Desesperación por ti [Kiho]

No necesito verte para saber que eres tu +18

Kihyun en ese momento estaba luchando contra espasmos de placer que no le dejaban pensar, tenia a su compañero y amigo de grupo hincado sobre su espalda, queriendo violarlo de una manera algo extraña. Wonho parecía querer la aprobación suya antes de hacerlo. ¿Acaso estaba loco? Sí, probablemente; después de todo había ido perdiendo la cordura con el tiempo. Y ahora con todos sus sentidos sabiendo lo que hacía no podía parar y tampoco quería.

Los dedos del vocalista principal se agarraron contra la madera cuando un liquido viscoso empezó a meterse en su ano y no pudo disimular ni un momento el placer que acababa de recorrerle.
Jadeando estrepitosamente su cuello se arqueó, casi obligando a que un deseoso Wonho mordiera la piel expuesta.

— ¿Acaso te gusto o qué es lo que dices?— preguntó en trance y escuchó la risa dulce del platinado que asentía sobre su hombro mientras seguía frotándose, sentirlo era tan dulce para Kihyun que no supo cuando empezó a acompañar el movimiento.

—No. No soy tuyo. Yo soy mío. —respondió antes de que terminara de perder toda la consciencia. Hoseok no disfrutó esas palabras, su rostro se contrajo un poco, frunciendo la nariz y apretando sus labios. Rápidamente bajó la mano al miembro ajeno, bombeandolo con fuerzas para luego dejarlo abandonado sobre la almohada, unos quejidos que casi se convertían en gritos salían de los labios ajenos. Wonho comenzó a meter uno de sus dedos dentro de aquel pequeño agujero, lo hundió hasta sentir que hacía tope y empezó a meter otro inmediatamente, moviéndose a ambos lados, estirando el diámetro de su entrada. No podía decir ni una sola cosa y Kihyun estaba muy ocupado gritando y soportando la intromisión para formular alguna frase.

Un segundo después el rubio volcó mas lubricante y metió un tercer dedo sacudiendo todos ahora de adentro hacia fuera, buscaba encontrar algún punto en donde los gritos y jadeos del chico le dijeran que se sentía bien. Cuando una textura mas suave se hizo presente dentro sintió al saco de huesos moverse contra la almohada, parecía querer masturbarse, parecía que ese punto casi le hacía acabar. Pero no podía ser tan complaciente, las cosas no iban a funcionar así.

A tientas sacó una soga delgada y de algodón, no advirtió lo que haría hasta que sacó los dedos de adentro de la húmeda cavidad y enroscó los testículos y la base del miembro de una vez y volvió a enroscar hasta hacer un nudo. Lo soltó entonces y dejó tal y como estaba, ignorando el gritillo casi desgarrador que había sacado Kihyun de sus cuerdas vocales. Parecía un gato aplastado y ahora muriendo.

— Si solo me dices que eres mío... Es tan molesto verte pegado a los demás. No quiero verlo mas. Mghr, que ruidoso. — las palabras se arrastraron al final y Wonho se acerco a su obligado acompañante, estirando la mano en tanto metía los dedos dentro de la boca del menor, acallándolo un poco. Luego se dispuso a volver a meter las otras extremidades de la mano en su interior, primero uno y luego los otros dos juntos, Kihyun gimió al sentir llenas sus dos cavidades y Hoseok se sintió acabar. No lo hizo.

Empezó a mover sus falanges de forma simétrica, hundiéndose en la boca y su ano al mismo tiempo, no permitió en ningún momento que la mente del chico se relajara. Y fue solo cuando le sintió retorcerse aplastado en el colchón que dejó su boca. La respiración que salía de sus labios era la mas hermosa que había escuchado, dulce, melodiosa, como un gato ronroneando, su lengua estaba a medias afuera y Wonho la lamió porque podía. Kihyun le miró sumamente agitado, cansado y torturado, apretaba los dientes antes de querer hablar.

— S-Saca... esa mierda de mi. No controles mi orgasmo si encima me haces esto. ¡No es un chiste! ¡Hyung! E-esta no es la manera de declarársele a alguien... — la voz del pequeño controlador Kihyun estaba temblorosa y buscaba los ojos del rubio, encontrándolos. El más joven logró sentir pena por aquel rostro, no parecía haberse tocado ni una sola vez, sus mejillas estaban rojas y sus ojos casi al borde del llanto. El corazón del chico se derretía y rápidamente bajó la vista, dando leves temblores que se mezclaban entre los nervios y la excitación.

—Te d-daré una oportunidad Wonho, solo deja de hacerme sufrir. — Los huesos del mas joven parecía que se iban a salir de lugar por tanto temblar y la mirada de quien estaba en frente se hizo acuosa hasta que sus lágrimas escaparon, bufaba y mordía sus labios mientras asentía acercándose para poder comenzar un beso por demás de prolongado. Kihyun estaba en enloqueciendo y se removió.

— Hyung.— con los ojos le indicó que le soltara, pero Wonho estaba ocupado besando infantilmente su mejilla, parecía que se había olvidado del problema del pequeño por un instante, sin embargo había bajado la mano para acariciar sus nalgas, masajeandolas con tanta fuerza que provocó nuevos jadeos que inundaron el aire. El platinado comenzó a quitarse la única ropa que quedaba cubriendo su trabajado cuerpo. Cada músculo estaba allí, notándose mas apretado de lo habitual, sus venas sobresalían y su entrepierna parecía tiritar. Hoseok no había podido emitir una frase coherente desde hacía largos minutos y comenzó a frotar su miembro entre las nalgas ajenas, apretándolas para sentir mas esa piel. Con la mano buena empezó a desatar la agitada sexualidad ajena. Se dispuso a acunar al chico, abrazándole por detrás mientras se frotaba con su entrada y masturbaba al menor. Repartía besos en su espalda y nuca.

Pasaron los minutos y una contracción en su estómago le avisó que estaba por acabar, sus dedos se apretaron sobre el miembro ajeno y empezó a frotarse más, dejando la punta apoyada en la entrada ajena cuando se supo acabar, su rostro estaba contraído y adolorido, pero disfrutó cuando la cabeza de su entrepierna sintió el calor que emanaba de Kihyun, había manchado toda aquella área y parte de su esencia había logrado entrar en él. Movimientos más tardes el menor terminó corriéndose entre sus dedos.

— Quiero meterme. Kihyunnie... — silencio.

—No. No ganaste eso ni un poco. — la respuesta salió firme desde los labios del chico, aunque sus piernas parecían ramas al viento.

— Tengo hambre. —Kihyun volvió a hablar y Hoseok le miraba afligido, su rostro estaba entre el odio y la pena y la mirada del chico obligó a sus dedos a empezar a desatarlo, estaba temblando. Se había acomodado sobre el chico nuevamente, con las piernas a ambos lados de sus caderas, mientras se alzaba para desatarlo, el vocalista principal seguía sus pasos, su rostro seguía rosado. Cuando quedó libre alzó una mano a los cabellos de Wonho.

— Bájese de mi, Hyung.— los papeles casi parecían cambiados.

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Ya se que les corté el lemon (?) pero habrá mucho y mejor en los próximos capítulos. Si tienen alguna sugerencia soy todo oídos.

Como verán me encanta escribir lemon largo xD espero que no les afecte jajaja

La historia es como yo me imagino a Wonho y Kihyun en verdad xD los dos queriendo controlar todo, pero el enano es un maldito y el pansexual es una bolita de algodón jajaja

Saludos!