Como si fuese la primera vez (Zayn y tu)

Capítulo 23

Hi girls!!!!! Aquí estoy de vuelta!! Perdón por no haber subido, pero aquí les tengo listo el maratón de 5 capítulos !!! 

Maratón 1/5 :

Capítulo 23:

Estaba sentada en la clase de matemática junto a Luchi. Realmente la clase era ABURRIDA! Solo pensaba en que mañana era , mi cumpleaños. Pero la idea de seguir sumando edad no me entusiasmaba en lo más mínimo. En fin. Estaban explicando un tema que tenía más que claro, pero de igual modo tenía que asistir a la clase.

-______, esto no lo entiendo. Me lo podrías explicar? –Lucía y su cabeza dura para poder entender algo en esta materia. Se lo había explicado más de cien veces, y aún no le entra en esa cabecita, que solo pensaba en Jay.

-A ver Luchi, te lo explicaré de nuevo y seré clara…- volví a explicarle todo nuevamente, y cuando digo todo, es todo. Hasta lo del cuatrimestre pasado.

Al fin! Tocó el timbre. Dos de la tarde, teníamos un receso de 15 minutos hasta la próxima clase: política. Bien! Ahora cursaba con Zayn.

Salí del salón y me despedí de las chicas. Durante el camino siento que me toman de la cintura y me tiran hacia atrás. Volteo y logro ver esa mirada color miel que me derrite todo el tiempo. Planto un pequeño beso en sus labios que se va volviendo cada vez más intenso y entrelazo mis manos en su nuca mientras Zayn entrelaza las suyas en mi cintura.

-Zayn, estamos en el insti, ahora no. –trato de hablar en el medio del beso.

-Y qué tal si nos salteamos la última clase? No pasa nada, es solo una vez.

-No lo sé amor.

-Por favor. –hizo esa carita de perrito mojado a la cual no me podía resistir.

-Está bien, tú ganas. Vamos.

Salimos del edificio universitario y nos montamos en mi preciado BMW Serie 1, en el día de hoy yo había pasado a recoger a Zayn.

-Bueno, a dónde quieres ir? –le pregunté a mi novio.

-Elige tú.

-Tú quisiste saltearte clases. Ahora elige tú.

-Bueno, vayamos a mi casa a ver películas mientras comemos palomitas.

-Hecho. –y emprendí marcha hacia el departamento de Zayn.

Llegamos y bajamos.

-Hay alguien? –le pregunté.

-No creo. Y si hay alguien no es nadie más que mis hermanas.

-Okei.

Entramos al edificio y subimos hasta su piso. Abrió la puerta y se oyeron gritos desde la cocina preguntando quien era.

-Están mis hermanas, espero que no te moleste.

-Estás bien? Cómo va a molestarme!

Continuamos hacia la cocina y estaban las dos niñas sentadas en la barra desayunadora realizando sus deberes.

-_________!! –gritaron las dos al unísono al verme.

-Niñas, cómo han estado?

-Muy bien. Y vos? –comentó la pequeña.

-Bien! Y, que deberes están haciendo?

-Historia –respondió Waliyha

-Lengua –dijo Saffa.

-Necesitan ayuda? –ofrecí con amabilidad.

-No gracias, yo entiendo –dijo la pequeña.

-Yo tampoco –dijo Waliyha.

-Okei, y, qué tal si cuando terminan vamos por unos helados?

-Siiiii –dijeron ambas al unísono.

-Hecho. –me giré hacia Zayn –yo haré las palomitas, tu escoges la película.

-Vale –dijo Zayn depositando un besito en la punta de mi nariz.

Comencé a hacer el caramelo en la fuente de cobre, mientras que puse maíz en otra. Traté de hacer todo lo más cuidadosamente posible, para no ensuciar más que las fuentes. Al final todo salió perfecto. Lavé las ollas utilizadas y coloqué las palomitas en un bowl. Luego fui hacia el living.

-Qué película has elegido? –cuestioné.

-“A walk to remember”. Te gusta?

-Es broma no? Voy a llorar toda la película. No podrías haber escogido algo menos dramático?

-No, esa es perfecta. Ven, siéntate. –dijo haciéndome un lugar a su lado; me senté –estaré aquí para cuando llores preciosa. –susurró en mi oído.

-Te amo –le dije estirando mis labios y besando los suyos, suaves y adictivos. Eran la droga perfecta.

-Yo también. –me dijo él –he notado que te llevas muy bien con mis dos hermanas.

-Pues sí, son estupendas, como su guapo hermano.

-Por favor no digas más cosas así, que me pones, y mucho. Y no podré resistirme.

-Veamos la película. –dije dándole un último beso y apoyando mi cabeza en su pecho. La película comenzó.

Era ya mitad de la película y mi rostro estaba prácticamente empapado en lágrimas y comía muchas palomitas. El final llegó y yo ya no daba más, era un mar de lágrimas.

-Recuérdame que no veamos nunca más esta película –me dijo Zayn en forma de chiste.

-Te dije que no la viéramos. Bueno, no importa. Quieres que vayamos con las niñas por sus helados?

-Sí, las llamaré.

Zayn caminó hacia la cocina y logré oír que las llamaba.

-Niñas, vamos por los helados?

Y enseguida las dos estaban al lado de la puerta.

-Creo que eso es un sí –dijo mi chico. Yo reí y salimos.

Fuimos caminado hacia en parque cercano a la casa de los Malik y compramos a Saffa y Waliyha sus helados en el puesto de la plaza.

-Quieres uno? –ofreció Zayn.

-Bueno, de oreo –dije yo.

Zayn compró los helados y me tendió el mío.

-Oye –me dijo el moreno, llamando mi atención.

-Sí?

-Esta noche quieres pasarla en casa conmigo?

-Estás seguro?

-Si ______, sino no te invitaría.

-Tonto –le dije empujando su hombro un poco –está bien. –zayn me acercó a él y besó mis labios dulcemente. Era lo mejor que me había pasado.

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