—¿Se te hace divertido despertarme a las 10 de la mañana?—Preguntó Dylan parado enfrente de ella, con su pelo desordenado y mala cara, siempre se había preguntado cómo era que le hacía para estar siempre guapo—
—¿Te he despertado?—Hizo su mejor imitación de niña inocente—Lo lamento, no ha sido mi intención
—Mmm, preciosa, huele rico—Dijo él y le robó una de sus tostadas—
—Oye—Le reclame-Dámela
—No
—Que me la des— me pare para quitársela, pero él se la metió completa a la boca-
—¡Que cerdo que eres!
Dylan se habría reído, pero estaba ocupado comiéndose la tostada que apenas cabía en su boca. ¿Cómo coquetear con Emily? ¿Cómo insinuarse sin que ella le aterrizara su mano en la cara?…
¡Claro! No tenía que coquetear, sólo tenía que actuar… ¡Actuar, claro! Cantarle una canción, invitarla a cenar, darle alguna rosa.
Emily era de las chicas que ya casi no quedaban, de esas que tenías que hacer un sinfín de cosas para que te tomen en cuenta, no de esas chicas que sólo les dices “Vamos a un lugar más privado” y ya está.
—Oye, ¿Te gusta la música?—Le preguntó Dylan cuando terminó de comerse la tostada—
—No creo que haya alguien en este mundo que no le guste la música
—Bueno, el otro día compuse una canción, y necesito alguna opinión, ¿Te importaría darme la tuya?
—¿Por qué?—Se burló—¿Todas las personas a las que le pedirías su opinión antes que a mí se las tragó la tierra?
—Oh, qué simpática que eres—Dijo sin la intención de sonar sarcástico—
—Bueno, si no queda de otra
—Acompáñame a la sala de música— Dylan tomó de la mano para guiarla. En dos momentos ella quiso soltarse, pero él no la dejó—
El aire abandonó mi cuerpo al ver la hermosa sala de música: un enorme y hermoso piano color blanco, una guitarra para zurdos, perfecta para Dylan una batería, una trompeta, un micrófono, también una guitarra eléctrica y un bajo. La sala estaba pintada de un azul cielo precioso con varios posters de música de diferentes tipos en las paredes.
—Esto es hermoso—Dijé mirando la habitación—
—Sí, sin duda—Sonrió Dylan—¿Piano o guitarra?
—Piano—Respondí sin pensárselo—
—Perfecto—Dijo con una sonrisa torcida y se sentó frente al piano, mientras tiraba mi mano de para sentarme -junto a él—Bueno, ¿Lista para escuchar?
—Claro—Dije encogiéndome de hombros—
escuchaba la hermosa melodía que creaban las mágicas manos de Dylan completamente atónita; él tocaba hermoso, cada nota parecía ser perfecta, cada movimiento de sus dedos era exacto; era simplemente perfecto, completamente perfecto.
—Diablos, Dylan…sólo… wow—Dijé sonriendo—. Tocas… tocas hermoso.
—Gracias—Él la miró—¿Te gustó? Aun tengo que inventarle una letra
—Está muy linda
—Igual que la chica que tengo al lado
Pensó que ella sonreiría, pero su rostro palideció de pronto.
—Lo sabía—Dijé parandome bruscamente—
—Oye… ¿Qué te sucede?—Preguntó confundido—
—Que no me has traído aquí para que escuche tu canción, a ti no te importa mi opinión— dije enojada— A ti sólo…sólo te importa flirtear con todas
—No, Emily …
—Ahórrate tus comentarios, por favor
Salí de la habitación hecha una furia ¿Por qué había creído que a él de verdad le interesaba algo acerca de mi más que meterme en su cama? No me extrañaba ese comportamiento, porque así era Dylan: no sabía lo que era tener a una chica como una simple compañera o amiga, pero eso no significaba que no me doliera que él quisiera seguir lastimándome; primero me había traicionado como amigo y ¿Ahora quería llevárme a la cama para usarme por una noche y luego… y luego desecharme como lo había hecho hace 11 años atrás?
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nuevo capitulo Espero que les guste♥
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La Niñera
Roman pour Adolescents200 dólares al mes; esa había sido toda la suma que Emily Anderson había necesitado para ser la niñera de los pequeños de la familia Parker; Jazmyn y Dan . Eric y Christine Parker se iban de viaje durante tres meses y Emily era la encargada de sus...