Impotencia.
Sí que era algo horrible, sentirse impotente ante alguna situación desesperante o difícil. La impotencia se encarga de poner mucho más complicadas las cosas en algunas ocasiones.
Pocas veces me había sentido impotente.
Y desde que soy este fenómeno he experimentado cosas que no había sentido antes, es muy desesperante. Como si hubiera vuelto a nacer y esta vida estuviera llena de situación es difíciles que me llenarán de nuevas emociones, entre ellas la impotencia, la ansiedad, el miedo.
Mi mente era una zona de caos y guerra, mis pensamientos, un desastre, y me costaba concentrarme, porque mi vida se había convertido en una gran mancha, expandiéndose poco a poco, siendo un estorbo, que en algún momento alguien iba a querer limpiar.
Sí que había sido un lío estos días, mi cabeza buscaba la forma de descargar todas esas emociones en las que era inexperta, tal vez golpes, o gritos, o simplemente llanto, pero nada de eso salía de mí, seguía igual.
Connor estaba colmando mi paciencia, agotando mi poca tolerancia, y metiéndose en mi vida de manera fugitiva, y era algo desesperante, lo odiaba por eso, era el típico chico entrometido que cree que lo sabe todo y se siente superior a los demás, que cliché.
Todo lo que me decía era nuevo para mí, no entendí nada, y es que la verdad no sabía muchas cosas que me estaban pasando justo ahora.
En el fondo sé que parecía una niña caprichosa, pero necesitaba saber, no iba a cometer el mismo error dos veces, no iba a permitir que alguien me volviera a lastimar de esa forma, y claro que me vengaría.
Mi muñeca dolía demasiado, y buscaba la forma de no moverla mucho. Iba en mi auto, manejando lo más rápido posible, me esperaba una larga conversación con mi mamá.
Estacione rápidamente el auto frente a la casa y corrí hacia adentro.
-¡Mamá, necesito tu ayuda!- grite desde la planta baja esperando que saliera de algún lugar.
-¿Alex?, ¿Qué haces aquí tan temprano?- dijo saliendo de su habitación y bajando las escaleras.
-Mi mano- dije levantando la mano que tenía lastimada con la que estaba perfecta.
Corrió hacia mí y tomo mi mano entre las suyas, a lo que yo hice una mueca y la aparte rápido.
-¿Qué pasó?- entro a la cocina y la seguí, ella buscaba algo en los gabinetes que estaban arriba.
-Un idiota me golpeo, creo que sabe algo...- bajo unas velas y las puso frente a mí y yo me sentaba en la isla, la encendió una por una con un encendedor-él decía cosas raras- dejo lo que estaba haciendo para ponerme atención.
-Muchas personas saben muchas cosas Alex- la mire confundida.
-¿Y era necesario lastimarme la muñeca?, ¿acaso sabes quién fue?- dije fastidiada.
-No, pero sabe lo que eres, hay que ser cuidadosas con ellos- ¿ellos?
-¿ellos?
-Vamos a la sala, es hora de que sepas todo- me baje de la isla y mi madre se llevó las velas con ella.
Me senté en el suelo, frente a la pequeña mesa de centro, poniendo mi mano sobre la mesa, y madre se sentó frente a mí y puso las velas alrededor de mi mano, ya encendidas.
-Relaja la mano- dijo tranquila.
-¿Que harás?- dije preocupada.
-Te voy a curar- me dijo como si fuera muy obvio.
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Vibrantes
General FictionMe llamo Alexa Smoke. La chica que desafió su naturaleza. La bomba de tiempo humana. La persona que vivió engañada toda su vida. La chica sobre valorada que exploto su fuego interior y construyo su propio camino. Pensando que era una falla de la na...