Yuuri no se resistió al beso, pero tampoco coopero, simplemente se dejó, hasta que Otabek se separó, las mejillas del japonés estaban más encendidas que el carbón bajo una fogata.
La única persona en toda su vida que lo había besado así era Viktor, pero ahora, ahora su mundo se ampliaba mil veces.
–Quiero golpearte– dijo Yuri bajando la mirada– pero, aunque quiero, no puedo...
–¿Por qué? – pregunto Otabek nada arrepentido por su acción, aun se relamía los labios, era la primera vez que besaba a un hombre, y joder, estaba emocionado.
–¡Porque eres un imbécil!, ¿me quieres usar como sustituto? – pregunto Yuuri dolido.
–¡No eso no! – se disculpó Otabek.
–Entonces, ¿Qué? ¿No me digas que te gusto?, o ¿simplemente tienes preferencias por los yuris?
–No,no,no.
Yuri puso sus manos mojadas en los hombros de Otabek.
–No cometas el mismo error que esos tontos– dijo Yuri con mirada triste– además te he dicho que amo a Viktor– Otabek apretó los puños– yo, yo, así, simplemente no puedo, lo siento, no puedo perdonarlo, pero tampoco puedo iniciar algo, pero tu si puedes...
–¿Tú quieres que perdone a Plisetsky?
"Vaya, ahora le dice Plisetsky, sí que está enojado", pensó el de ojos chocolate.
–Claro, porque no es lo mismo– contesto Yuuri–, nuestro problema fue que Viktor eligió a su carrera antes que, al amor, cuando el idiota pudo tener ambas.
Otabek se sintió aún más atraído por Yuri, defendía sus sentimientos, no importa que estos los hubieran aplastado, era fiel, pero el japonés había sido claro, finalmente dejo los hombros de Otabek y dio un paso atrás, pegándose levemente con el fregadero.
–Ten una cita con Yurio, no simplemente un paseo en moto.
–Ah supiste eso– dijo avergonzado el kazajo.
–Altin, lo supo el planeta entero– dijo Yuri con una sonrisa tímida– mira, si me gustas– dijo sorprendiéndolo–, pero solo como amigo– "creo yo, eso debe ser", pensó no del todo convencido – a tu lado he visto cosas que no conocía, y me he dado cuenta que no soy tan normal como pensaba, que tengo ciertas obsesiones, ha sido maravilloso el reencontrarme.
–Como que te gusta abusar del azúcar– dijo Otabek con una sonrisa– o acomodar tu ropa por colores, o que solo limpias tus lentes con un pañuelo de perritos.
–Pareces mi acosador, quien te viera Altin.
–Solo soy buen observador Katsuki.
Ambos soltaron unas sonoras carcajadas.
Después Yuuri extendió su mano, en señal de que todo seguía como antes– aunque eso no lo hacía feliz del todo– había aprendido de Otabek apretar las manos en señal de un acuerdo.
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Yuri On Fire
RomanceResumen: Viktor no solo quiere el oro, quiere todo de Yuri, pero al parecer, al final del podio habrá lagrimas, cuando la verdad de Viktor salga a la luz, pero también Yuri habrá de renacer. Y tal vez en el camino su corazón cambie de dueño en Kazaj...