Caminos Encontrados.

Capítulo 19

Alex Martinelli (Pov)

Mansión Martinelli

9:30 p.m.

Habitación principal

-¿Dónde estoy? -preguntó la voz débil de Tatiana mientras pasaba sus manos por su cara, yo me encontraba de un lado de la cama acostada- me duele la cabeza.

-Hola princesa -hablé bajito- sigues en mi casa, te has desmayado y he tenido que llamar a un doctor. -la besé en la frente-

-Hola -hizo puchero- ¿cuánto tiempo estuve inconsciente?

-2 horas -abrió los ojos y se levantó de golpe- ¡hey! -me levanté con ella- ¿qué pasó?

-¡Lucia! -sujetó su cabeza con ambas manos y reí. Me miró frunciendo el ceño y me aparté de su vista-

-Ahí está -Señalé la cama y ella abrió de nuevo los ojos sorprendida cuando vio a la niña durmiendo en el inmenso colchón-

-Pero ¿cómo? -reí de nuevo mientras ella arrugaba la cara- ¿Y por qué tengo esta ropa? -me miró seria y levanté la mano en redención. Llevaba puesto solamente sus bragas y una camisa negra de mi propiedad, que le llegaba más abajo del muslo-

-Primero -mostré un dedo- llamé a Marie y a Juliet diciéndoles que estabas conmigo, que te habías desmayado por una baja de tensión según el doctor Walter, no puedes llevar emociones fuertes porque te afectan a ti y al bebé -alzó las cejas- segundo ellas trajeron a la niña y tercero quien te cambió fue Juliet con la ayuda de Marie, yo no tuve nada que ver -me defendí riendo- aunque me hubiese gustado hacerlo -puse mi mano en la barbilla de manera "pensante"-

-¡OYE! -Golpeó mi hombro haciéndome reír- eso no es apropiado Martinelli -frunció el ceño y yo rodé los ojos-

-No debes tener más estrés a partir de hoy, nada de trabajo en los próximos meses y el Doctor Walters dijo que debes tener reposo -arrugó el entrecejo- ¿Qué?

-Me cae mal ese hombre. Hash -exclamó haciéndome reír- ¿cómo que no puedo trabajar? Olvida eso, tengo cuentas que pagar.

-Si bueno la doctorcita no es mi persona favorita en el mundo pero sabemos llevarnos. Así que... a la cama señorita -señalé el colchón- por eso no te preocupes, puedes meter un reposo por maternidad -me encogí de hombros haciendo que rodara los ojos-

-Tengo hambre -hizo puchero haciéndome de nuevo reír- ¿me quedaré aquí?

-Sí, en realidad puedes quedarte el tiempo que quieras. Y dime ¿qué quieres comer?

-Sándwich tostado de jamón, queso, lechuga, tomate y salsa de ajo -arrugué la cara- es mayonesa, ajo, cilantro, un poquito de azúcar y un toque de sal -alcé las ceja- y pepinillos -se haló los cachetes con las manos hacía abajo- quiero muchos pepinillos con salsa -arrugué la cara del asco- ¿QUÉ? -Preguntó molesta frunciendo el ceño- estoy embarazada.

-Vale que no he dicho nada -me defendí- vamos para prepararte aquello -asintió como una niña haciéndome reír y fue a envolver a Lucia en almohadas- Dios mío que la criatura está bien, vamos -arrugó el entrecejo-

-Debe tener seguridad -rodé los ojos- Ahora si está todo seguro y perfecto. Andando -caminó con una sonrisa-

-Primero las princesas mandonas -sonrió cuando abrí la puerta para ella y al momento de pasar me le quedé viendo el culo.-