Epílogo

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*** Tiempo actual ***

-¿Qué paso después? -me preguntó la doctora.

-Desperté de la operación y cuando me dieron de alta, con el corazón sano la enfermera que me atendió todo ese tiempo me dio una nota, era de Aura, y aunque suene tonto me alegre de haber tenido noticias de ella, porque no lo volví a ver más en el Hospital después de mi operación y claro ¿cómo la iba a ver? Si ya estaba muerta -sentí que mi ser se desplomaba de nuevo a un gran abismo lleno de vidrios rotos -caí en cuenta que estaba vivo gracias a ella, que eso de que tenía un corazón para mi era verdad, pero pensé que al referirse con que su corazón me pertenecía era porque sentía algo por mi y no porque fuera a matarse porque nunca lo hubiese permitido; en la primera carta que leí me dijo que jamás se pudo enamorar de mi aunque era lo que más deseaba y no sé si eso es lo que más me duele en el alma

–¿Y tú sabias todo esto? ¿Todo lo que había pasado? Me refiero a las cosas que nunca te contó, pero que como sea encontraste excavando en los recuerdos

–Siempre supe que algo le había pasado, algo más allá de un simple infierno con su madre y con uno de sus amantes, sabía que había quedado embarazada por una razón que le dolía, ella misma me lo contó, pero a pesar de eso, yo quería protegerla, prometerle que sería el papá de su hijo si en su momento llegaba a necesitarlo, la amaba de verdad, aunque nunca se lo dije 

–¿Y por qué estás tan seguro de qué era amor lo que sentías por ella?

–Porque me enamoré de su oscuridad y sus demonios y estaba dispuesto a darle un infierno más grande, porque cuando estaba a su lado solo veía el presente, porque estaba dispuesto a morir por ella

–Ella murió por ti

–Lo sé y no entiendo por qué, tal vez algún día lo comprenda o tal vez nunca lo entienda, pero no importa, mi corazón es de ella tanto simbólica como literalmente, jugo con la muerte y la suerte a acompañaba

–Si pudieras decirle algo ahora ¿Qué le dirías?

–Que la amo y que le agradezco infinitamente lo que hizo por mi, a costa de su propia vida y de su hijo 

Me dirijo a ti, porque tú fuiste la única persona dispuesta a escuchar mi historia y bueno, ya sabes cómo empezó todo y como perdí el amor de mi vida, después como me convertí en un títere, sin razón, sin pensamientos y sin voluntad, guiado por los recuerdos, un simplemente muñeco roto que vaga sin alma por el mundo, pero ahora quiero preguntarte ¿quieres saber como termino esto?

Cuando murió Aura pensé que los finales felices no existían, que eran una idea comprada y vendida por las telenovelas y los cuentos de hadas, al final de todo, la vida no es perfecta pero sus razones tiene para que pasen las cosas ¿a qué voy con todo esto? Fácil, ahora entiendo porque después de todo seguía en este mundo, aún no cumplía mis sueños, ni mis metas, me faltaba formar una familia, un futuro, vivir por dos como me lo había pedido Aura antes de morir.

No me casé con Aura, ni siquiera supo que la amaba, al menos pude darle ese último beso que quedo tatuado en mi memoria y en mi alma, y ahora soy como un lobo, mi aspecto después de liberarme de todo está carga emocional es de un hombre fuerte, pero cada mes, el día del "aniversario" voy y aulló a la Luna, llorando y esperando el regreso de mi amada, tan solo el recuerdo de su voz guiada por el viento de la fría oscuridad de la noche.

No sé si vuelva a enamorarme, pero no me cierro a la idea, tampoco sé si mi corazón resista una pérdida más, pero estoy dispuesto a arriesgarme; quiero ser feliz, por Aura, por mi, por nosotros.

Espejo Roto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora