The Demon and Me | Adaptación

Capítulo 21

Capítulo 21

— ¡Pammie! —La madrastra de Bayley abrió la puerta con una gran sonrisa en su rostro—. ¿Tú debes ser Fergal? —Su sonrisa no se desvaneció.

—Encantado de conocerte —Fergal asintió, sonriendo y extendiendo su brazo para darle un apretón de manos—. Quería darte las gracias por tu generosidad al permitirme quedarme aquí para el Día de Acción de Gracias.

—No hay necesidad, aquí eres bienvenido, cualquier amigo de nuestra Pammie Wammie es una amigo nuestra —ella los introdujo en la casa, cerrando suavemente la puerta detrás de ella.

— ¿De Verdad? —Bayley negó con la cabeza riendo entre dientes.

— ¡¿Qué?! —La mujer sonrió burlonamente.

— ¿Pammie Wammie? —Bayley se echó a reír, abrazándola.

Justo entonces un grito se escuchó desde arriba, un joven de unos 20 años llegó corriendo escaleras abajo—. ¡Pam! —el hombre tiró de Bayley para darle un apretado abrazo.

De repente, el hombre se dio cuenta de la presencia de Fergal, una mirada de sorpresa le iluminó la cara y estaba perdido en su mundo.

—Fergal este es mi hermano pequeño Liam, Liam él es—

—No necesitas decirme quién es —el hombre la interrumpió, extendiendo una mano hacia Fergal—. Me alegro de conocerlo, soy un gran fan.

—Encantado de conocerte también Liam —Fergal le estrechó la mano, sonriendo cortésmente.

—Espera... ¿cómo es qué Finn 'jodido' Balor está aquí para acción de gracias? —Las cejas de Liam fruncieron—. ¿Están ustedes juntos o...?

Fergal tartamudeó para encontrar sus palabras, pero afortunadamente él fue salvado por la campana, antes de que pudiera contestar a la pregunta de Liam el padre de Bayley cruzó la puerta.

— ¡Papá! —Bayley corrió hacia su padre, envolviéndolo en un abrazo—. ¡Estoy en el roster principal!

—Lo sé, finalmente tengo la oportunidad de decirte en persona lo muyorgulloso que estoy de ti.

—Nunca podría haberlo hecho sin tu apoyo papá. —Ella sonrió. Lo estrechó un momento antes de soltarse del abrazo.

—Un placer conocerlo Sr. Fergal Devitt, soy un gran fan de su trabajo en el ring. Esperemos que deje la misma impresión de usted fuera del ring como dentro de él —el padre de Bayly le dio a Fergal un firme apretón de manos.

—Haré lo mejor que pueda, señor Martínez —Fergal se mantuvo serio.

Y la madrastra de Bayley habló, —Voy a empezar a hacer la cena, ¿qué tal si ustedes se arreglan mientras lo hago? —Le dedico a Fergal una sonrisa tranquilizadora.

—En realidad Pam, ¿por qué no vas a ayudar en la cocina por cinco minutos? —El señor Martínez tenía una voz profunda que resonaba por toda la habitación, una de esas que te suenan aterradoras.

—Oh, está bien papá —ella le dirigió una mirada a Fergal mientras salía de la habitación, deteniéndose justo antes de cerrar la puerta de la cocina detrás de ella—. ¿Papá? —Su voz era baja—. Se amable —Bayley cerró la puerta de la cocina, dejando a regañadientes a Fergal a solas con su padre.

— ¿Cuáles son tus verdaderas intenciones entonces Fergal? —El señor Martínez levantó el pecho, haciéndose más grande e intimidante.

— ¿Perdón? —preguntó Fergal, confundido.

— ¿Qué quieres de mi hija? Todos quieren algo, yo supe enseguida lo que Aaron quería, yo lo odie todo el tiempo, pero lo dejé volar bajo mi radar, no me deshice de él antes de que yo. Antes de que rompiera el corazón de mi niña, no dejaré que nadie más se deslice bajo mi radar: ¿Has oído eso Fergal? —Martínez claramente quería proteger a su hija.

—Señor, no quiero nada de su hija, nunca haría daño a su hija, o haría algo similar a las acciones de Aaron. Detesto a Aaron. Lo que le ha hecho —Fergal rápidamente cambió su tono a una voz más suave—. Aunque tal vez no le digas eso a Pam. Mire señor, yo amo a su hija, creo que... que ella puede ser la única. No... ella es la única para mí. Haría cualquier cosa por ella, cualquier cosa para protegerla —Fergal hizo una pausa, suspirando.

— ¿Has hecho que Aaron salga de su vida? —Una leve sonrisa comenzó a crecer en sus labios.

—Sí señor —Fergal inhaló nervioso.

El señor Martínez suspiró: — ¿Dices que amas a mi hija?

—Más que nada en este mundo —Fergal se mordió el labio con ansiedad.

— ¿Más que a lucha libre? —Alzó una ceja con curiosidad.

—Más que luchar —Fergal asintió con confianza.

—Sólo probándolo muchacho —el señor Martínez se rió entre dientes, dándole palmaditas en la espalda—. Trata bien a mi hija Fergal.

—Y lo haré —Fergal sonrió aliviado.

—Llámame Steve —sonrió, Fergal había ganado su aprobación.

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Fergal se despertó con una sonrisa en los labios, se acercó a la mesilla de noche, agarrando su teléfono que sonaba y recogiéndolo. — ¿Hola?

—Hola Fergal, es Hunter.

Fergal se sentó en la cama, siempre estaba preocupado cuando su jefe le llamaba.

—Buenos días, ¿en qué le puedo ayudar?

—No hay nada de qué preocuparse por Fergal, sólo fui contactado por el programa de radio noticias de lucha inglesa, estarán teniendo este espectáculo de aniversario en Londres y quieren que hagas una aparición, hacer una rueda de preguntas y respuestas. Puede elegir un miembro Raw de tu elección para ir con usted. ¿Eso sería plausible?

Fergal hizo una pausa, viendo a Bayley dormida junto a él. —¿Pamela puede venir conmigo?

Hunter hizo una pausa. —Puedo arreglar eso para ti, sí, eso es todo por ahora. Hablamos pronto Fergal —Hunter colgó el teléfono.

Fergal se recostó en la cama, observando la cara de Bayley al despertar. Se habían ido a la cama temprano la noche anterior, los dos seguían con el retraso de los largos vuelos a California. Los ojos de Bayley se abrieron de par en par, ella también se recostó, mientras despertaba despacio.

Fergal empezó a trazar círculos ligeros sobre la piel desnuda de su estómago, incapaz de resistirse a tocarla cuando se veía tan tranquila y pura. Ella se agachó y colocó su mano encima de la mano de Fergal en su estómago.

Fergal levantó su mano suavemente, besándola ligeramente antes de sujetarla en su mano, pasando las yemas de sus dedos alrededor de la palma de su mano.

Fergal se sentó en la cama, inclinándose mientras le daba un beso en la frente. Sus labios se posaron en la parte superior de su cabeza, lentamente comenzó a hacer un camino de besos suaves por su nariz, colocando un ligero beso en la punta de su nariz antes de moverse hacia sus labios. Al principio sus labios apenas tocaron los suyos, pero Bayley no pudo resistir, se sentó ligeramente; besándolo con más anhelo y profundizándolo. Cada beso envió escalofríos a través de ambos cuerpos. Apenas podían alejarse el uno del otro. Todavía no habían acordado tener una relación, de hecho aún no eran novios oficiales. Pero él no pudo contenerse. Bayley lo besó una vez más, cuando estaban juntos, todo estaba bien.