Capítulo 12

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Noche 1

Tuve una carrera a último momento y como siempre gané, José Luis estaba feliz porque lo estaba haciendo rico, pero como sea, lo que ahora me importaba era encontrar a Iván y hacerlo pagar y José Luis me estorbaba.

-Eres muy buena para esto -me dijo contando el fajo de billetes que traía en la mano.

-¿Cuantas carreras más tendré esta semana?

-Ummm... Hoy es Miércoles, el Viernes habrá otra y el Sábado también

-Okey, dos carreras me parecen bien

-Por cierto mañana quiero presentarte a alguien

-¿Presentarme a alguien? -pregunte sorprendida -¿Es uno de tus amigos malvivientes? ¿Para qué quieres que lo conozca?

-Luego te explico

-No me voy a acostar con él, si eso es lo que quieres

-Ya habíamos hablado sobre esto

-Y yo no estuve de acuerdo así que confirmarte con el dinero que te pueda dar con las carreras

-Sabes que estoy hasta el cuello con las deudas

-No es mi problema -tomé mi chaqueta.

-Tú vives aquí y tienes que ayudarme

-Pues entonces me largo de aquí, te he ayudado lo suficiente con las carreras, te doy más de lo que debería

-¡Pero no es suficiente! ¿Qué parte de eso no entiendes? ¡Ah! y si te vas no quiero que vuelvas

-Si no es suficiente, entonces vendete tú -le di un ligero golpe en el pecho -¿Y sabes qué? Te voy a tomar la palabra, me voy para no volver 

-No, no, no, perdóname -me tomó del brazo.

-Me has robado todo lo que gano en las carreras y todavía ¿tienes el descaro de querer detenerme? No soy tu esclava, ni tu trabajadora, antes de conocerme ganabas tu propio dinero 

-Lo sé, lo sé, pero no te vayas, no sé que haría sin ti -se acercó a mi.

-¿Sin mi o sin mi dinero? -me coloqué la chaqueta y arremangue las mangas.

-Sin ti, sin ti -me respondió algo desesperado -no podría vivir sin tus besos, sin tu calor, sin tu cuerpo -intentó besarme, pero lo rechacé.

-Aléjate de mi -lo empujé -voy por ahí

-No me dejes -se arrodilló frente a mí.

-Voy a pensar, no te prometo que voy a regresar pero quiero tiempo

-Voy contigo -se levantó.

-¡No! 

Esa fue mi última palabra antes de salir de la casa; durante todo el camino me cercioré de que José Luis no estuviera siguiéndome, por suerte le quedo muy claro que no quería verlo por un rato y eso me daba tiempo de comenzar con la búsqueda de Iván.

LLegué por segunda vez al bar que frecuentaba mis madre, pedí una bebida y me senté en una mesa no muy alejada, ya que el punto era observar y analizar a la mayoría de los hombres que estaban ahí, aunque esa idea era muy estúpida ya que como le había dicho a Raúl no recordaba la cara de Iván y eso hacía la misión más difícil.

-Me da un tequila doble -le dije al hombre que atendía la barra.

-Pongalo a mi cuenta -devolví la vista al dueño de la voz que para ese entonces ya estaba a mi lado.

-No es necesario -lo miré solamente un micro segundo.

-Todo para un chica tan guapa

-Mmmm... No le gustará saber esto a su esposa -señalé su anillo.

-¡Vaya que eres brava niña! -se acercó más a mí.

-Para su información soy mayor de edad, así que no soy una niña -tomé un sorbo de la bebida.

-¿Cómo te llamas?

-Amanda -hasta cree que le voy a decir mi verdadero nombre, debo cuidarme de estos hombres.

-Fabián -no era él.

-Él paga -me levante de mi lugar y me retiré del bar; había sido una noche "floja" ¿tanto miedo le daba a los hombres?. Suspiré.

¿Qué estaba haciendo mal? Creo que iba a necesitar ayuda y mucha; aunque sabía como iba a solicitar esto. José Luis lo iba a hacer.

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