Querido Profesor [Jortini ]

Capítulo 22 : eso es todo.

Al llegar a mi casa, el suelo fue inmediatamente mojado por nuestras figuras. Fui hasta mi habitación por dos toallas, y le tendí una. Ella empezó por su cabello y se tornó rizado.
Al verlo su blusa, sus mejillas enrojecieron y sus ojos se abrieron.
Con el agua si blusa casi se había vuelto transparente, y deja verlo la lencería que usaba.
No voy a mentir que no eche una mirada.
—Profesor, será que puedo usar su ducha, en mi mochila llevo ropa de deporte y creó que me servirá. Ya sabe las ventajas de una mochila impermeable.
—Oh claro, al fondo a la izquierda. Ahí están las toallas y todo.
—Gracias.
Yo me senté en el sillón, y saque mi corbata la deje en la mesa.
Estaba impresionado por lo que había visto, la imagen de su blusa, de sus piernas corría por mi mente. Y algo despertó en mi.
Pero yo no podía pensar así,no podía.
Cuando ella salió de la ducha, no entré y su olor estaba allí impregnado. Al último de la ducha, puse el agua fría para borrar todo rastro de impureza en mi mente.
Salí y ella estaba tomando el café que le dejé con algunos chocolates, ahora llevaba un pantalón rosa hasta las rodillas, y una blusa gris. Y encima una chompa de deporte mía.
Se la veía mejor, más estable y sin frío.
—¿Puedo hacerte una pregunta?
—Ya la has hecho, Stoessel.
Ella sonrió, ahora ella estaba nerviosa.
—Si, lo se. A otra me refería.
—Hazla sin miedo.
—Yo —dijo jugando con sus manos —quiero seguir en unos años literatura inglesa. Realmente me gusta.
—Oh,eso es increíble. Es una carrera hermosa.
—Lo sé, me he dado cuenta.
—¿Y cuál es tu pregunta?
—Yo quisiera que me ayudes buscando una universidad, o algún curso para iniciar con esto. Sabes tengo algunos escritos pero no se si sean lo suficientemente buenos.
—Por supuesto, y con respecto a lo último, tráelos y yo te podré dar mi más sincera opinión.
—¿De verdad?
—Claro Martina.
—Eso haré, yo te avisaré antes de venir. Ahora debo irme mi taxi ha llegado —dijo con el teléfono en la mano.
Yo miraba a mi taza de café, hasta que sentí su mirada, nerviosa y feliz.
Todo fue muy rápido hasta antes de que reaccionara, ella ya me había dejado un beso en la boca .
Tal vez era su forma de dar las gracias.
Tal vez..