The Demon and Me | Adaptación

Capítulo 13

Capítulo 13

—Has estado genial esta noche, Pam. —Colby envolvió a Bayley en sus brazos y le besó la frente.
—También tú, Colbster. —Bayley miró a Colby con la barbilla apoyada en su pecho.

— ¿Colbster? Colby se echó a reír, apartando un trozo del cabello de Bayley de su rostro mientras se alejaba suavemente del abrazo.

Buscaba a Fergal, ¿había desaparecido? Pero nadie más parecía buscarlo. Bayley sintió que él no le estaba diciendo algo, que estaba dejando algo fuera. Algo no estaba bien entre ellos y ella no sabía lo que era. Bayley miró alrededor de la habitación ocupada una vez más, ¿acaso lo había visto en primer lugar? Sabía que estaba cansada, pero no creía que estuviera lo suficientementemente cansada como para tener alucinaciones. ¿Pero estaba segura de que lo había visto?

— ¿Estás bien, Pam? —Colby frunció las cejas de una manera preocupada.

—Oh... sí. Sólo me perdí en mis pensamientos —ella se echó a reír.

— ¡Hiya! —Mercedes corrió hacia Bayley y Colby. Bayley se rió, ¿cómo Mercedes lograba tener tanta energía siempre? —. Amiga, ¿has visto el catering épico que este lugar tiene entre bastidores? —Los ojos de Mercedes se ensancharon con pasión por la mesa de buffet servida para los luchadores.

—No, estaba a punto de ir a comer algo —Bayley sonrió.

—Tengo que ir a hablar con Kevin, ¿las veré luego? —Colby abrazó a Bayley y se despidió mientras salía de la habitación.

Mercedes y Bayley comenzaron a hacer su camino hacia la mesa.

—Entonces, ¿cómo has estado de todos modos? Se siente como siempre desde que pasan juntos el rato —Mercedes puso los ojos en blanco mientras hablaba.

— ¿Qué quieres decir con esos ojos de poseída Merc? —Bayley se detuvo en medio del pasillo.

—Es que solo has estado con Colby últimamente, no me importa salir con Austin, Ashley, Rami, Enzo y Collin, solo... eres mi mejor amiga, ¿sabes? —Mercedes suspiró, ofreciendo una sombría sonrisa.

— ¡Mi niña! —Bayley abrazó a Mercedes riéndose, hizo una pausa y repentinamente se quedo seria—. Siento haber estado mucho últimamente con Colby. Haré tiempo para ti Te lo prometo. Eres mi compañera en el crimen, chica, yo lo siento.

— ¡Mi niña! —Replicó Mercedes, y abrazó a Bayley de vuelta—. ¡No puedo creer que estés con Colby! ¡Nunca podría haber imaginado que ustedes serían algo!

— ¿De verdad, nunca podrías imaginártelo? —Los pensamientos de Bayley comenzaron a dudar ante cualquier situación que tuviera con Colby.

—Sinceramente —Mercedes se detuvo—. Siempre me imaginé que terminarías con un tipo como Fergal.

— ¿Fergal?

—Siempre tuvieron química, supongo, siempre había algo entre ustedes dos. Tal vez era en la forma en que se miraban o algo...

—Mercedes, ¿por qué dices eso? —Bayley suspiró interrumpiendo a Mercedes.

—Bueno, puedo decir todo esto finalmente, ahora estás feliz con Colby —Mercedes sonrió.

—Bueno, no digas esas cosas, ¿de acuerdo?

—Jeeze, está bien.

El par continuó caminando hacia la restauración.

— ¿Merc? —La voz de Bayley se tranquilizó, pero la miraba ansiedad—. Creo que me gusta Ferg.

Mercedes se quedó en silencio por lo que le pareció una eternidad a Bayley. —Lo sé.

— ¡Tía, deberías haberme dicho que me gusta! —Bayley suspiró, ¿qué había hecho?

—Pensé que lo sabías, es bastante obvio chica obvia —Mercedes habló suavemente.

Bayley empezó a desear que le hubiera contado a Fergal sus sentimientos, entonces al menos podría seguir adelante con su vida, sabiendo con certeza que a él no le gustaba ella.

—Voy a tomar un poco de aire fresco, hablamos más tarde Merc —Bayley se fue, dejando a Mercedes al lado del servicio de comidas.

Bayley entró en el balcón de la arena, se podía ver todo desde allí. Abajo, una ciudad llena de gente. La gente en las calles eran hormigas para Bayley, eran hormigas sólo cuando se atrevía a mirar hacia abajo; tenia miedo de hacerlo de antemano por terror a caer. Por encima de ella, el claro cielo nocturno dio paso a una abundancia de estrellas.

La gente dice que un cielo nocturno es negro. Los niños dibujan cielos nocturnos con un marcador negro, el cielo se describe como la obsidiana, o el carbón. Pero un cielo nocturno no es negro. Es una poción increíble de azules y púrpuras, todos se arremolinaron en un gran cielo. Disperso sobre ella, estrellas que iluminan el cielo; y el tipo de luna brillante en la que los jóvenes soñadores bailaban.

Bayley siempre había amado la noche, en el día siempre parecía haber un calendario establecido de eventos. La noche sin embargo, ella era libre. Era ella, las estrellas y la luna.

Bayley suspiró, dondequiera que fuera Fergal, estaría mirando hacia la misma gran luna. Ella tuvo que cortar esta basura de Fergal, pensó que al meterlo en su cabeza nunca lo resolvería. Ella había tomado su decisión y se había comprometido a cumplirla.

Ella sintió una presencia unirse a ella en silencio en el balcón. Ella lo miró brevemente, confirmando que él era en realidad Colby.

Bayley permitió que una leve sonrisa llegara a sus labios mientras apoyaba su cabeza en hombro de él, todavía mirando a esas estrellas. Tenía a Colby. Tenía a las estrellas.