Llegó ese día tan esperado y de incertidumbre, viernes.
Por la mañana, como todos los días entrenamos, hoy fue una cáscara solamente, para divertirnos y des estresarnos un rato, después de todo, los campeones descansamos a veces.
Al salir de verde valle, activé el modo Sport del BMW, y como no tiene placas locales, poco me importó respetar los límites de velocidad, y esquivar autos uno por uno como si fuera un día en la oficina en el McLaren.
Llegué al edificio haciendo sonar el motor de BMW, estacioné , apenas apagué el motor y me bajé.
Mi cabeza daba vueltas, mientras observaba como iba subiendo en el elevador panorámico, abrí la puerta del loft, y lo primero que hice fue elegir el outfit de hoy.
Camisa blanca, suéter sencillo, jeans, algo tranquilo, pero con estilo.
Me duché con música de Kakkmaddafakka a todo volumen, y salí para vestirme rápidamente, eran apenas las dos de la tarde, quedé de salir con Leslie a las cuatro; me tiré en el sofá y abrí YouTube, puse videos de unos buenos amigos, BagreTV, amigos míos de Monterrey con quienes ya grabé una vez.
Después de un buen rato de risa y de despejar la mente, me levanté, volví a cepillarme los dientes y bajé al BMW.
Ahora sin ninguna prisa y con toda la calma del mundo, conducía a la casa de Leslie; pensando en cada cosa que pudiera suceder y como quisiera que corriera la cita.
Me estacioné exactamente donde lo había hecho la otra vez, bajé y caminé hasta la puerta; llamé a ella y abrió su hermano.
- ¡El campeón llegó! pasa hermano, Leslie me dijo que la invitaste a comer.
-¿Qué hay Gabo? Así es amigo, hoy iremos a comer, aún no sé dónde, veremos que le apetece a Les.
-No es exigente, algo sencillo campeón.
-Lo que ella decida, y no me llames campeón, soy Marcelo o Adrián como cualquier otro.
-Vale jaja, está bien Marcelo, mira ya viene Leslie.
Leslie, bajaba las escaleras muy despacio, me acerqué a ella, no dije nada y me dio su mano para ayudarle, cuando bajó, dejó su mano junto a la mía y la apretó un poco, no quiso soltarme.
-Gabo, avísale a mamá que Adrián vino por mí- le dijo
-Sí hermanita, no te preocupes, diviértanse.
-Gracias Gabriel- le dije -Nos vemos más tarde-
Caminamos de la mano hasta el coche, abrí la puerta, le ayudé a subir y le aseguré el cinturón.
Subí, y encendí el auto en seguida.
-Muy bien Leslie, ¿A quién quieres escuchar hoy?
-OneRepublic
ESTÁS LEYENDO
Chico McLaren
DiversosMarcelo Jiménez, un joven piloto mexicano, tuvo una conversación con Ron Dennis, jefe supremo de McLaren. Dennis le pide que viaje a Inglaterra a probarse con el equipo. En el Proceso, Marcelo descubrirá el amor, los negocios, las traiciones, trage...