Capitulo 9: Felicidad

127 11 1
                                    

Un mes y una semana

- Llevas toda la mañana texteando - me regañó Rachel.

- umm...Frank quiere que vaya con él.

- ¡Yay! - mi hermana sonrió - ¿donde irán?

- Al bar ese...de Emma

- pff, no vayas

- Dice que Emma no está, viajó nuevamente.

-Entonces ve...

Claro, ahora, se acordaba de mí. Ahora que Emma no estaba, la tonta y fea Emma.

Muere pium, pium...ok no, eso no iba a funcionar.

Tal vez debía aprovechar esta oportunidad en que Emma no se encontraba para salir como antes con Frank y divertirnos un poco.

Lo medité y al final acepté.

Pasé bastante tiempo escogiendo que ropa usar, estaba muy indecisa así que cuando Angel llegó del trabajo la secuestré a mi habitación.

- Espera, espera ¿tú piensas ir con esa ropa interior de estrellitas?

- ¿Qué tiene?

- Estás mal chica, muy mal - se puso de rodillas y comenzó a registrar mi cajón de ropa interior - no, muy de niña, muy...blanco, esto parace de mi mamá...¿corazones? no, esto no...mm...no tampoco...¡Bingo! - Angel se acercó a mí y me entregó un conjunto rosado de encaje.

- No me pondré esto.

- Es lindo y cómodo. Te servirá.

-Angel, no me voy a acostar con Frank.

- No importa, te sentirás sexy por dentro, créeme funciona.

- Bueno...

Angel tomó un vestido plomo sencillo y decidió que ese era el correcto además incluyó unas pantys negras y unos zapatos del mismo color.

Yo solo acepté, dejé que me peinara y maquillara...sí me estaba preocupando más de lo normal en como me vería pero...no sé, quería impresionarlo. Lllamar un poquito su atención...

Cuando Frank vino por mí y me subí al autómovil me miró raro.

________________________________________

Desde que comencé a salir con Emma Sophie se cortaba muy raro. Siempre estaba de mal humor y decía comentarios ácidos.

Me sentía culpable porque, lo más seguro, es que ella creía que la abandonaría como lo hacían todos...no quería que pensara así.

Además aún me sentía culpable por el episodio que tuvo con Gerard. 

Había pasado mucho de aquello pero aún me sentía triste.

Emma se había ido a visitar a sus padres, como hace periódicamente, así que aproveché de invitar a Sophie al bar para que no se topara con ella.

Al principio se rehusaba, me costó toda la mañana convencerla hasta que lo logré. Aceptó.

Cuando pasé por ella y se subió al automóvil el olor a su perfume llenó el lugar y no pude no mirarla como tonto. Se veía hermosa, más de lo normal...

Sí, sé que no debería pensar así pero hay veces que no puedo controlarlo.

- ¿Por qué me miras así? - preguntó frunciendo el ceño - ya sé, me veo mal.

- No, no, no seas tonta.

- Ahora soy tonta - me miró mal y luego se giró para mirar por la ventana.

Cenizas parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora