Sean pov.
Lo único que siento es dolor, mi hijo, mi vida, se fue. Mi Scher-K debe estar tan decepcionada de mi como padre, lo hice horrible, por eso mi hijo se fue, es por eso, no hay otra explicación, no sirvo de nada.
Hice lo único que podría hacer llame a Terry, mi hermano del alma, lo conozco de toda la vida, mis años New York cuando era un bebe, estuvimos sin contacto muchos años, desde que nació mi hijito hasta que me hice cargo de las empresas familiares.
"se fue" era lo único que pude decirle en mi agonía.
"¿quién se fue?" su voz estaba llena de preocupación "Sean ¿quién se fue?"
"Mi hijo, Terry deje ir a mi hijo" no sé si me hará entendido entre mis balbuceos, "no puedo más, Terry, no quiero más" le corte el teléfono y en cuanto lo hice comencé a destruir todo lo que encontré a mi paso, luego me deje caer al suelo, ordene no recibir ningún llamado, no estoy para nadie, ya no soy nadie, quiero a mi bebe de vuelta, quiero a mi hijo, me quede dormido, en el suelo en medio del desastre que he creado. No sé cuánto habré dormido, solo sé que alguien me despertó.
"Hey Sean" Terry me observaba con pena "ven aquí enano" me abrazo y me levantó entre sus brazos, me dejo en la cama, yo intentaba explicarle pero no salía nada de mi garganta solo más llanto. "no hables sé lo que sucedió hable con Nancy, Steve llegó bien, ahora quiero que te duermas y cuando estés mejor, comerás"
"déjame ya no me queda nada" le dije abatido.
Me miro serio "Basta, tu puedes ver a tu hijo cada vez que quieras, sabes que es llegar y tomar el avión o simplemente te lo traes de una oreja de vuelta a la casa" Es que acaso pretendía consolarme con sus palabras, como si yo no supiera eso, o como si yo no pudiera irme a vivir a Japón con él, el punto es que Steve quiso irse de mi lado, dejarme, abandonarme como si yo fuera algo desechable, me negó como padre, como no entiende que es eso lo que me está matando lentamente, se quiso alejar de mi como hijo, no me pidió que me fuera con él, me exigió que lo dejara partir.
"vete" ya no tenía fuerzas "la extraño, no creí que sobreviviría sin ella y ahora pierdo a nuestro hijo, de verdad crees que estará ahí cuando vaya, me odia Terry, NO TE DAS CUENTA. "
"No me iré, hora duérmete y después vas a comer" me ordeno.
No tenía intención de obedecerle, pero poco a poco mis ojos se fueron cerrando y me dormí, no sé cuánto dormí, pudieron ser horas, desperté cuando Terry vino con la comida, y al acercármela la tire lejos, luego seguí con lo poco que había quedado en pie.
"LÁRGATE" le grite con ira, sé que no es justo que la agarre contra él, solo quiere ayudar pero no puedo duele mucho, solo quiero que me deje morir, sin mi hijo es el único camino.
"Basta, yo sé lo que necesitas, no creí que fuera necesario dártelo" me grito mientras se acercaba mí, es bastante más grande que yo y me levanto de un brazo me dejo en su regazo.
"qué demonios Terry, tú no eres mi padre" estar en esa posición me ayudo a salir del aturdimiento, comencé a patalear, qué se ha imaginado, es mi amigo, mi hermano hasta lo considero como un hermano, pero jamás mi padre, no puede hacer eso.
"No pero si quieres lo llamo, sé que va a estar muy dispuesto a venir y hacer este trabajo mucho mejor que yo"
"NO, no puedes llamar a papá, lo destruiría saber que fui un cobarde, que lo deje marchar" sé que papá vendría enseguida pero es primera vez que se toma una vacaciones con mamá, no quiero quitarles eso, ya les va a doler cuando lleguen y se den cuenta que no tienen a su bebe en casa. "suéltame, no es divertido, además debo volver a la trabajo".
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Una jauría de tigres
RandomSteve aparentemente tiene la vida perfecta, pero con el corazón herido por la muerte de su madre que el paso de los años no hacen más que acrecentar el dolor, pero por más que empuje lejos a su padre, jamás lo va a abandonar. Aviso: Castigo Corpor...