Love in da storm (Harry & tu) *TERMINADA*

Capítulo 25:

-Primero...

-Espera... ¿primero?, me dijiste UNA condición -la interrumpí dejándola con la palabra en la boca, se detuvo y me miró exasperada. Exhaló fuerte y me miró

-Es una condición con... un par de cláusulas -me dijo con su mejor sonrisa de gatito. Ni siquiera me di la molestia de quejarme o discutir, me iba a ganar igual, así que le hice un gesto para que continuara mientras me acomodaba... amurrado en mi silla, preparándome para escuchar mi condena.

-La letra la escribes tú, yo sólo te daré los acordes y punto, ah... y la escribes solo, te vas no sé donde, y luego vienes con migo. Voy a tratar de pasar la menos cantidad de tiempo con tigo -me limité a mirarla, lo que me decía en verdad me dolía, con el tiempo le había tomado un cariño enorme a esa chica que estaba loca, pero supongo que también la perdí.

-Segundo... no quiero que te acerques a ________ mientras estás en tu período creativo -cuando la oí me incorporé tan rápido que caí de la silla causando que Sol estallara en risas. Me puse de pie mientras me sacudía y la miré con mis ojos casi saliéndose de sus órbitas; otra vez, no fui capaz de objetar nada, pero supongo que mi expresión hablaba por mí -Sí, no quiero que te le acerques aún. Tiene que pensar un poco, digerir lo que sucedió, plantearse si quiere o no estar con tigo. Y como supongo que tu experiencia con canciones es la misma que la mía con los aviones, _______ gozará de un largo tiempo a solas

-Pero...

-O no te ayudo -sonaba terroríficamente segura, no tenía otra opción, tendré que mirar una foto de ella para inspirarme más. -Y tercero... -me puse alerta rápidamente

-Me dijiste que era un par

-Bueno... me confundí. Quiero que la canción esté en inglés

-QUÉ?! Pero... Por qué, o sea... no tiene lógica -parecía que ella gozaba con mi tortura -dime para qué la quieres en inglés -mi voz tenía un tono agudo porque expresaba todo mi desconcierto, sorpresa y miedo.

-Porque no me caes bien y quiero que te cueste.

Y luego de decirme eso, se puso de pie con una sonrisa de satisfacción en su rostro y se dispuso a salir.

-Vigila los tallarines, no quiero que los estropees como lo haces con todo

Está bien, me lo merecía... Sol era de las pocas personas que me golpeaba con lo que más me dolía, pero era totalmente comprensible, por mi culpa perdió a su mejor amiga, por mi culpa ya nada era como debería ser. Pero aún así, cuando estaba a punto de salir, se dio media vuelta y me regaló una sonrisa, dándome a entender que no me odiaba tanto como parecía.

Me vi solo en la cocina, por primera vez desde lo sucedido con ________, me quedé con migo y nadie más. Sentí como la tormenta volvía a llegar, subiendo lento hasta llegar a mi garganta. Solté un sollozo y lloré frente a los tallarines, con un nudo que llegaba a doler físicamente, con un corazón roto, y tan duro por recordar nuestro hermoso encuentro. Me sentía en el ojo del huracán.

Habíamos hecho el amor, la tuve entre mis brazos y ahora la necesito como un desquiciado, incluso más que al mismo sol.

Ni siquiera me molesté en tratar de contener mis lágrimas, dejé que salieran en paz... que recorrieran lo que debían recorrer. Ahí me quede, llorando junto a una silla vacía, recordándola a ella y a lo que fuimos una vez... Me dolía todo, mi cuerpo era algo incorpóreo, yo estaba hecho de nada, mi alma ya no estaba, porque __________ la había llevado con ella para hacerla pedazos como una vez yo hice con la de ella.

Vuelve a narrar Rayis.

-Gracias Pat, pero creo que prefiero estar un ratito a solas -la chica me miró y no dijo nada más. Me regaló una dulce sonrisa y salió de la habitación, dejándome sentada a un lado de la ventana, mientras abrazaba mis piernas mirando hacia el patio de la casa.