta que una cabellera rubia se asomo por mi ventana.

Abrí la ventana para que Malfoy pudiera entrar.

Cuando abrí la ventana lo primero que hizo fue tirarse encima de mí para besarme.

-Hola princesa.

Sonreí y me puse colorada.

Cuando Malfoy entro dejo la escoba al lado de la chimenea y fue directo hacia todo el montón de papeles que tenia tirados en el suelo.

-No los cojas!  -grite.

Pero ya era demasiado tarde, Malfoy había cogido un dibujo y estaba sonriendo.

-Intentabas dibujarme?

-Si… -dije tímidamente.

-No sabía que dibujaras, me sorprende.

Me mordí el labio.

-Quieres intentar dibujarme otra vez?

-Puedo?

-Pídeme lo que quieras y haré todo lo que este en mis manos. Como quieres que me ponga? Sin camisa? O mejor aun, desnudo? –dijo divertido

-Estas loco. –Le saque la lengua –ponte aquí. –cogí un sillón lo gire hacia mi y él se sentó como solía hacer, todo estirado y con una pierna encima donde se ponen los brazos –si vas a ponerte así, quiero que te abras un poco el cuello de la camisa.

El hizo lo que le dije con una sonrisa picara.

-Que más Picasso?

-Mmm… No me mires de frente, ponte de perfil, y la corbata que parezca que te la has quitado porque te estabas asfixiando con ella.

Estaba muy sexy en esa forma, y me puse manos a la obra.

Behind These Hazel Eyes (Una historia de Hermione y Draco)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora